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Quería más,  quería más de esas sensaciones frenéticas qué inundaban su cuerpo cómo corrientes eléctricas y olas de calor.

El edgar que estaba ebrio a más no poder besó en la boca al naiko esta vez parecido a un beso adulto.

En una pasividad qué costaba creer,  el naiko cayó rendido,  abrazó al edgar rodeando su cuello y le seguía el ritmo.

Pero algo asustó al pequeño,  el edgar refregaba sus entrepiernas y a el le empezaba a doler,  dentro de lo alcoholizado que se encontraba y lo caliente qué estaba,  para que le dejara de doler bajo sus pantalones,  y con miedo pasó a rozaral del edgar quién primera vez en la noche cruzaron miradas,  el naiko estaba colorado y con los labios hinchados,  el edgar pensó lo sexy que se veía,  claramente no estaba en sí,  el naiko retiraba su manita por susto,  no sabía como reaccionaría el edgar,  pero este solo tomo su mano y la guió donde estaba antes,  el naiko se enrojecio más,  nunca había tocado el pene de otra persona menos el de su amigo,  pero estaba humedo y muy caliente,  y no podía negar,  se sentía muy rico el rosar de sus miembros. 

El edgar masturbaba ambos miembros con rapidez sumiendo a ambos en un placer inexplicable,  y siendo tan jovenes e inexpertos respecto al tema,  llegaron a su límite, el pequeño fue el primero en venirse de los dos,  mientras que el edgar aún en ese trabajo no llegaba,  volteo al naiko y este sin darse cuenta le aprisiono,  su dureza punzaba en su trasero,  subía y bajaba, se sentía tan extraño,  el edgar levantó sus caderas dejando al naiko inmóvil cuando sentía que se corrían entre sus nalgas.

Al día siguiente,  el naiko fue el primero en despertar,  vio que era abrazado por el gigante oso cariñosito - Edgar culiao me tiene todo transpirando- al tratar de salir de su agarre,  se dio cuenta de algo,  sentía húmeda la entrepierna,  se toco con miedo bajo sus bóxers y al tocar,  recordó todo,  su linda y palida piel se transformó en un lindo tomate,  observó al edgar quién seguía raja y corrió de ahí.

...

Al siguiente lunes,  el edgar no había visto al naiko,  preguntó por todos lados y a cualquiera que ambos conocieran,  pero ni rastro del.

Cuando al fin llegó,  el naiko se fue directamente a su puesto con el edgar pero vio que en su sitio estaban las cosas de otra persona,  cuando tocaron para entrar a clases el naiko vió al edgar con su antigüo amigo,  el Manuel,  este chicó quién no dejaba de colgarse del mayor como una solapa, cuando lo vió este lo saludó con la mano muy algre,  el naiko solo le dedico una mirada fulminante,  el edgar al ver al naiko sentado en otro puesto hablaba con una chica,  la joven de los videojuegos. Se veía bien haciendo vidad social,  hablando con demás gente que no fuera él...

Pasó la clase y era hora de almuerzo,  el edgar se paro primero y fue en busca del naiko,  este solo lo siguió en silencio,  siendo arrastrado por su amigo...

El Manuel los siguió quería saber que era lo que pasaba,  llegaron a la ultima planta,  cansados,  se sentaron se miraron y conversaron,  reían relajados y muy cómodos, el édgar abrazaba al naiko de manera amistosa y este no sentía qué algo cambiase. Así que se armó de valor y le dió un besó en la mejilla agradeciéndole por todo, el ambiente se tensó un poco esperando la respuesta del edgar,  este solo creyó que le respondería, le sujeto el mentón y se acercaba peligroso a su boca.

Estaba a punto dé... Olvidenlo el Manuel tan inoportuno interrumpió justo,  el naiko lo miró desconcertado y el edgar reflexionó sobre su actuar,  pidió disculpas por su irrupción pero la profe necesitaba al presidente del curso, el edgar de inmediato se disculpo por eso tan repentino y fué,  dejando al Manuel y al naiko ahí solos.

Él se acercó donde el naiko,  y este incómodo se paro decidido a irse, pero...

-vi,  lo que intentaste con el eddie,  que astuto,  los calladitos son lo peor. -

El naiko volteo palido dónde el- qué viste?  De qué hablas...?-

-ay, no te hagas el tonto,  sabes de lo que hablo,  y sí, yo también quiero al edgar, mucho más qué tú porqué lo conosco desde antes y no sabes como es el- dijo con un tono melanco,  volteó y observó por la ventana y continuó,  - por eso mísmo quería pedirte un favor Nicolás,  quiero que te alejes del,  que no le hables más,  créeme será lo mejor pars ambos,  o a caso quieres que todo se enteren de que eres gay? No crees que el edgar se sentirá disgustado y no querrá hablar más contigo devido a la verguenza que le ocasionaras? -
El naiko quedó blanco y paralizado,  tan solo imaginarse esa horrida imágen, le horrorizaba.

El Manuel satisfecho,  sonrió al verlo inmóvil y asustado,  paso su mano por el hombro del más joven,  y soltó:
-Cuento contigo entonces,  ah y no te preocupes que no estará solo. No te necesita,  me tiene a mí, yo lo cuidaré en tu nombre naiko. - y se fué dejándolo sólo y sin palabras,  solo sabía que su pecho dolía.

✨Recreo.✨~Goth~👽Donde viven las historias. Descúbrelo ahora