20 de Abril.
Camino sin ver realmente nada. Esta muy oscuro y siento una presión en el pecho como si en cualquier momento fuera a caer. El aire parece detenerse a mi alrededor; todo es tan opresivo que siento que no puedo respirar.
—¿Alaia? ¿Eres tu? —es esa dulce voz. Otra vez es la niña de mi sueño. Trato de seguirla pero es imposible; es como una sombra que se mueve alrededor.
—¿Donde estas? No puedo verte... Realmente no veo nada. ¡Pequeña!
—¡Alaia! ¡Por favor! ¡Tienes que encontrarme! —grita la niña desesperada y mi corazón se estruja. Siento las lágrimas picar en mis ojos.
—¿Como puedo hacer para encontrarte? Di algo mas que solo mi nombre —pregunto desesperada porque es como si algo malo sucediera. No lo se! Sólo lo presiento.
—¡Alaia! —grita la niña mas fuerte y puedo sentir como su voz se aleja. Ahora es un eco en mis oídos.
—¡No se como ayudarte! —grito para que pueda oírme, pues creo que se ha ido aunque siento su presencia.
—¡Alaia! ¡Tienes que verme! ¡Voy a ayudarte a encontrarme... Eres la única que puede ayudarme!Me respiración se corta y siento que no puedo respirar. Es todo como si fuera una pesadilla y cuando trato de correr siento como caigo en algo duro que raspa mis rodillas.
—¿¡Al menos dime como te llamas!?
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Los Sueños De Alaia
Fantasía"―Eres especial Alaia." A menudo escuchaba a mi abuela decirlo mientras crecía y siempre creí que la manera en la que siempre estaba tratando de ayudar a los demás, y metiéndome en problemas por ello, era la razón. Sin embargo hace unos días no pu...