La vida por delante (Nathan Sykes, The Wanted)

9pCapítulo 15

Capítulo  15

Era la mañana del otro día y no tenía ni la menor idea de dónde podía estar mi papá o mi mejor amiga, pero sinceramente no me importaba, porque yo estaba cumpliendo mi sueño.

Narra Nathan:

Marian... Marian... Marian... Ese nombre no puede dejar de sonar en mi cabeza, no se si se habrá dado cuenta pero me levanté unas horas antes que ella y me quedé observándola,  parecía la bella durmiente.

Me debo haber quedado por lo menos 3 horas observando a aquella princesa, es simplemente perfecta, justo tiene 18 años y no puedo dejar de pensar en la charla que tuvimos la noche anterior.

Nunca antes me había hecho tan bien hablar con alguien, pensé que lo de Marian iva a ser cosa de una sola noche como suele suceder comunmente pero me equivoqué,  tal vez yo quiera tener algo con ella.

- Buenos días princesa

- Buenos días Nathan, te debes haber dado cuenta de que no continúo siendo una princesa en las mañanas,  ni siquiera soy una princesa, no se por qué dices eso. Dije levantándome de la cama.

- Si lo eres, ¿Quieres ir a desayunar?

Antes de que pudiera responder esa pregunta Tom Max Siva y Jay entraron y comenzaron a alocarse, se ve que ellos igual tenían llave.

- ¡Hey chicos! ¿¡Que hacen aquí!?

Tal vez Nathan se había puesto medio histérico por la escena en la que habíamos quesado, parecía que nos estabamos a punto de besar.

- ¡Hola! ¿No? Nos dijeron los chicos al unisono.

- Hola. Contestó Nathan.

- ¡Hola chicos! Contesté yo entusiasmada mientras me paraba y los saludaba uno por uno.

- Hey Nathan veo que estuviste muy ocupado como para salir con nosotros ayer. Dijo Jay.

- Chicos esto no es lo que parece. Dije yo tratando de que ellos no malinterpreten la escena

- ¡No necesitamos dar explicaciones! Chicos estábamos en algo importante, vallanse. Dijo Nathan

- No, deja, me voy yo, no quería causar todo esto. Dije yo tomando mis cosas y caminando para salir de la habitación.

- ¡No! No te preocupes, esto no es tu culpa, tú no lo causaste. Me dijo Tom.

- Nathan está así desde hace ya algunos días, pero no es por tu culpa, a todos nos pasa a veces y hay que aceptarlo. Dijo Siva

- ¡Nos vamos! Dijeron los chicos como en una sinfonía dejandome sola en la habitación con Nathan quien me miraba de una forma extraña.

- Nathan, ¿Está todo bien?

- No. Contestó con una ronca voz.

- Esta bien, no me cuentes lo que te pasa, total nunca lo hicieste, me voy. Dije tomando mis cosas y saliendo por la puerta.

comencé a correr lo más rápido que podía y no podía creer que Nathan ni siquiera me había parado, hasta que al cabo de que corrí 5 cuadras apareció.

- Marian, por favor no hagas las cosas dificiles

- ¿Qué cosas Nathan? Ni siquiera las puedo saber si tu no me lo dices, ¿Sabes Qué? Yo te conté mi vida entera y tú ni siquiera meuedes contar lo que te pasa para poder ayudarte

- Marian no es así

- Sí Sí es así. Dije mientras partía en llanto.

-¿Marian?

- Creo que me tengo que ir Nathan adiós.

Antes de que pudiera dar la vuelta él me agarró de la muñeca delicadamente impidiendo que me valla.

- No te vallas Marian, no es que no te quiero contar, es que no sé como te va a caer la noticia y no quiero hacerte sentir mal

- ¿Tan mala noticia? Dije yo secándome las lagrimas.

- Si. Contestó él.

- Dímela Nathan

- Ariana está embarazada...

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