Los próximos días decido dejar de lado todo lo que Tituba no hizo ver y Tyler está de acuerdo. En cambio, enfoco mi tiempo en estudiar para los exámenes finales y en acompañar y ayudar a Ashley en su búsqueda interminable por el vestido perfecto para el baile.
—¿Qué les parece este? —Ashley sale del vestidor con un vestido que la hace lucir como una bola disco y ni siquiera tengo que decir algo, porque ella se da cuenta de la mueca en la que se convierte mi rostro—. Ya entendí.
Mi mejor amiga vuelve al vestidor y Tiffany se queja a mi lado.
—¿Puedo matarla? Prometo que no encontrarán el cuerpo y no tendrás que hacer de testigo es un juicio.
Río y uso la goma en mi mano para recoger mi cabello en una coleta alta, hace calor.
—No lo harás. Te prometo que la dependienta que la está atendiendo lo hará primero.
—Iré por algo de comer —gruñe, levantándose del sillón en el que estamos sentadas desde hace una hora—. ¿Quieres algo?
—Una botella de agua está bien.
—Como tú digas —me dice Tiffany y toma su billetera de su bolso para luego irse.
¿Dónde estás?
Le envío la ubicación de la tienda a Tyler y suelto un suspiro, mirando una Ashley salir de nuevo con un vestido diferente.
—No me gusta —le digo, siendo tan sincera como ella me pidió. Este vestido es verde esmeralda, con un extraño cuello de tortuga y una falda a media pierna con volantes que es muy fea. El color le queda bien, pero el vestido es horrible.
—Eres una jueza muy exigente —se queja, mirándose en el espejo.
—No es mi culpa que escojas los vestidos más feos de la tienda. ¿Por qué no dejas de lado la idea de lucir diferente el día del baile? Si algo funciona bien, ¿Por qué cambiarlo?
Me levanto del sillón y tomo un vestido azul rey, estilo sirena, con un corpiño que simula una tela que cubre sus senos y pasa por la parte trasera de su cuello. Tiene una pequeña abertura y tiene el estilo sexy que Ashley suele usar.
Y he visto a mi mejor amiga echarle un ojo a ese vestido desde que llegamos a la tienda, hace dos horas.
—¿Estás segura? —me pregunta con una mueca mirando el vestido, pero puedo ver un brillo en sus ojos marrones.
—Como que me llamo Abigail Cassandra Moore. Anda.
Ashley toma el vestido y la dependienta que la ha estado ayudando me mira como pidiendo ayuda y yo asiento dándole una pequeña sonrisa, estoy segura de que este será el último vestido que se probará.
Sonrío cuando siento la presencia de Tyler entrar a la tienda pero no me muevo del sillón, escucho un par de suspiros y sus pasos acercándome a donde me encuentro.
ESTÁS LEYENDO
Viviendo Con Los Alfas (Saga Alfas #1)
Hombres LoboSer la hija de la pareja alfa puede sonar como un sueño para cualquier chica, ¿para mí? Solo el constante recordatorio de que todos piensan que soy una inútil y que para lo único que siempre seré buena es para ser la hija de mi padre. Mi vida es nor...