Capítulo 14: Sospechas

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Los mensajes de Abby son los que están del lado derecho, los de Tyler del izquierdo

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Los mensajes de Abby son los que están del lado derecho, los de Tyler del izquierdo.

Tengan linda lectura.

Abro los ojos de golpe y siento los hilos de sudor caer por mi rostro y mi cuello. Me aseguro de que el corazón de Curtis siga latiendo y por fin soy capaz de calmarme y relajar los latidos de mi acelerado corazón.

Tuve una pesadilla en la que no llegaba a tiempo para bajar a Curtis de la red y moría por la gravedad de sus heridas. Fue horrible, se sintió muy real.

La oscuridad sigue reinando en la habitación, pero no soy capaz de volver a dormir, así que me muevo con cuidado y reemplazo mi cuerpo con una almohada para no despertar a Kol. Les doy una última mirada a los engendros dormidos y salgo de la habitación, cerrando la puerta con cuidado.

Bajo a la cocina a tomar un vaso de agua y consigo mi teléfono sobre la encimera, en donde lo he dejado todo este tiempo. Encuentro un par de llamadas perdidas de mamá, un mensaje de Tiffany y otro de un número desconocido, que recibí anoche.

¿Cómo están tus manos?

No puedo evitar que una sonrisa se dibuje en mi rostro, es tan tonto. Son apenas pasadas las cuatro de la mañana pero aún así decido responder:

¿Esa es tu mejor forma de coquetear? Decepcionas, Price.

Miro mi mano sin vendar y las heridas están mucho mejor, aunque hay marcas rojizas en donde la red cortó mi piel. Sólo espero que no deje cicatriz.

Pienso en la espalda de Curtis y en sus enormes heridas, sus cicatrices serían imposibles de ocultar. Niego y tomo un vaso de uno de los estantes, Curtis estará bien y, con suerte, no tendremos que hablar sobre este incidente nunca más.

Guardo mi teléfono en el bolsillo de mi pantalón y bebo el agua para espabilarme. Tengo que hacer algo con este insomnio.

Dejo el vaso en el fregadero y subo a mi habitación, que sigue hecha un desastre. Tomo el revoltijo de sábanas y almohadas del suelo y las llevo al cuarto de lavado para lanzarlas en la lavadora con mucho jabón.

Solo espero no estropear la lavadora.

Para la mancha en la alfombra tomo una cubeta con agua y jabón y cual cenicienta me arrodillo en el suelo para limpiarlo con un cepillo. Mis heridas escuecen pero mi único objetivo es que la mancha desaparezca lo más posible.

Mi teléfono vibra en mi bolsillo y seco mis manos con una toalla limpia. Mi frecuencia cardíaca aumenta cuando veo que se trata de Tyler.

No puedo usar mi artillería pesada en el primer mensaje. ¿Qué haces despierta tan temprano?

Insomnio.
Aunque tú tampoco es que puedas decir mucho sobre eso.

Viviendo Con Los Alfas (Saga Alfas #1) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora