UN INCIDENTE...

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Por fin había pasado la cuarentena, dios habían sido 40 días horribles para Jeff y para mí, para celebrar que ya había terminado, íbamos a ir a cenar, los dos solos, en todos estos días habíamos pasado todo el tiempo con los niños, Jeff iba menos a trabajar, era una de las cosas buenas de ser el jefe.

Que podías tomarte vacaciones cuando quisieras, como de a Deisy y a Josh en sus cunitas, mire el reloj eran las 6:30 y ya estaba obscuro, había quedado de ir a la empresa de Jeff y recogerlo, para de ahí irnos a cenar, me acomode mi vestido azul cielo y baje al comedor.

-Rosi ya me voy-le dije- Ya deje preparado los biberones de los niños, no creo que se despierten hasta dentro de unas horas.

-Okey-dijo sonriéndome-No se preocupe vallase tranquila, que se le hará tarde.

-Gracias-sonreí.

De di la vuelta y salí al garaje, agarre las llaves de mi auto y me dirigí a la empresa, de repente sentí una sensación extraña como si algo fuera a pasarme, estacione el auto una calle antes de llegar ya que habían muchos coches enfrente de la entrada de la empresa.

Baje del coche y me dirigí asía la empresa, estaba como a 5 metros de la entrada, vi que Teresa la recepcionista estaba por salir, pero de repente sentí que alguien me agarraba por detrás y me tapaba la boca con sus manos, las mire eran las manos de un hombre, era grandes y ásperas.

Mire hacia Teresa ella en ese momento me vio y abrió sus ojos como plato, dios dos pasas y negué con la cabeza, lo que menos quería era que viniera asía aquí y que el hombre que me tenía agarrada la lastimara, la mire darse la vuelta y entrar a la empresa corriendo.

Mire a mi alrededor, habían personas pero no parecían percatarse de lo que estaba sucediendo, ¿dios que me iba a hacer?, ¿me iba a secuestras?, empezó a caminar y me arrastro con él, vi que nos metíamos en un callejón sin salida, estaba un poco obscuro, abruptamente me soltó y me dio la vuelta quedando de frente.

Su rostro se me hacía familiar, era... era el hombre que me había tomado una foto asía un poco de tiempo cuando estaba saliendo de la casa, era alto y corpulento, tenía el cabello rapado y pude ver que tenía tatuajes en los brazos, dios que me quería hacer este hombre.

-Hola nena-su voz era muy áspera- Espero y cooperes, no te are daño solo quiero follarte.

-¡¿Que?!, no está usted loco-dijo con firmeza- Soy una mujer casada-dije enseñándole los anillos.

-Y eso que tiene-dijo con una sonrisa.

Dios este hombre me daba asco, se inclinó e intento besarme pero no me deje, voltee asía un lado y empecé a intentar escaparme, pero el me agarro con firmeza y me puso contra la pared y pego su cuerpo al mío, podía sentir su deseo asía mí y lo único que me provoco fue asco, empezó a subirme el vestido.

-No... no por favor-dije con lágrimas en mis ojos, dios me iba a violar.

-Si... te are mía aunque tú no quieras.

Sentí como rasgaba un poco el vestido de la parte de abajo para poder facilitarle la subida, de repente alguien llego y lo aparto demasiado rápido haciendo que el hombre callera al piso, mire que esta persona se subía en sima del hombre y le empezaba a pegar.

Cuando lo mire bien, me di cuenta que se trataba de Jeff, dios había llegado a salvarme, vi como el hombre levantaba la mano y le pegaba un puñetazo a Jeff en su cara.

-¡No! -grite.

Pero Jeff no se dio por vencido y siguió dándole puñetazos al tipo ese en la cara y en el pecho, mire como el hombre dejaba de pelear, se estaba quedando sin fuerzas, por dios si no detenía a Jeff lo mataría.

Embarazada de un Empresario?©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora