Pactando Reglas

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Nos estaba mirando sin decir una sola palabra, estaba en shock. Sus grandes ojos color café perforaban la escena como dos balas. J levantó su cabeza y en cuanto la vio tomo el arma y con mucha suavidad le apuntó sin dejar de abrazarme.

-Mama...- Dije algo confundida con un tono de voz quebrado.

Mi madre de inmediato y sin decir una palabra llevo su dedo a sus labios en señal de que nos quedáramos callados y con su otra mano interponía su propia vida y el arma de J.

-¿Nia esta en casa amor?- La voz de mi padre retumbó en la casa.

Un pequeño silencio le dio tiempo a mi madre para formular una mentira.

-¿Claire...?-

-No- Dijo con una voz firme sin sacar los ojos de encima nuestro. -Seguro esta con Mike, ve a acostarte que ahora la llamo-

-Ok, despiértame cualquier cosa- Se escuchó el sonido de la puerta cerrarse.

Mi madre cerró la puerta de mi cuarto con llave y J se puso de pié sin dejar de apuntarle.

-Mama espera..- Me levanté también. -Esto no es lo que piensas, el... el no esta haciendo nada malo- Mire a J -Baja el arma-

-No hasta que me vaya de aquí- Rió un poco. -No volveré a esa celda de porquería-

Mi madre levantó sus manos demostrándole que no iba a herirlo.

-Si tu no lastimas a mi hija entonces yo no te lastimaré a ti...- Dijo ella seria

-De todas las personas a las que quiero hacerles daño en esta casa- Negó. -Tu hija esta en último lugar-

Lo miré. Sus ojos penetraban fuertemente en los de mi madre y ninguno de los dos iban a rendirse en este momento.

-Entonces baja el arma Jack- Dijo mi madre.

¿Como sabía su nombre?

-Baja el arma para que podamos conversar sin problemas-

J lentamente lo hizo y se la guardó en su pantalón. De la nada esbozó una gran sonrisa y me tomó de la cintura

-¡Princesa! ¡No me dijiste que hoy tendríamos una reunión familiar!- Rió.

Di un suspiro y mi madre se acercó a nosotros lentamente.

-Hija... - Me miró. -¿Que es todo esto?- Frunció el ceño. -Estas... estas lastimada, luces mal mi amor...- Acarició mi mejilla.

-No es nada- Negué. -Salimos a un club con mis amigos la noche que se fueron de la nada y lo asaltaron, me pegaron un poco a mi y a Mike y J me salvó- La miré. -Si no hubiese sido por el no se que hubiera pasado-

Mi madre miró a J y movió su cabeza suavemente.

-Muchas gracias señor, parece haber sido todo un héroe-

-No- Rió y negó. -Simplemente no me gusta compartir la comida- Me sonrió y besó mi mejilla.

Giré mis ojos y me madre se quedó callada unos segundo.

-Mama... no se como decirte esto es que... creo que no hay mucho que decir-

La miré y en sus ojos pude ver algo de decepción, tristeza y una pizca de miedo. Probablemente estaba preguntándose que estuve haciendo todo este tiempo, a que lugares fuí y cuantas veces mi vida corrio peligro al lado de J. Mejor que no sepa eso ultimo.

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