BOY MEETS WHAT.

031. House of cards.

[Taehyung]

- Hobi- hyuuuuung! – gritó Jimin mientras corría hasta lanzarse sobre él. Recibiéndolo Hoseok con una gran sonrisa, y con sus ojos posados solo en el menor.

Apreté mis puños hasta que mis nudillos quedaron blancos.

- Jiminie. – le respondió, antes de que los demás miembros se aventaran sobre su cuerpo.

Lucía diferente, su cabello estaba un poco más corto de lo usual, y había regresado a su color natural, luciendo un negro que se confundía fácilmente con la noche. Había adelgazado demasiado, dándole un aire de ser frágil. La sonrisa seguía siendo la misma, como si no hubiera sufrido nada a lo largo del tiempo, siendo yo el único que pensaba en él, todos los días.

Me quedé en silencio permaneciendo alejado de toda esa escena, sintiéndome un extraño dentro de la sala, no pertenecía más a esos brazos.

- Me dijiste que regresabas en la noche. – comentó Jin, cuando el abrazó había terminado, y todos habían dados dos pasos atrás, excepto Jimin, que seguía bajo el brazo de Hoseok.

- Quería sorprenderlos. – dijo Hoseok mientras se alzaba de hombros. – ¡Sorpresa!

«Voltea a verme, voltea a verme, solo mírame, una vez nada más» Empezó a rogar mi mente en contra de todos mis sentidos. «Mírame, aquí estoy»

Como si hubiera escuchado cada palabra, giró su mirada hacía mí.

Nuestros ojos se encontraron, haciéndome recordar cada momento con él, cada historia que solo ambos sabíamos, palabras que solo nosotros dos habíamos escuchado... promesas rotas, dolor, dulzura, besos, lagrimas, roces secretos, miradas ocultas, palabras de amor, palabras de tristeza y palabras de odio.

Hoseok había sido el dueño de todo eso en mi vida, era la parte más importante de mi historia, que se divida entre ser amado por el y ser odiado por el, pero en la mirada que seguía existiendo entre los dos, aún permanecía la conexión, que se sentía por todo el cuarto.

El silencio se rompió cuando desvió sus ojos de los míos.

- Hola, Tae. – me saludó después de lo que parecían años. – Luces bien.

- ... Gracias, hyung. – respondí, mordiendo mi labio nerviosamente. – Tú también luces bien.

- Me siento bien... - afirmó en un tono seguro.

El ensayo de sonido terminó diez minutos después, cuando nos fue permitido salir antes para poder cenar con Hobi, quién pidió una cena en el departamento, como excusa de haber extrañado el sazón de Jin, quíen lucía feliz al oír ese comentario.

Hoseok seguía haciendo a las demás personas felices con cada palabra que pronunciaba, pero cada vez que evitaba mi mirada, destruía lo que yo pensaba había sido real entre nosotros dos.

- ¿Y si jamás te quiso como te prometió? – recordé las palabras de Jade. Aquella frase que me negué a aceptarla una y mil veces, confiando en que, Hobi regresaría a mí, en algún momento. – Te dejo, y ni siquiera se despidió de ti. Una persona que te ama, no hace eso.... Aquí el único que salió como tonto fuiste tú, a-m-o-r.

¿Y si al final había tenido razón? En ese mismo instante, Hope lucía mucho mejor de lo que esperaba, no reacciono ante nuestro encuentro, como si el aceptar que lo nuestro hubiese terminado hubiera sido tan sencillo, cuando a mí me costó noches enteras.

No quería aceptar el hecho de que Kim Taehyung podría ser orgulloso e incluso en algún momento rencoroso, pero saber que la persona que me había amado y destruido en noches contadas, estaba sentado frente de mí, comiendo y charlando felizmente.