Estaba desayunando solamente cereales, lo cual es raro en mi ya que como cómo un cerdo a la mañana. Sucede que no fue buena idea ayer pedir tres bochas de helado de chocolate.
Es que el chocolate me puede en todos los sentidos.
Tocan la puerta y no me molesto en abrir, si es mi padre entra de la nada y si tocan la puerta, como ahora, debe ser alguien para mí madre.
-¡Hija! ¿Puedes abrir la puerta? Estoy pintando mis uñas y no puedo tocar nada-escucho a mi querida madre decir. Ruedo los ojos, no quería levantarme y camino hasta la puerta para luego abrirla.
Observo a mi hermano quien está ahí parado, el está llevando una remera gris que si mal no lo recuerdo le regale en su cumpleaños y unos jeans negros.
-Hola hermanita-va saludarme pero yo simplemente lo ignoro y me voy a donde está mi cereal de nuevo. Creo que el no está consciente de que todavía estoy enfadada, idiota.
-Tanner-digo cortante. El rueda sus ojos y yo ignoro eso. Meto una cucharada de cereal a mi boca y dios, amo los cereales de chocolate.
-Oh, mi bebe-mi madre va corriendo y abraza a Tanner con efusividad. ¿No era que se había pintando sus uñas y no podía tocar nada?
Aparte, está un poco viejo para llamarle bebé, tiene diecinueve años. Ugh.
Actuó con normalidad porque esta mi madre, ya que no quiero que me pregunte porque soy una perra con el, que es exactamente como estoy planeando actuar con el ahora.
Estoy enfadada. Mucho.
No me molesta el hecho que ellos dos salgan, me alegra de algún modo, ya que a los dos los amo y si son felices debo yo tambien ser feliz.
Pero es mi mejor amiga y mi hermano. Ambos son dos personas que pueden confiar en mi ¿Cierto? Me duele no ser la primera en enterarse y más que haya pasado bastante tiempo y ellos me lo ocultaron.
-Te extrañe hijo-sigo con la vista en mi cereal. Siento sus miradas en mi pero la ignoro.
-Sara-fingí no escuchar a Tanner.
-Sara-¿ahora mi madre?. Levantó mi cabeza encontrándome, que si, ambos están observándome.
-¿Podemos hablar?-pregunta y Ruedo mis ojos, no puede ser tan estúpido este chico. Odia que ruede los ojos por lo que frunce el ceño.
-¿Que sucede?-miró a mi madre con una sonrisa notoriamente falsa. No entiendo porque Tanner es tan corto de mente para decir algo sobre el tema en frente a mi madre.
Estoy segura que el no quiere soportar el interrogatorio de mi mamá, y yo menos.
-Hermanito, podemos hablar luego-digo con una amabilidad, claramente falsa. Espero que Tanner haya notado mi sarcasmo, porque al parecer mi mamá no lo noto-Queridos miembros de mi familia, tengo que irme a estudiar, para ser alguien en la vida. Adiós-digo con ironía a lo cual, cuando salgo de mi casa, sonrío por lo exagerada que fueron mis palabras.
El camino al instituto se me hace rápido, estoy cansada pero me niego a llegar tarde de nuevo. Lo primero que hago cuando entro , como todos los dias, es buscar a mi mejor amiga.
-Sara- me volteo al escuchar la voz de Morgan y me sorprendo al verla al lado de un chico un poco más alto que ella que juro haberlo visto otra vez.
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Nunca me voy a fijar en ti
Подростковая литература"Uno no elige de quien enamorarse, aunque sea todo lo opuesto a lo que quieres, no basta para obligarse a no sentir nada" ____________________________________ TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS ____________________________________