Las palabras de papá me dejan estupefacta y veo que a Tyler también, porque se ha quedado de piedra.
-Erick, este no es el momento ni el lugar -interviene mamá metiéndose entre papá y Tyler y deja una mano en el pecho del primero-. Mejor vamos a casa.
-No, no... -murmuro cuando por fin soy capaz de reaccionar-. ¿De qué hablaba, mamá?
-Yo no... no creí que fuese posible -murmura Tyler como perdido en sus pensamientos.
-¿Qué no fuese posible que?
-Mis padres me hablaron sobre eso pero... no pensé que pudiese ser cierto.
-Ya ves que si lo es, entonces -le gruñe papá.
-¿Qué es lo que sabes? ¡Alguien dígame algo por el amor a la Diosa!
-Abigail, sube al auto -el tono de papá viene tan cargado de ira que no soy capaz de moverme de mi lugar-. Ahora.
-Abby, nena, haz lo que te dice -murmura Tyler, haciéndome mirarlo con incredulidad, ¿pero de qué lado está? Estoy tan estupefacta, que apenas soy capaz de hilar los pensamientos en mi mente y percatarme del mote que ha usado para referirse a mí.
-Pero...
-Solo hazlo, encontraré la manera de resolverlo. Lo prometo.
-La única forma de resolverlo es dejarla en paz. Recházala. Acaba con este teatro de una puta vez.
-Erick, ya basta.
Las palabras de mamá parecen hacerlo reaccionar un poco y veo sus hombros suavizarse, pero su mirada sigue destilando odio puro.
-Abigail -insiste y me separo de Tyler, sintiendo como si me arrancaran un brazo.
-¡Ya te oí!
Me cruzo de brazos y me encojo sobre mí misma, queriendo creer que esto es solo un mal sueño y que pronto despertaré y estaré otra vez en el pecho de Tyler, hablando sobre constelaciones imaginarias. Camino hasta encontrarme con mamá y le doy una última mirada a Tyler, pero este está muy concentrado en no dejarse vencer por la mirada de odio que le lanza papá.
Su madre será una humana, pero a fin de cuentas, sangre de Alfa sigue corriendo por sus venas y si algo sé de los Price es que son igual de obstinados que los Moore.
Enfurruñada, subo al auto de papá seguida de cerca por mamá y me lanzo a los asientos, como si ellos tuvieran la culpa de que mi vida sea una mierda.
-¿En qué estabas pensando? -me dice mamá metiéndose entre los asientos delanteros con una mirada de decepción-. Tu padre casi se vuelve loco cuando los guardaespaldas lo llamaron y le dijeron que no estabas.
-¿Me echarás en cara que, por una vez, solo quiero ser una adolescente normal?
Froto mis sienes ante el espantoso dolor de cabeza que ha aparecido y aunque intento escuchar lo que hablan papá y Tyler, me es imposible, el dolor no me lo permite.
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Viviendo Con Los Alfas (Saga Alfas #1)
Hombres LoboSer la hija de la pareja alfa puede sonar como un sueño para cualquier chica, ¿para mí? Solo el constante recordatorio de que todos piensan que soy una inútil y que para lo único que siempre seré buena es para ser la hija de mi padre. Mi vida es nor...