ADAM el defecto mas perfecto... En Edición.

capitulo 32 todo de ti.

Me tense y luego sonreí amablemente— en el instituto— mi poder para mentir era una especie de bendición/maldición, aunque en realidad no mentía estudie con algunos de ellos pero no los conocí exactamente en clases.

Una silla se removió a mi lado y todo se lleno de colores, me beso suavemente la mejilla y entrelazo nuestros dedos, se veía muy bien, tenía el cabello un poco mas despeinado de cómo lo usaba normalmente cuando iba a la oficina no tenía el saco pero conversaba el chaleco. Alguna vez he dicho lo sexy que se ve su traje de oficina porque lo repetiré: se ve caliente como el infierno. Llevaba las mangas remangadas sobre los codos apenas mostrando su tatuaje, si no supiera que estaba ahí no lo habría notado.

Acerco mas su silla a la mía y me beso suavemente, rompió el beso demasiado pronto para mi gusto y sonrió, sus ojos estaban ligeramente oscuros pero eso pudo haber sido preocupación. Deslizo su brazo por mis hombros y me beso un lado de la cabeza.

— ¿Qué haces aquí?— dije un poco sorprendida de que estuviera aquí.

Sonrió mostrando uno de sus hoyuelos, sexys, simplemente sexy, haciendo que me derritiera un poco en mi lugar, odiaba que jugara así conmigo y mis nervios— creíste que te dejaría sola—murmuro en mi oído.

Alguien se aclaro la garganta y tome en cuenta que no estaba sola, mis mejillas se incendiaron en vergüenza, el tenía que dejar de hacerme esto o yo iba a terminar con un ataque al corazón algún día.

—chicos, les presento a Adam— Todos en la mesa lo miraban como si fuera una especie de alucinación— Adam ellos son Andreina, Victoria, Gabriel y Nico que ya se conocen— Nico se tenso con la presencia de Adam, ellos no habían tenido un buen inicio y no quería una escenita como la otra aquí.

—A ti te conozco— dijo Adam en voz seria señalando a Andre, se me había olvidado lo profesional que se ponía cuando estaba a la vista de todos— en la cafetería hable contigo por teléfono.

¿Se acordaba de eso? Adam sí que era muy raro, pero sonreí, fue la primera vez que vi a Adam dormir, la primera vez que me sentí segura cerca de él, la primera vez que afirme y negué sentir algo por él.

Andre enrojeció como si estuviera en llamas— si, recuerdo ese día.

—Gracias por decirme donde estaba, creo que nunca te lo dije— estaba usando su voz encantadora y Andre estaba cayendo en muy profundo en juego llamado encanto de Adam.

Soltó una sonrisita tonta y Nico entrelazo sus dedos, se notaba que estaba siendo posesivo y marcando su territorio. — no fue nada. En realidad fue muy divertida su discusión.

Solté un gruñido, la discusión, no fue de todo menos divertida y lo que paso después menos que menos, deje caer mi cabeza con mi mano ante el recuerdo, con Adam casi nunca es miel sobre hojuelas. Me mordí el labio cuando deslizo una mano por la parte de atrás de mi cuello y una muy fuerte corriente eléctrica me golpeo, lo mire y estaba sonriendo, el idiota era consciente de lo que me hacía, deslice una mano en su muslo y su sonrisa flaqueo un poco, dos pueden jugar el mismo juego.

Cuando el camarero vio a las demás personas en la mesa sonrío y luego se detuvo en Adam y palideció un poco se alejo unos segundos, lo suficiente para que Adam le torciera el gesto a mi comida, volvió a entregar los menús y se retiro.

— ¿Eso es lo único que vas a comer?— me riñe y yo le frunzo el ceño— no desayunaste.

Levanto una ceja— ¿me estas acusando?— contesto.

—Si— dice de forma coqueta.

Cuando el camarero regresa toma la orden de Nico y Victoria y se prepara para tomar la de Adam, que le tiene una mirada seria y nada bonita. Haciéndome preguntar que le va a soltar.