Amor vs Amistad

Conociéndonos.

 El lugar era silencioso. Rodeaba la calma y tranquilidad. Si uno dejara de lado las lápidas bien organizas sobre el pasto, se creería que era algo parecido a un Rosedal por lo armonioso del ambiente.

-¿Me recuerdas el por qué te vistes así?-

 Desde que entraron habían guardado silencio, algo normal entre ellos. Se limitaban a pasar tomados de la mano por el camino medio ancho que separaba una sección de la otra. De vez en cuando se encontraban con unas bancas y algunas personas. Para sorpresa de Riven, Musa los saludaba como si fueran hermanos y de una manera demasiado educada como para que esas palabras salieran de la boca de ella.

-Es como todas nos vestimos aquí, ¿no ves?- le explicaba aún tomada de su mano caminando tranquilamente.

-¿Por qué tan tapada?- la miró -Bueno, la mitad- se dio cuenta que para su consuelo, Musa usaba una pollera desde la mitad de la cintura hasta sus pies, y de recompensa por la prenda anterior, una remera tradicional de su planeta sin mangas y que dejaba ver su estrecha cintura junto con su pequeño ombligo.

-Riven- exclamó con una sonrisa pacífica, luego se sentó en una de las bancas junto a él -Aquí se considera una falta de respeto al hombre presumir las partes privadas- Riven pensaba que si no se situaran justo allí, ella en ese momento usaría otras palabras -No puedes usar una falda corta ni un pantalón, tampoco se considera educado un escote exagerado- su manera de hablar le hacía acordar a la de Flora o la de Helio llegando a un extremo donde ya no la reconocía.

-¿No te parece machista?-

-De hecho si lo piensas mejor es para evitar a las mujeres atrevidas. Las faldas cortas y ropa interior atrevida se compran una vez que estés casada, si no, no te lo permitirán-

-Dices que es para...-

-Evitar que los hombres de aquí miren a otras mujeres que no sean su esposa-

-¿Y nosotros?-

-¿Ustedes que?- preguntó confundida.

-¿Cuáles es nuestra regla de vestimenta? Creo que yo no estoy cumpliendo con ella- 

 Musa miró sonriente la vestimenta de su novio. Si, de remera, jean y zapatillas no era la manera en que se vestía un hombre de allí. Pero no se alejaba mucho del estilo.

-No estás mal. Generalmente usan zapatos formales y sacos elegantes con hombreras- él le regaló una sonrisa para luego abrazarla aferrándola a si mismo desde la cintura.

 Se arrepentiría de haberle corrido la cara cuando Riven tenía todas las intenciones de besarla, pero no estaba permitido tantas muestras de afecto en un lugar como en el que se encontraba.

-Lo siento- le susurró mirando para abajo.

-Tranquila, continuemos- cambió de tema luego de levantarse y ayudarla a hacer lo mismo.

 ...

 Al estar unos minutos caminando, finalmente se adentraron al pasto. Se detuvieron cuando ella buscaba algo con la mirada. Luego le soltó la mano a su acompañante para caminar presurosa pero relajada hacia una árbol donde frente a él, se encontraba una lápida en la tierra.

-No llegaba ni a los treinta al irse- dijo Musa sentada frente a la inscripción del nombre se su madre.

  Al ocultarse el Sol,                                                                                                                                                                las ves brillar,                                                                                                                                                                          ...