Property Of

Extrañamente normal.

Abrí mis ojos y sentí un rayo de sol entrando por la ventana. Estaba algo aturdida y no sabía donde estaba. Un fuerte dolor hacia casi imposible que pueda mover mi cuello y sentía mi piel rozando las frías sabanas de la cama de... ¿J? Estaba en su Pent House.
Me senté lentamente en la cama sintiendo distintos dolores, por favor, últimamente estaba por morir una vez por semana.

-¿J....?- Dije algo asustada y con mi voz quebrada. -¿J estas ahí...?-

Escuche silencio durante unos segundos pero luego sentí pasos acercandose a la habitación.

Primero vi si hermoso cabello brillando en el minuto en el que cruzó la puerta. Estaba con una camisa color vino abierta dejando ver sus tatuajes. Tenía en la mano un vaso de agua y un blister con pastillas. Me miró y me sonrió, se acercó rapidamente a mi y puso su mano en mi mejilla.

-Nia- Sonrió. -Quería que durmieras un poco mas ¿Te desperté?-

-J...- Fruncí el ceño. -Que..¿Que paso? ¿Por qué estoy aqui?- Lo miré aterrada. -Mike! ¿Donde esta Mike?! ¿¡Esta bien!?-

-Shh- Dijo callandome para besar mi frente. -Tranquila, ahora hablamos de todo. Tienes que...-

-Megan- Quise pararme pero el me tomó de los brazos. -Megan J, tengo que ver si esta bien. Dejame ir, estoy bien-

-Nia Nia Nia- Dijo sosteniéndome con fuerza. -Tranquila, no estas bien, no puedes salir ahora-

-Sueltame J- Comencé a llorar. -Tengo que ver como estan, algo paso con ellos, dejame ir-

-Nia- Me miró y yo solo comencé a llorar descontroladamente.

J me miró con una tristeza que jamas vi en el, parecía otra persona. No era tristeza si no mas bien... Seriedad, estaba pensando mucho. Algo en mi me decía que por primera vez me estaba comprendiendo con todo lo que quedaba de ese loco corazón que tenía.
No podia parar de llorar por lo que el me abrazó y yo recoste mi cabeza en su pecho sintiendome contenida con firmeza por el.

-Tranquila Nia, no llores... ¿Recuerdas algo de lo que paso?-

Negué con mis lagrimas rodando por mis mejillas y cerre los ojos.

-Solo recuerdo a Mike en el piso... ¿Como esta el J?-

-El esta bien, me encargué de que lo dejaran en el hospital, tuvieron que coserle la maldita herida, la bala lo acarició solamente. Esta en su casa. - Rió un poco. -No todos son como Mr J eh?-

Reí entre lagrimas y lo miré a los ojos. Estaba calmado, no notaba muchos tics en su cara y sentía su corazon latir lento.

-Si- Asintio. -Segundo día con las pastillas, quería sorprenderte-

-¿No estas enojado conmigo?- Dije mirandolo a los ojos con la esperanza de que dijera que no pero...

-No hablemos ahora Nia, relajate.-

-¿Donde esta Megan?-

-Ella también esta bien, pudo salir cuando vio que la gente corría, esta en su casa-

-¿Y que hago yo aquí?- Fruncí el ceño. -¿Mis padres no preguntaron por mi?-

-Tus padres salieron de viaje 3 horas despues de que te fuiste, te llamaron pero te olvidaste el teléfono en lo de Megan ¿Ni te diste cuenta verdad?-