Mi teléfono estaba haciendo un gigantesco escándalo en alguna parte de la cama no quería moverme pero una mano que no era mía estaba sobre mi cadera. Abrí los ojos de golpe para ver quién era y vi que era la mano mierda estas trajeron un strippis y lo metieron en la cama mierda mierda mierda cuando vi de quien era la mano me relaje era de Gabriela ¿Qué mierda...? estaba revuelta en un manojo de extremidades y cuerpos en una cama. Como era posible que Naomi, Patricia, Karina, Ana, Gabriela y yo estuviéramos en una cama pequeña, cuando logre llegar a mi teléfono que estaba bajo el trasero de Ana lo conteste de muy mal humor—hola ¿Quién es?
— ¿Dónde estás? Llevo como quince minutos tocando la puerta y no abres.
— ¿Qué o quién eres?— mi voz era rasposa.
Note una mano enganchada a la cadera de mi pantalón mierda era la de Naomi solté dedo por dedo sin despertarla.
—muy tierna, soy Adam cariño, son las siete quince ¿donde estas? Vamos a terminar esta tarea ¿sí o sí?
Gruñí y me deslice de tantos cuerpos como para poder salir de la cama. ¿Por qué Karina me estaba tocando una teta? Eso era muy incomodo —ya voy para allá aunque te dije que a las siete treinta y por tu bien espero que tengas un café negro gigante y una... no dos donas de chocolate para mí cuando este allá, llego en quince minutos.
Me solté de el abrazo de oso que Pati le estaba dando a mi pierna
—deberías desayunar cosas más saludables. — estaba riendo al teléfono mientras yo trataba de encontrar mis zapatos.
—Donde mierda deje mis zapatos— dije mientras buscaba en la pila que había junto a la puerta del cuarto.
—vete a la mierda Adam. Y gracias a tu comentario que sea tres— colgué
Cuando encontré mis llaves deje una nota sobre la cocina.
Tengo tarea que hacer las veo el miércoles, Las quiero.
Jen.
P.D
Son unas alcohólicas y me deben dinero por hacerles tantos Martins.
Cuando llegue al frente de mi casa había un despampanante Audi plateado en mi entrada estacione justo al lado y Adam estaba sentado en el asiento del conductor del Audi escuchando música. Camine hacia la entrada de la casa me puse los dedos en la boca y silbe, el levanto la vista y con un par de bolsas en las manos me siguió.
Estando en la mesa del comedor me entrego mi café y le di un sorbo no me importo que me quemara ligueramente le lengua, tenía un liguero sabor a clavo de olor o a canela delicioso suspire ante el delicioso sabor en general no era muy amante del café pero al parecer hoy lo necesitaba además solo había logrado dormir alrededor ¿de qué? una hora cuando mucho.
—Buenos días Jen. — dijo en voz amable.
—Buenos días Daniel's— mi voz tenía un ligero tono cortante pero supuse que era por lo falta de sueño.
— veo que eres del tipo de chicas que esta de mal humor en las mañanas— dijo mientras se sentaba en la mesa y bebía un café.
No tenía ganas de intentar hablar con él así que busque mi laptop y los apuntes pasados y los puse en la mesa. Deseaba mi cama con ansias pero tenía trabajo que hacer hoy.
— no estoy de mal humor y tu escribes yo leo. No creo que en estos momentos mi caligrafía sea la mejor. — Le pase los papeles encendí mi laptop y busque nuestro último punto en el trabajo.
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ADAM el defecto mas perfecto... En Edición.
Lãng mạnJennifer Stone a su corta edad a probado ambos lados de la vida. Luego de la muerte de su madre y que su padre se fuera dejándola ebria y sola en su casa se ve obligada por si misma levantarse. Pero hay algo que ella nunca se vio venir y es un chic...