Capítulo 5

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4:30 p.m. (Del mismo día)

No hay nada bueno que hacer en el trabajo y ya terminé de ordenar el nuevo cargamento de libros que llegó. Estoy parado detrás del mostrador, esperando que alguien entre, pero es lunes y sé que eso no posará. Así que he decidido sacar este estúpido cuaderno y escribir. Creo que me saltaré mi rutina por la mañana e iré directo a lo que pasó en la escuela.

Todos estábamos afuera del colegio, esperando a que la campana sonara. Solo los nerds entraban antes. Yo estaba recostado en mi moto con los brazos cruzados sobre el pecho. La única que faltaba era Audrey, pero seguramente vendría con la fastidiosa de su hermana.

Mike, un chico con piel morena, estaba junto a mí, mostrándonos la moto que su padre le había comprado. Yo no dejaba que mi padre pagara por nada más que no fuera mi educación, comida y ropa. Todo lo demás lo pagaba con mi trabajo en la librería.

Quince minutos antes de que la campana sonara un convertible negro se estacionó un poco más allá de donde nosotros estábamos. Audrey se bajó sonriendo con arrogancia y como siempre llevaba la falda más arriba de lo que debía y el suéter puesto para que nadie notara los tatuajes, aunque todos sabían que nosotros teníamos tatuajes y piercings.

Ella empezó a caminar hacia nosotros con una sonrisa malévola. 

—¿Qué hiciste? —le pregunté cuando estuvo lo suficientemente cerca.

–Le dije a Alex que la falda se usa así —dijo hacia su corta falda.

Segundos después Alex salió de su auto mientras se colgaba la mochila en el hombro. La pobre trataba de componerse la falda del uniforme, sintiéndose incomoda por llevarla tan corta.

—Eres mala —le dije sonriendo y todos rieron.

—No la soporto —dijo rodando los ojos. 

—¿Entonces por qué la tratas bien? —Liam preguntó.

—Porque si eres amigo de Alex ella te da regalos.

—Interesada —dijo Louis.

—Eh, eh. ¡Miren! —Brandon dijo señalando hacia Alex.

Harry Styles, uno de los nerds de la clase, iba leyendo sin percatarse de que caminaba en dirección a Alex. Él chocó contra ella y los dos botaron sus libros al suelo. Se agacharon para recogerlos. Alex le pasó sus gafas y él se las puso. Recogieron sus cosas y él le extendió la mano, ayudándola a levantarse. Los dos intercambiaron palabras y comenzaron a caminar hacia adentro del colegio.

—Has perdido tu encanto, Louis. El nerd va a tirársela antes —dije riendo.

A primera hora todos estamos hablando y lanzándonos cosas. Nos toca Historia y el profesor no ha llegado. Cuando llega nos ordena que hagamos silencio y segundos después Alex aparece. Toca la puerta y el profesor la deja pasar, pero antes de que ella pueda irse a sentar él le pone una mano en el hombro deteniéndola.

—Chico y chicas ella es... —dice dejando la oración mientras trata de recordar el nombre de la chica que tiene junto a él.

—Alex Cohen —dice ella.

—Alex Cohen. Ella estará con nosotros. Tengo entendido que el programa en su colegio va adelantado, así que espero que no le cueste adaptarse. ¿Trajo los trabajos que pedí durante el mes?

Él esperaba que ella dijera que no para reprenderla, pero para sorpresa de todos ella sacó una carpeta negra y se la entregó. Luego se dirigió al único lugar vacío, que para su mala suerte era enfrente de Louis, quien estaba a mi lado derecho.

Louis la molestó durante toda la clase mientras ella trataba de ignorarlo.

Las demás clases pasaron así. Louis, Brandon o algún chico calenturiento tratando de sentarse cerca de ella para tener una mejor vista de sus piernas.

Debo decir que en este mundo nadie es perfecto, esto no es una novela para adolescentes con las hormonas alborotadas, pero las piernas de Alex eran un buen atributo que los chicos tenían el placer de admirar y más gracias a la “broma” de Audrey.

Y como era de esperarse a la hora del almuerzo ella se sentó con nosotros. Louis y Brandon sentaron a sus lados ahorrándome el disgusto de sentarme con ella. Ella apenas comió y creo que fue porque esos dos idiotas la hacían sentir incomoda.

El resto del día fue normal. Nos dejaron un par de tareas, pero nada extraordinario. Cuando el timbre de salida sonó salí de la escuela, me monte en la moto y me dirigí a la librería. Y cuando llegué...

—¿Por qué te detuviste? —James le preguntó a su nieta.

—Él dejó de escribir y papá ya vino por mí.

—Oh.

Hanna le dio un beso en la frente a su abuelo.

—No leeré nada, lo prometo —le dijo antes de salir por la puerta.

(Feliz Navidad!!! :D Espero que se la pasen super. Por favor voten y comenten xoxo)

The True Happiness (Versión en español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora