Sentí que mi mundo se me caía abajo. Esto no podía ser cierto, ¡Leeteuk y Sora besándose! los estaba viendo con mis propios ojos ellos estaban frente a mí y como una tonta seguía de pie ahí hasta que Luna se a cerco a mí.
— (TN) ____ —dijo casi a gritos acercándose a mí— ¡llegaste!—cuando llego a mí me tomo fuerte del brazo, ella también había visto aquella escena—
Leeteuk se dio la vuelta muy rápido separándose de Sora cuando escucho la voz de Luna pronunciar mi nombre. Me miro asombrado levantándose de su asiento, Sora lo miro algo confundida sin saber porque estaba tan perturbado.
— (TN) ____ ¿estás bien?—me pregunto Luna algo preocupada—
— Si estoy bien...—dije en un susurro. Aclare mi garganta y trate de serenarme, este no era el mejor momento para tensarme podría ser muy evidente—
Camine junto a Luna fingiendo estar bien y fui hasta donde estaban Jesica, Donghae y Yesung. Salude correctamente a ellos que estaban sentados. Trate de fingir mi mejor estado pero no lo logre con éxito.
— (TN) ____ ¿estás bien? Pareces algo preocupada...—pregunto Jesica mirándome de reojo—
— Ehhhh... si... yo...—Luna intervino—
— Esta algo preocupada porque tiene un parcial dentro de unos minutos ¿verdad?—me pregunto mirándome—
— Si... así es—respondí algo nerviosa—y tengo que volver, se me hace algo tarde...
— Yesung te llevara ¿verdad Yesung?—Luna miro rápidamente a Yesung—
— Si claro...—Yesung ya se estaba poniendo de pie—
— No es necesario Yesung—intervine—yo puedo tomar un taxi.
— (TN) ____ deja que te lleve...—sugirió Luna—
No quería que él me llevara, no me sentía nada bien y no quería que alguien me viera así. Pero ellos se veían tan insistentes, en ese momento eche una rápida ojeada a Leeteuk, el seguía mirándome sin siquiera parpadear, había vuelto a sentarse en su lugar, mientras que Sora atendía su teléfono, por suerte no había notado que miraba hacia donde estaba yo. De golpe sentí que alguien tomaba mi mano desde atrás, me gire rápidamente para ver quién era ¿Quién más podría ser? Henry, que vino de atrás y atrapo mi mano.
— ¡Mi amor! Pensé que no vendrías—al decirme eso, beso mi mejilla. No pude reaccionar solo lo mire confundida sin saber que decirle—
— ¡Oh! Hola... pues vine por unos minutos—lo salude sintiéndome una tonta, era más que obvio que el también vendría—
— ¿Minutos?—pregunto arrugando sus cejas—¿ya te vas?—de apoco paso su brazo por la parte de atrás de mi cintura, no pude decirle nada, eso solo complicaría las cosas delante de los demás—
— Si, tengo que volver a la universidad por un examen...—dije de manera rápida, estaba algo aturdida por todo lo ocurrido—me voy yendo... se me hace algo tarde—trate de deshacerme del abrazo de Henry buscando mi celular en mi bolso—
— Te llevo...—se apresuró a decir Henry—
— Tomare un taxi... mejor quédate en el almuerzo, sino te lo perderás...
— No te preocupes llegare a tiempo—dijo ignorando mi respuesta—vamos...—saco la llaves del auto de su bolsillo y tomo mis manos arrastrándome hacia afuera. Solo tuve tiempo de saludar a Luna y a los demás con mi mano—
Ni siquiera tuve tiempo de observar a Leeteuk y a Sora por última vez. Todo sucedió tan rápido que aún no salía de mi asombro como había dejado que Henry me llevara con el hasta su auto y ahora hasta la universidad.
El viaje fue de lo más incómodo, el único que hablo fue Henry yo solo asentía cada vez que él me hablaba, tenía tanto dolor por dentro. No veía la hora de estar a solas y poder soltar toda mi angustia, pero... ¡que tonta era! Tenía que concentrarme en otras cosas ahora.
— Llegamos...—me aviso Henry deteniendo su auto frente a la universidad—
— Gracias...—dije algo seria. Por un momento lo pensé y creo que tal vez no se presentaría una ocasión como esta, tenía que hablar con él. Por más que fuera o no por Leeteuk, tenía que hacerlo y esta era una oportunidad para tener esa conversación pendiente.
— Henry ¿recuerdas que te dije que necesitábamos a hablar?
— Si... lo recuerdo—su mirada se veía muy serena y tranquila—
— Bueno... Podemos hablar ahora ya que...—el me interrumpió—
— ¿Pero mira la hora que es?—miro su celular—es tardísimo... hablaremos después, ahora tienes que entrar a clases...—dijo muy apresurado—
— Pero necesitamos conversar...—exprese tratando de que el aceptara hablar—
— Lo haremos después mi amor ¿sí?—dijo sonriendo. Rodee mis ojos molesta, era el colmo con su actitud nunca lograríamos hablar del asunto—
— ¿Sabes qué? Como quieras...—replique mostrando mi enojo, tomando la manija para abrir la puerta—
— ¡Espera! No te enojes mi amor...—dijo cuando ya casi estaba afuera del auto—
— ¿No quieres hablar? ok... no lo hagas, ya estoy cansada de que siempre sea así...—dije poniéndome mi bolso y dándome la vuelta—
— (TN) _____ no te vayas así, lamento no haberte escuchado—decía cuando ya había bajado del auto—
— Estoy cansada de tus escusas... adiós—dije esto último y me aleje de el caminado hacia la puerta de la universidad—
— (TN) ____ ¡espera!—lo escuchaba decir, pero ya no mire hacia atrás. Lo había intentado pero no conseguí nada, estaba más que claro que él estaba escapando del asunto—
Entre a mi curso y me quede allí sentada en mi lugar. El profesor entro y nos pidió que apagáramos nuestros celulares, tome mi celular y lo apague.
¡Maldición! No recordaba nada de lo estudiado me sentía perdida.
La clase duro exactamente dos horas. Dos horas perdidas, todo lo acumulado en mi cabeza se había perdido. Ese maldito episodio había acabado con todo el estudio que tuve durante varios días. Al terminar la clase tome mis cosas y me dirigí al baño, me encerré en uno de ellos y las lágrimas comenzaron a salir inundando todo mi rostro pensando en lo que había pasado en el restaurante. ¿Por qué? ¿Por qué el había dejado que ella lo basara? Él no me había visto, eso lo sabía, eso era peor todavía, me sentía como una completa tonta, tenía tantas ganas de mandar al demonio todo, principalmente a Sora que siempre estaba metida entre Leeteuk y yo. Creo que estaba demás decir "él y yo" ya no sabía que pasaría entre los dos ¡estúpido Leeteuk! Siempre junto a ella y el diciendo que solo eran amigos, ¡valla amigos!
Después de un buen tiempo allí seque mis lágrimas y tome mis cosas. Tenía que salir de aquí o me volvería loca. Estaba saliendo de la universidad cuando escuche que alguien me llamaba me di la vuelta y el otra vez estaba aquí, Henry quien estaba bajando de su auto, puse cara de pocos amigos al verlo, en este preciso momento quería estar sola y con el dudo que lo lograría.
— (TN) ____—dijo acercándose—perdón que no te halla avisado pero no quería que estuvieras enojada...—dijo esto y me abrazo, respondí a su abrazo solo por unos segundos y luego me aparte de el—
— Esta bien... yo me altere un poco...
— Perdóname ¿sí?—yo asentí—te llevo a tu casa, así charlamos acerca de que querías hablar..
— Bien... —camine junto a él y subí a su auto—
Llegamos hasta mi casa y antes de entrar al interior de ella empezamos a hablar.
— ¿Qué era lo que querías decirme?
— Bueno... Tu... tu y yo... Henry yo no sé cómo...
— ¿Quieres un tiempo?—dijo sin rodeos con su mirada triste. Lo mire sorprendida sin saber que decirle. Él ya lo sabía, ¿Cómo se había dado cuenta?—
— Henry...—el continuaba mirándome muy triste—
— Creo que ya lo presentía... había alguna razón por la cual estabas distante y querías hablar conmigo con tanta prisa—rió sin ganas—creo que me lo merezco....
— Yo... lo siento, no quiero lastimarte—no quería, pero no pude evitarlo y una lagrima rodó por mi mejilla—
— Esta bien... no tienes que sentirte culpable—limpio la lagrima que caí por mi mejilla—tomate todo el tiempo que sea necesario... no voy a estorbarte ni a presionarte... te quiero demasiado y voy a hacer todo lo que sea para que vuelvas amarme...
— Henry... yo no sé qué pasara más adelante...
— Piensa tranquila en lo que quieres, tomate este tiempo que deseas...—decía mientras acariciaba mi rostro—no quiero perderte. Si desistes de mí, are todo para recuperarte... te quiero (TN) ____—me dio un último abrazo. No tuve ni fuerzas para responder a su abrazo. Esto solo alimentaba mi tristeza y mis ganas de llorar. Él se separó de mi mirándome con sus ojos apagados—entra supongo que tienes cosas que hacer...—sonrió apenas y yo asentí—
Baje de su auto y lo vi marcharse. Esto era peor de lo que pensaba había visto a la persona que amaba besando a otra chica y había terminado o bueno, algo así con quien había sido mi novio durante mucho tiempo que por cierto no sabía nada de que quería terminar con el por amar a su mejor amiga. Todo esto era un completo desastre.
Me sentía la peor persona del mundo, sentía que estaba engañando a todos, a todas las personas que quería. Camine sin ganas hasta la puerta de mi casa pero antes de tomar la perilla me detuve, no tenía ganas de entrar, no quería estar sola y ya casi era de noche. Di media vuelta y camina hasta la casa de Luna, solo ella me entendía y sabia como era yo, necesita de mi amiga. Llegue hasta su casa toque su puerta y ella salió de inmediato
— (TN) ___—dijo asombrada y luego me abrazo—
— ¿Tienes tiempo para tu amiga?—pregunte sin ganas—
— Claro que si... pasa—entramos a su casa y nos sentamos en su sofá—
— ¿Dónde estabas? Te llame miles de veces y te deje algunos mensajes...
— ¡Oh! Apague mi celular, debido a mi examen...
— ¿Cómo te fue?—pregunto dudando—
— No lo sé... creo que mal... no pude concentrarme del todo...—suspire tratando de no pensar mas en ello—en fin, como sea ya está...
— ¿Estas mal por lo que viste? ¿Quién era esa tipa?
— Es Sora, ella y Leeteuk fueron juntos a la universidad... él estaba muy enamorado de ella...—dije de mala gana—
— Pues es una ofrecida...—comentó Luna muy molesta—estuve viéndola sigilosamente y prácticamente se le tiraba encima a Leeteuk...
— Luna él también la beso...—dije recordando aquel triste momento— ¿crees que el sienta algo por ella también?
— (TN) ____ ¿Qué dices?—me reprimió Luna—al menos ¿ya hablaste con él? ¿Te dio alguna explicación?
— No, aun no lo he visto, y sinceramente no quiero verlo ahora...
— ¿Y Henry?
— Pues...—dije haciendo una mueca—hable con él... hace un momento y... nos vamos a tomar un tiempo...—respondí sintiéndome de lo peor—
— ¡Oh! ¡Valla!—exclamo Luna sorprendida— ¿y cómo te sientes después de esto?
— No sé qué hacer, aún no fui del todo sincera con Henry...
— Al menos ya empezaste con algo... tranquila amiga—dijo sosteniendo mis manos—por hoy no hablemos de esto ¿sí?—dijo sonriendo—
— Me parece bien—asentí también sonriendo— ¿no te estoy interrumpiendo nada con Yesung?
— No... hoy no saldré con el Yesung él tenía cosas que hacer... así que hoy vamos a tener noche de chicas...
Reí ante su idea, una noche de chicas no me vendría nada mal. Recuerdo los que los primeros meses en Corea cuando recién había llegado y me hice amiga de Luna, antes de salir con Henry nos juntábamos en mi casa o en la suya y veíamos películas hasta la madrugada comíamos pizza y luego kilos y kilos de helado. Con solo eso yo era totalmente feliz. Por esta anoche quería olvidarme de todo y disfrutar de este momento con mi amiga.
Esa noche me quede a dormir en la casa de Luna, dormí junto a ella como lo hacía antes después de nuestra famosa noche de chicas. Me levante con un poco de dolor de cabeza habíamos bebido un par de cervezas y eso ahora estaba haciendo efecto.
Desayunamos juntas y luego cuando ella tenía que ir a su trabajo decidí volver a casa, me despedí de Luna agradeciéndole por todo su apoyo y luego me marche.
Decidí caminar hasta llegar a mi casa era un día soleado, era perfecto para caminar un poco, además no tenía apuro. Llegue hasta mi casa, tome las llaves de mi bolso y la metí en la cerradura, estaba punto de abrir la puerta cuando alguien desde atrás agarro uno de mis brazos tomándolo con fuerza y haciéndome girar quedando de frente a él. ¿De quién más podría tratarse? nada más y nada menos que de Leeteuk...
— ¿Qué haces aquí?—pregunte mirándolo confundida—
— (TN) ____ tenemos que hablar—hablaba muy rápido y acelerado, me miro de arriba a abajo y volvió a concentrarse en mis ojos, ahora su mirada mostraba preocupación— ¿Dónde estabas?By Ina Kim ♥
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Cuando deseas lo prohibido
DragosteCuando el amor entre ellos nació supieron que era prohibido. Pero cuando el amor y el deseo llaman a dos personas, no hay poder humano que pueda frenar aquella pasión...