Han pasado tres días desde que llegue a este nuevo lugar, es el primer fin de semana que estoy aquí. Casi no miro a Daniel sólo en el desayuno y en la cena, pero en cuanto Cecilia se despide de el, sólo se levanta, asiente con la cabeza y se marcha, no me dice nada, ni me obliga a nada. Agradezco que sólo sea así. Sólo habla conmigo cuando Cecilia está presente.
Cecilia el linda, y un poco extrovertida, tiene mucha energía para mi gusto, además de que es muy platicadora. Como ya me había dicho es pésima para los idiomas, pero el frances y el ruso son fatales para ella. El inglés lo domina un poco mejor.
Es linda.—por favor— súplica por enésima vez —anda ven conmigo—
—no gracias, prefiero dormir— digo sentandome en el piso con mi laptop en las piernas.
—pareces anciana ¿que edad tienes?— pregunta mientras se mira en el espejo.
—23– digo concentrada en el aparato.
—pues te comportas como de 80– rie —anda vamos, prometo que nos divertiremos—
—no creo que al señor McNail le agrade que la institutriz de su pequeña hermana esté de fiesta con ella— objeto
—¿señor McNail?— voltea a verme —eso ni tu te la cres, anda acompañame—
—no tengo que ponerme—
—eso no es problema—
Se mete a su armario, mientras tanto entro a mis redes sociales para ver que hay de nuevo, si deperdida Axel me ha escrito algo. Pero para mi sorpresa, sólo tengo mensajes de mis amigos, ni no tengo ningún mensaje de él. Checo que está conectado, pero no me escribe, pienso en hacerlo primero, pero hay algo que me detiene. El no se ha preocupado por mi en estos días, porque he de hacerlo yo.
—ten este— Cecilia me arroja un vestido azul a la cara. Lo miro —póntelo— ordena.
Y así lo hago, entro al baño de su habitación, me quito mi ropa y me pongo el vestido. Me queda más pegado de lo normal, y mucho mas corto de lo que debería. Salgo y Cecilia sonrie al verme.
-¡te queda divino!—
—¡¿que?!— exclamo —obvio no. Parezco puta— me miro en el espejo.
—me probaré el mío— dice Cecilia entrando al baño.
Me siento en el sofá y tomo el vaso que está en la mesilla.
Cecilia sale con un bonito vestido de colores que me gusta.
—¿que edad tienes?— pregunto viéndola.
—16– sonríe satisfecha —espero impresionar a Axel—
—con el maquillaje perfecto y el peinado adecuado te aseguro que lo dejaras con la boca abierta— la animo.
—eso espero— se mira en el espejo.
—fide esta noche te llevará Miguel— dice Daniel entrando a la habitación.
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Siempre Libre
RomanceToda apuesta consiste en 50/50 50% de ganar y 50% de perder. Liv es la típica niña de papi, minada, consentida pero no caprichosa. Tiene que vivir con la culpa de otros y pagar las consecuencias de actos ajenos. Daniel McNail, un empresario de casin...