11. Uniendo piezas

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27 de Abril.

Me levanto cerca de las 9:00 am, la casa está silenciosa así que estoy segura de que mis padres ya se han ido a trabajar y Alec aún duerme.

Me arreglo para salir y bajo a la cocina para preparar mi desayuno. Hoy dedicaré el día a buscar todas las mujeres pelirrojas que hay en el lugar.

Quizás sea una tarea fácil o quizás sea una tarea difícil... Sin embargo a este punto no me importa porque al final del día debo tener algunas respuestas.

Preparo algunos bocadillos para llevar y comer por ahí. Tengo la laptop conmigo para ayudarme un poco a crear buscar.

Cierro la casa y voy por el camino que da hacia el centro del pueblo, a esta hora no está tan concurrido el lugar así que me pongo cómoda en la glorieta del parque.

Abro Facebook y empiezo mi búsqueda, ¿lo bueno de las pueblos pequeños? Siempre será que todo el mundo se conoce y le da por tenerse como amigo en Facebook.

Horas de búsqueda y muchos bocadillos devorados por mi dan como resultado 8 mujeres con el cabello rojo en la actualidad. Sólo 5 de ellas son pelirojas natural lo que es curioso en una comunidad conformada por 1000 personas.

Sin embargo las edades de estas oscilan entre los 15 hasta los 45. Hasta ahora no puedo descartar ninguna hasta que no logra saber más sobre esta mujer.

Irina Reed
Catheryn Lara
Micaela Bolton
Ana Rivera
Jennifer Beer

Nancy Tirado
Zuleika Elton

Leslie Valenzuela

Irina Reed tenía 15 años, recién cumplidos así que no creía que algo tan dulce idearia un plan tan macabro y la señora Micaela Bolton tenía 45 años, a su edad no la veía de secuestradora de niños.

Mi mejor amiga estaba en la lista porque aún cuando no era peliroja natural la mitad de su cabello había sido tenido así hace algunos meses.

Jennifer Beer tampoco era natural, sin embargo estaba entre los 30... Así que podría ser una opción a investigar.

No parecía justo incluir a Ana después de lo que me había contado pero aun así estaba aquí y no la conocía como para saber que todo era como decía.

Había descubierto que Leslie se había ido unos años del pueblo y había vuelto después de la muerte de su padre, es unos años mayor que yo y aunque no la conocía de nada no podía confiar en ella aunque mi amiga parecía muy al día con esta.

Mi celular empieza a sonar y cierro la laptop decidiendo que ya por hoy estoy muy cansada, además necesitaré de Alec para poder hacer algunas investigaciones de estas mujeres.

―¡Hola Beck!
―¡Hey Alaia! ―hay un montón de ruido al otro lado del teléfono y me río mientras espero― Ha surgido un trabajo de última hora y las niñas no han dormido, estábamos en el parque así que ya te imaginarás ―escucho la desesperación en su voz.
―¿Necesitas que las cuide en tu casa?
―Eso sería genial... Tengo mucho en las manos ahora, ¿que tan rápido puedes llegar?

Miro para recordar bien donde estoy, debe ser cerca de las 2:00 pm... Lo que quiere decir que el tiempo se me ha pasado volando.

―Tranquilo. Ve recogiendo todo mientras llego así puedes irte de una.

Lo escucho respirar aliviado y le aseguro que en menos de 15 minutos estaré allí.

Recojo mis cosas rápidamente y le escribo un mensaje rápido a Joey.

¿Aguantas hacerle el relevo a Beck conmigo está tarde?

¿Me estas invitando a ayudarte con las niñas más lindas que he conocido?

Te espero en casa de Beck. No tardes, las niñas están vueltas un lío.

Es una orden.

Agrega un sticker de soldado y me río mientras camino hacia casa de Beck. No es mi costumbre cuidarlas en su casa pero no puedo volver más loco al pobre hombre.

Tal como había prometido, a los 10 minutos estoy tocando su puerta y sólo llega a darme un beso en la mejilla como saludo mientras sale volando.

―¡Te debo una chica! ―grita sin mirar atrás.

Entro en la casa y sonrío mientras las pequeñas gemelas gritan mi nombre mientras se avalanzan sobre mi con sus caritas llenas de lo que parece ser helado de chocolate.

Joey llega a los pocos minutos y nos disponemos a limpiar a las niñas para su siesta y luego recogemos un poco el desorden de Beck.

Cuando todo está hecho nos sentamos en la pequeña sala y le muestro lo que he encontrado.

―Esto es una locura y lo sabes, tienen el pelo rojo... ¿Y después que? ¿Iras a sus casas a averiguar si tienen una capa negra en sus armarios?
―¿Crees que no haría eso?

Me mira y sé que sabe de lo que soy capaz.
―Escucha algo Alaia Williams... Sé que de ser una emergencia podría hacer algo por ti, pero sin duda no quiero tener a mi novia tras las rejas.
―¿Estas conmigo en esto o no?
―Buscaré a alguien que conozco, el conoce cada parte del bosque y puede guiarnos.

Lo abrazo mientras lleno su cara de besos, el sólo ríe porque otra vez me salí con la mía.
―Sólo prometeme que no vas a meterte en líos mientras eso pase.
―Lo prometo ―beso sus labios y sonrío feliz.

Nuestros celulares suenan a la vez con mensajes y nos miramos antes de tomarlos.

Alec te ha añadido al grupo "Misión suicida"

Nos reímos mientras leemos los mensajes. Cathy y Noel se insultan como siempre que parecen no estar de acuerdo con algo mientras Alec trata de mediar.

Sin embargo toda conversación se paraliza cuando Noel envía un vídeo que encontró en el canal de noticias local.

Lo reproduzco y escuchamos como la Policía dice que están confiando en que los padres de Bethany están diciendo la verdad sobre la desaparición de la niña.

En el vídeo muestra los lugares donde la Policía está colaborando para encontrarla y confirma que se trata de un secuestro, sin embargo se desconocen las causas porque hasta ahora los secuestradores sólo habían estado aterrorizando a los padres.

La conversación se reanuda y Joey me mira, se que debo decir lo que he descubierto y pedir ayuda a los demás.

Les envío una nota de voz contando algunos detalles generales y Catheryn sale del grupo justo en el momento en el que envío el archivo con las sospechosas de cabello rojo.

Suspiro y Joey aprieta mi hombro.
―Pronto va a terminar todo...
―¿Como lo sabes? ―lo miro derrotada.
―Te conozco, así que es todo lo que necesito para saberlo.

Respiro hondo y se que debo hablar con Cathy.
―Iré a hablar con ella, la necesitamos si está persona está medicando a Bethany, además es mi mejor amiga.
―Ve, aquí te espero.

Me levanto tomando mi celular.
―¿Estarás conmigo está noche? Papá y mamá estarán en algún evento en la ciudad y no volverán a casa.
―Ahí estaré.

Salgo por la puerta y respiro hondo. Necesito arreglar las cosas con Cathy y no hacer más líos con esto.

No sé que quiere esta persona, pero sin duda no es nada bueno y el tiempo pasa mientras los padres sufren.

Los Sueños De AlaiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora