Pixeles. -_Frerard_-

II

Gerard y Frank amaban la clase de entrenamientos.

Esa batalla cuerpo a cuerpo con el mejor oponente que estuviera dispuesto a enfrentarlos.

Por qué, quién no sabía que los mejores amigos eran, por ende, los más fuertes del salón.

Gerard en número uno y Frank siguiéndole en segundo lugar.

Ambos hombro a hombro sonriéndose altaneros pues nadie podía nunca derribar la racha que tenían en aquel tablero.

"Cuanto a que Cavo se ofrece hoy?" Susurro el pelinegro al castaño.

Este que aún seguía un tanto molesto por lo que había sucedido hacía unos días en la clase de Lucas, acerca del berrinche de Gerard por la razón de que ambos fueran compañeros, bufo resignado y asintiendo.

"Cuanto a que Lucas te lo asigna." Afirmó.

Gerard sonrió un tanto maniático asintiendo.

"Ya lo creo..."

"Way, Ziria!" La voz de Lucas hizo en eco en lugar.

Ambos amigos se vieron para así sonreír pues, Frank tuvo razón.

Gerard se coloco en la tarima, casi seguido de Cavo Ziria, un rubio de ojos pardos que ansiaba la hora de pelear con aquel pelinegro que se creía la gran cosa solo por que su padre era uno de los que básicamente manejaba Einberg.

"Way..."

"Ziria..." se saludaron.

"Bien. Nada de golpes bajos, me oyeron bien?" Ambos asintieron a la orden de Lucas y con un silbido de este dieron inicio a su lucha.

Como siempre, y la razón de que siempre perdiera, Cavo se abalanzo al pelinegro listo para darle un golpe en el rostro. A tiempo, Gerard se movió tomando el brazo del rubio y doblándolo con fuerza empujándolo después. Este solo rió escupiendo a un lado y volviendo a ponerse en guardia.

"Te gusta terminar cansado, huh?" Hablo el numero uno. Cavo alzo una ceja demasiado irritado.

"Cuidado Way... que hoy estoy en buena forma."

"Así?" Cavo volvió a abalanzarse con Gerard reteniendolo de los brazos al frente. Ambos giraron sin soltarse, poniendo fuerza en sus agarres hasta que el pelinegro logro alzar su pierna y golpear con su rodilla el estomago del rubio. "No que estabas en buena forma?" se burlo el mayor.

El rubio gruño tomando aire y sosteniéndose el estomago, sonriendo de la nada macabramente.

"No tanto como Tiffany." Exclamo con sorna.

"Como?" Frank palideció. 

Se supone que Gerard no debía enterarse de nada y ahí iba el idiota de Cavo abriendo la boca. 

"No escuches lo que dice, Gee. Solo quiere distraerte." El pelinegro frunció el ceño mirando a su mejor amigo. 

"De que hablas!?" Entonces Cavo, siendo por primer vez inteligente en su vida, ataco con la guardia baja al pelinegro. 

Gerard escupo la sangre de su labio mirando con recelo al contrario. 

"Si Frank, por que no le dices a tu mejor amigo de que hablamos?..." El avellana gruño irritado y exasperado fulminando con la mirada al rubio.

"Que es lo que ocurre?" Pregunto ahora un enfadado pelinegro. 

"Solo ignóralo y concéntrate." Respondio el castaño.

"Hey... me dueles, Frankie... pero, como yo si soy un hombre honesto, le diré a nuestro Gerard la verdad." 

"Callate Cavo!" Amenazo el avellana.