Lo que nunca te dije #1

Capitulo uno: Presente

«La amaba. Él realmente la amaba pero tuvo que dejarla ir, no porque ya no se amaran el uno al otro con intensidad, sino porque ella necesitaba alguien mejor que él»

Presente

Bastian.

Me quedo mirando al director de la película de la cual acabo de finalizar. La idea de morir en ese proyecto no había sido tan mala hasta hace unos meses atrás, ahora no me parecía algo atractivo.

— ¿Por qué no sólo grabas el final de la película? Bastian ella no va cambiarlo ni la autora lo hará —dice Cam quien ahora se ha sentado alado de mío.

Volteo mi rostro para mirar a mi primo, quien se ha vuelto mi mánager y me ha ayudado en casi todo. Le agradezco mucho a él, a pesar de las decisiones que ha tomado.

—No me siento cómodo haciendo eso —trato de explicar.

— ¿Morir? Eres un actor, sabes hacerlo.

Suspiro.

—No creo que el personaje se merezca eso, él ha ayudado a la chica demasiadas veces y la ha protegido. ¿Por qué morir?

—Viejo los autores son unos bastardos, ellos matan por placer. Son asesinos literarios, son los que saben hacer que un lector llore o sonreía. La historia es buena y muchos lo aman.

—No digo que no sea buena, es solo que él no se merece morir.

—Nadie merece eso pero pasa, ¿no?

Miro a los ojos a mi primo, el corazón da un vuelco a escuchar eso. Lo sabía muy bien que el destino y la vida podría ser unos perros contigo. En un momento estabas en la cima y al siguiente estabas en lo bajo, cayendo a más de seis mil pies.

—Tienes razón —trato de sonreír.

Él me da un golpe en la espalda, me aprecia.

—Hazlo ahora, Bas.

Miro hacia el set y suspiro. Me voy a morir, tengo que hacerlo. Yo puedo hacerlo.

Me levanto de la silla y camino hacia del director le asiento la cabeza, ella sabe lo que significa. Ella sonríe, creó que está encantada que haga lo que se me pide y no haga una escena.

Permito que las chicas de maquillaje me hagan las cicatrices y le dé a mi rostro la adaptación que el personaje debe de tener.

La historia trataba de un amor imposible, la chica era una joven rica que podría tener todo y el chico era el chico malo de su instituto. Ellos empezaron hablar y salir, ella se enamoró de él pero lo que ninguno de los dos sabían era que después de unos meses alguien destruiría eso. El otro personaje tenía poder, era alguien que podía matar a alguien sin tener una consecuencia.

Hago la escena donde fui vencido, el otro actor me golpea en las costillas y duele mucho. Por muy leve que haya sido el golpe, me duele demasiado e intento no hacer que se den cuenta de eso pero todos están tan pendientes de nuestros movimientos.

Caigo, doy un grito ahogado cuando él imita encajarme un cuchillo en una pierna. El roce es lo que me molesta y hace que me duela el cuerpo en realidad, está doliendo más de lo que imaginaba. Mi cuerpo estaba más sensible de lo que pensaba.

El doctor dijo que estoy me pasaría, pienso.

—No sé porque Ley esta tan enamorada de ti —dice el actor haciendo una mueca al ver mi saliva en su ropa.

Si, le escupí.

—Déjala en paz —gruño, debo verme como alguien desesperado. —Ella no te amara nunca.