Clásicos Encontrados. (Camren)

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Mire mi nueva vida, era Camila que estaba a mi lado durmiendo, con un short y una blusa transparente de seda, me quede observándola se veía plácidamente dormida no quería que ni el mismísimo viento la molestara, se veía en calma y me gustaba tenerla aquí, a mi lado...

Sin hacer mucho alboroto me fui a bañar, necesitaba salir hacer una pequeña diligencia, me mire al espejo y peine mi cabello mojado, busque entre mis cosas y mire el anillo no me lo había querido colocar porque no quería que Camila sintiera presión? La verdad no se como lo tomaría pero me arriesgaría. Me vestí y la vi aún durmiendo, deje el anillo con una nota que colocaba "Un pequeño regalo" L.

Llegué al hospital, Stevie me había dado varios números de contactos médicos, pero algunos osea muchos quedaban fuera de la ciudad, New York, Boston, Seattle etc... No podía costear tantos viajes, estadías, comidas... Entre y me dirigí al enfermero que estaba en información.

—Buenos días —Me sonrió.

—Si digame! —Mire mi teléfono buscando el nombre para no equivocarme.

—Bien, aquí esta! Se encuentra en este hospital la doctora Trainor? —Le pregunté.

—Si se especializa en neurología —asentí.

—Si ella misma! Sera que la puedo ver? —Frunció sus labios colocando mala cara.

—Linda tienes que sacar cita, y creo que ahorita esta en opera... —Alguien se acercó muy alegre dándole una carpeta.

—Este paciente ya esta bien dale de alta por favor! —El me miró y me hizo una seña con los ojos, que no entendía, suspiró.

—Bien, Dra. Trainor ya lo hago —Acentuó la ultima silaba para que yo reaccionara y entendí.

—Hola soy Lauren! —Le dije estirando mi mano, bien ahora parezco una demente loca, me miró y a medias tomo mi mano.

—Pues hola Lauren.. —Su piel blanca, su cabello rubio, unos ojos muy bonitos y una sonrisa pegajosa, se retiró, el chico ladeó su cabeza diciéndome que la siguiera, asentí.

—Dra. Trainor! Espere! —Me coloque a caminar a su lado. -Disculpe por la loca presentación, pero estoy aquí por algo importante.

—Es un hospital, venimos aquí por algo importante —Su tono era orgulloso pero no odioso, eso pude deducir.

—Bien como sea, que tan buena es su carrera? —Se detuvo y me miro incrédulamente.

—Quien te piensas para venirme a decir eso! —Bien, mi mente este día no estaba de mi lado.

—No supe explicarme —Cruzo sus brazos.

—Escucho tu otra explicación, ahorita tienes toda mi atención, así que venga habla.. —Me avergoncé un poco, pero no sabia que decir exactamente —Señorita estoy esperando, puede que alguien me necesite y yo aquí perdiendo el tiempo. -Bien soltaría de una vez la bomba.

—Me casé hace unos días, con la chica que perdí hace dos años y medio aproximadamente por una terrible estupidez mía, hace un mes —Pensé un poco —Si, mas o menos ese tiempo ella volvió y me hace feliz saber de que a las dos no se nos haya ido el amor por la otra y tomamos ese paso, para que esperar no?

—Y a todo esto? Que vienes hacer aquí? —Dije sin mucho interés.

—Mi esposa tiene un tumor, que dicen que es inoperable, pero yo sigo con las esperanzas bien arriba antes de echarnos todos a morir —Alcé mis hombros.

—Si es inoperable, su misma palabra lo dice, no se puede operar —Siguió caminando pero la detuve.

—Por favor solo haga un chequeo, me dijeron que era la mejor de la ciudad! Nunca amado? Nunca amado tanto que es capaz de hacer cualquier cosa que es capaz de ir a donde sea con tal de que esa persona este bien, porque si sabe que esta bien usted también lo estará, no quiero perderla, es mi vida, quiero tener una vida una familia con ella, así que le pido que solo de su punto de vista al caso —Mis ojos estaban a estallar de lágrimas, suspiró.

—Bien señorita, traiga mañana a primera hora a su esposa, no le prometo nada pero haré mi mejor trabajo —Tomé su mano agradeciéndole.

—Gracias, muchísimas gracias! Dra. Trainor! —Sonrió.

—Meghan, puedes decirme Meghan..

Me retiré y fui a la pastelería, al llegar me llenaba de alegría que Camila había puesto a funcionar nuevamente el lugar, me acerque a Jesy que estaba en el mostrador y le pregunté por mi esposa.

—Está en la oficina -Me respondió llevándose algunas bebidas a una mesa. —Por cierto lindo detalle de casarte y ni siquiera avisarnos! -Intenté decir algo.

—Yo yo yo..

—Tranquila ya Camila nos contó todo —Agaché mi cabeza y se volvió acercar a mi. —Todos estamos juntos en esto y saldremos adelante, ya verás que Diosito nos ayudara mucho! —Sonreí, no era muy creyente pero en estos momentos si el iba ayudar se lo agradecería toda una vida.

Entré y la vi escribiendo en unos papeles, me llenó de alegría que en su mano estaba el anillo que le había dejado en la mañana, levantó su vista y se quedó mirándome, me acerqué para darle un beso en sus labios.

—Buenos días! —Me dijo y siguió con su trabajo.

—Como amaneciste? —Pregunté sacando una soda de la mini nevera y sentándome en el sofá.

—Excelente, preferiría haberlo hecho a tu lado, pero me imagino que tuviste algo que hacer muy temprano.. —Tomé un sorbo de mi bebida y asentí.

—Si, la verdad si, sabes que fui al hospital —Me miró y soltó la pluma de sus manos. —Mañana a primera hora te verán.

—Me verán? —asentí.

—Una cita en hospital! —Se quedó pensativa —Que pasa?

—No es muy pronto? —La miré confundida.

—Pronto? Que quieres que espere hasta el último momento para que tomemos cartas en el asunto? —frunció sus labios.

—No es eso, solo que esperaba estar mas tiempo casada contigo —Me paré algo estresada.

—No no no es que no te vas a morir! —negué —Si esperamos mas allí si puedes hacerlo! Por favor hicimos un acuerdo y tu estabas mas que dispuesta.

—Lo se lo se —Vino hacia mi —Solo es que.. Tengo miedo Lauren! —La abracé.

—Estamos juntas, no hay porque tenerlo, te mentiría si te digo que no lo tengo, pero hay que arriesgarse e intentar bien? Te quiero a mi lado te quiero conmigo, no lo tengas te lo pido. —Asintió.

—A que hora me dijiste que era la cita? —Sonreí.

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Babys ya se pasaron por "A SECRET HEART"? Que les pareció?