Thinking of you || Edson Puch

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Edson no se movió por unos segundos, pensé que no me iba a devolver el beso, sino que me iba a apartar, pero luego reaccionó, me tomó de la nuca y me pegó más a él como si eso fuese posible, juntó su lengua con la mía, y comenzó a jugar con ella. Dios mío. ¿Qué mierda estoy haciendo? ¡Me estoy comiendo al Edson! ¡Y ni siquiera me gusta! Lo peor de todo es que lo estoy disfrutando, el hueón sí que sabe dar besos... por eso la vieja debe estar loca por él... Pero ahora todo iba a cambiar iba a hacer que este tipo se volviera loco por mí.

                Él tenía una de sus manos en mi nuca y la otra en mi cintura, pero las hizo descender hacia mi trasero, acunó mi trasero en ellas. Agarré sus manos con las mías, y las puse sobre mi cintura. Él separó sus labios de los míos me miró con la ceja enarcada, aproveché de tomar un poco aire, y luego lo volví a besar sin dejar que hablara y rompiera "el momento"

                Me agarró de la cadera y me pegó a su cuerpo. Mierda. Podía sentir su erección presionar contra mí, já, era tiempo de parar con el beso, ya había logrado lo que quería. Así que lo empujé de los hombros y me separé de él.

—Suficiente por hoy Edson— le dije. Él me miró completamente aturdido.

—¿Qué? Flaca...— dijo con la voz rasposa— no me puedes dejar así...— sonreí de manera maliciosa.

—Ups, creo que ya lo hice...— me acerqué a él. Él me miró con deseo. Já. Le di un piquito y luego me alejé— sueña conmigo "papi" — le guiñé un ojo. Y luego me fui de ahí, sentía la mirada de Edson quemar en mi espalda, pero no me iba a dar vuelta.

—¿Y tú? — me preguntó Charles, cuando volví a su lado, me senté encima de sus piernas—Te demoraste caleta en el baño ¿Acaso ya me cambiaste? — pregunté. Enarqué una ceja.

—No sabía que éramos exclusivos o algo...

—No lo somos, pero lo único que te pido es que no te tires a ninguno de mis compañeros porque esa mierda haría mucho drama...

—Bueno— le guiñé el ojo y luego besé su mejilla. Por el rabillo del ojo vi a Puch acercarse, me miraba de manera intensa, pero no lo miraría.

—Ya muy bien, porque tirarse a la misma mina que el compañero no es para nada bueno...— dijo el Charles. Igual no me pensaba tirar a Puch, sino que pensaba volverlo loco por mí, pero no le iba a dar la pasada si el hueón no me interesaba, de hecho lo encontraba feo, más encima si me dejara le haría un buen arreglo en los dientes porque los tiene chuecos y le vendría bien un buen blanqueamiento láser... No sé cómo a mi mamá le gusta este tipo... No le encuentro nada, o sea solo da buenos besos y quizás tira bien...

                Me devolví al hotel no en tan buenas condiciones, estaba media ebria y me estaba costando un poco caminar, el Enzo me tuvo que llevar en brazos a mi pieza. El Charles quería llevarme él entre sus brazos, pero sentía que lo iba a quebrar porque es muy flaquito y bajito, y yo no soy muy liviana, así que mi "amigo" Enzo me llevó.

—Ya estamos aquí Isa ¿Dónde tienes la tarjeta? — preguntó. Mm la tarjeta para abrir la puerta. ¿Dónde dejé esa mierda? La tenía en mi sostén junto a mi celular. Apunté a donde estaba— ya sácala tú, yo ni loco la saco de ahí...

—¿Y por qué no Enzito? — pregunté con un intento de voz coqueta— Si yo no muerdo— él rodó los ojos.

—Isa yo respeto a las mujeres, no voy a meter mi mano entre tus pechos mientras estás ebria, ni siquiera para buscar la tarjeta para abrir la puerta— bufé. ¿Por qué era tan caballero? Lo odio. Yo feliz de que me falte el respeto. Ay Isa culia, eres una zorra.