Inevitablemente Enamorados |j.b|

26.

Justin.

Mire por el espejo retrovisor a Aria, que va sentada detrás de mi, mientras conduzco al edificio donde ________ y Marina nos esperan para cenar.

-¿Qué pasa, hija?-le pregunte, hace unos pocos segundos me llamo con su dulce voz.

-¿Crees que sea una buena idea el sushi como cena?-pregunto como respuesta.

-Claro que si-sonreí-¿sabias que _______ lo ama?, esto además servirá para subirle el ánimo luego de que su entrevista laboral saliera nuevamente mal.

-Si, tienes razón papi-me devolvió el gesto.

Otra vez volví mi vista a la calle, conduje por esta por unos cuantos minutos hasta llegar a nuestro destino. Aparque el auto y junto a Aria bajamos de el, ambos continuamos nuestro camino hasta la puerta de entrada.

Saludamos al portero, el solo nos dio una sonrisa débil, eso me hizo parecer bastante extraño, el siempre estaba alegre. No pude continuar pensando o sacar una conclusión, porque Aria me lleva corriendo hacia donde está el ascensor.

-Tranquila, princesa-acaricie su cabello.

-Estoy muy emocionada, papi... ya quiero ver la cara de ________ cuando vea lo que hemos traído para cenar.

Llegamos a nuestro piso, Aria salió como una bala del ascensor, la seguí lentamente mientras busco la llave de la puerta dentro de mi bolsillo. Cuando la puerta dejo ver el departamento, un gran silencio nos recibió.

Cerré la puerta algo confundido, ¿no hay nadie?, deje todas las cosas sobre el taburete de la cocina y luego guarde el sushi dentro de la nevera aun con la duda si había alguien dentro del departamento.

Para mi gran sorpresa, Marina salió de la habitación que comparto con _________, su mirada es distinta, la conozco muy bien. Aria corrió emocionada a darle un abrazo como saludo, por mi parte, me quede parado a un lado de la nevera sin quitarle la mirada de encima.

-Marina, ¿y ________?, ¿dónde está?-pregunte.

Ella soltó un gran suspiro.

-¿Fue a comprar?-pregunte nuevamente sin esperar su respuesta-¿o fue a ver a Nicol?

Permaneció en silencio, sus ojos se llenaron de pequeñas lágrimas.

-¿Qué pasa?-dije preocupado-¿dónde está mi nena?, ¡habla por Dios!

-Justin...

Lentamente se acercó al taburete, deposito un sobre blanco con mi nombre en el medio, con sus dedos lo acerco hasta a mi.

-¿Qué es eso?-pregunte en un hilo de voz.

-Estaré en la habitación con Aria, te dejare solo para que la leas.

¿La leas?, entonces es una carta, ¿pero porque una carta?, ¿qué diablos está ocurriendo?

Hizo lo que dijo, saco a Aria de la sala y junto a ella entraron a la habitación dejándome solo y con mis pensamientos completamente confundidos. Tome el sobre del taburete con mis dedos temblando, de apoco desgarre la esquina y en un par de segundos tenía el papel blanco con su contenido frente a mis ojos.

"Justin, mi amado Justin... cuando estés leyendo esta carta, ya abras llegado con Aria al departamento, estas confundido del porque no este y claramente, te explicare lo que está sucediendo mientras estás leyendo cada palabra en un lugar de mi departamento, o mejor dicho, nuestro departamento.

He recibido una oferta de trabajo en otro país, y con el dolor de mi corazón, acepte la propuesta porque ya no soporto un segundo más sin trabajar y ver como Marina y tu corren con los gastos de las cuentas.

Te preguntaras, ¿por qué no te lo dije? o, ¿por qué no espere a que llegaras con Aria para despedirme?, lamentablemente no tuve tiempo de hacerlo, mi vuelo salía muy temprano, pero debes saber que nunca los olvidare y que siempre los recordare con mucho amor.

Te agradezco de todo corazón por todos nuestros momentos juntos, por todos tus buenos gestos y por las bellas palabras que me hacían sonreír. No solo estoy agradecida de ti, sino también de Aria, la pequeña niña que se robó mi corazón y a la que quiero como si fuera mi propia hija.

Espero que cuando regrese podamos vernos nuevamente, porque me gustaría hacerlo, ver a Aria, a Marina, especialmente a ti, al amor de mi vida, al único hombre que pudo ayudarme a confiar nuevamente en el amor.

Me despido con mucho cariño.

Te juro que escribo esta carta mientras lloro.

Y por favor, no me odies.

Te ama, ________".

Levante mi vista del papel sintiendo las lágrimas correr por mis mejillas, deje el papel sobre el taburete y corrí a la habitación. Al abrir la puerta, vi a Aria y Marina conversar en susurros.

-Justin...

No deje que terminara de hablar, en solo un segundo me lance en sus brazos para llorar y sacar toda la angustia que tengo dentro de mi pecho sin importar que Aria viera a su padre llorar.

-¿Por qué Marina?-pregunte con mi voz quebrada-¿por qué se fue?

Ella se quedo en silencio mientras acaricia mi espalda.

-Estábamos tan felices los cuatro... ella se estaba convirtiendo en mi todo... yo la amo... la amo con mi alma... todavía no puedo entender porque se fue.

-Creí que lo había dejado muy claro en la carta-dijo Marina.

Lentamente me separe de ella, seque mis lágrimas con los dorsos de mis manos.

-Le importo mas su trabajo que nosotros-escupí con rabia-prefirió mas esa estúpida oferta de trabajo antes que nosotros... ¡es una cobarde!

-Papi, ¿por qué dices eso?-pregunte asustada.

-Es tan falsa que hasta me pide que nos veamos cuando regrese-reí sínicamente-¿cree que la esperare para siempre con lo que hizo?

-En la carta que dejo para mi, dice que podemos quedarnos con su departamento, porque sabe que lo necesitamos para vivir y...

-¡No!, ¡por supuesto que no!

-¿Por supuesto que no que?-Marina me miro confundida.

-No me quedare viviendo en este departamento donde solo hay horribles recuerdos.

-¡Justin!-me regaño.

-¿Sabes Marina?, jamás debí haber engañado a Kate con esta mujer-me réferi a ________-no debí haberme ido de su lado nunca, ahora mismo ordenaremos nuestras cosas y regresaremos a la casa de Kate, yo mismo arreglare todo el desastre que forme.

-¡Estas comportándote como un hombre despechado!-me miro molesta-¡piensa y escucha las boberías que estas hablando!

-Está decidido-dije firme-volveré con Kate, retomare mi matrimonio, volveré a ser Justin Bieber, el dueño de Mercedes Benz y hare que esto no ocurrió por nada del mundo.

Marina iba a hablar, pero la interrumpí.

-Y no quiero escuchar nada de esa mujer, ella ha muerto para mi, desde este momento no se nombrará mas en nuestras vidas porque nos ha traicionado, y de la peor manera que pueda existir.

Marina me mira incrédula, como si no pudiera creer lo que estoy diciendo, pero no sabe que mis palabras son muy enserio, que no hay vuelta atrás en ellas.

-No quiero nunca mas recordar este suceso de mi vida, ¿de acuerdo?... ________ Evans esta completamente muerta para mi.

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Holaaaaaaaaaaaaa, espero que les haya gustado(:

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