Capítulo 36

7.3K 591 16
                                    

Amo a mi hijo con toda mi alma, pero últimamente Demian no permite que nadie se me acerque, ni Cecilia, ni Miguel mucho menos Daniel. Inclusive, Daniel tiene que irse a dormir a otra habitación ya que Demian hace berriches incontrolables para quedarse a dormir conmigo.
No sabemos que le pasa, no duerme, no quiere comer, no juega, y todo el tiempo quiere que lo tenga abrazado.
Lo más gracioso de todo, es cuando Demian le habla en francés a Daniel, al principio pensaba que se le cuatrapeanban los idiomas, pero después me di cuenta que lo hacía con la intención de enojar a su papá para poder alejarlo de mi.
En los momentos que Demian esta a solas conmigo, habla en un perfecto español, pero cuando llega alguien o estamos en compañía de más personas es cuando nuevamente habla en francés.
Lo curioso de todo es que sólo se comporta así cuando las personas están a mi alrededor, cuando Demian esta a solas con Daniel o Cecilia se comporta de manera normal.

-¿en que piensas?- Daniel me abraza por la espalda

-en lo extraño que es comportamiento de Demian-

-sólo está un poco celoso porque ya no le prestas la misma atención- besa mi coronilla.

-no lo se- recargo mi cabeza en su pecho -hay algo más que sólo celos-

-esta bien, no quiero que te preocupes-

-quiero llevarlo con un pediatra, quiero que lo revise del todo-

-primero que...-

-Ma mère lâche- dice Demian con un grito agudo.

-cariño-

-¡Ne touchez pas à ma mère!- grita de nuevo.

-ven aquí mi amor- extiendo los brazos y corre hacia mi.

-campeón vamos a jugar- el niño niega

-vamos a caminar- me voy con el niño hacia fuera. Se relaja cuando estamos solos.

Lo llevo al acantilado sin acercarnos mucho, quiero que aprecie el bello atardecer.

-mami, ¿me quieres?- pregunta con voz triste.

-¿porque me preguntas eso corazón?- me inclino a su altura.

-es que ya no duermes conmigo, y le das muchos besos a mi papá- se le llenan los ojitos de lágrimas -y quiero que estés conmigo- se le escapan un par de lágrimas.

-cariño, yo te amo cielo, y te quiero muchísimo, pero quiero que sepas que tu eres muy importante- trato de hacerlo entender.

-¿también quieres a mi papi?- hace un tierno puchero.

-quiero a tu papi, pero te quiero más a ti- sonrie -tu papi y yo nos queremos muchísimo, y cuando dos personas adultas se quieren forman un hermosa familia, y las familias se forman de papás e hijos-

-¿nosotros somos una familia?- me siento en la arena y a Demian lo coloco en mi regazo.

-si, nosotros somos una familia, tu, tu papá y yo-

-¿tendré más hermanitos?-

-¿quieres más hermanitos?- beso su mejilla y asiente -¿cuantos hermanitos quieres?-

-¡así!- me enseña los diez deditos de ambas manos.

-¡¿tantos?!- pregunto asombrada.

-quiero muchos hermanitos para jugar fútbol- sonrie.

-bueno quizás tengas uno o dos hermanitas mas- sonrie -pero eso será más adelante- besa mi mejilla.

-¡papi!- Demian salta de mi regazo a los brazos de su padre.

Siempre LibreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora