Capítulo XXVI: Plan de ataque

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Llegó la noche en la casona y tras entregarle una bandeja a cada profesora con las delicias que habían preparado, las chicas se alistaron para lo que sería una noche solo para ellas, aunque eso implicaba...

- ¿Y no hay otra habitación donde hagan su pijamada? – preguntó Nino, molesto.

- No, esta es la única habitación grande – aclaró Alya.

- ¿Pero dónde vamos a dormir? – preguntó Adrien.

- ¿Cómo que donde? En cualquiera de las piezas que están desocupadas – respondió Alix – así que menos quejas y más saliendo de la habitación – continuó, empujando a los chicos.

- Oye... espera ¿y nuestras cosas? – alegó Nino.

- No querrán que las molestemos mañana... temprano – agregó Adrien. Alix paró de empujarlos, tenían un buen punto.

- Tienen razón – admitió Alya, tomando una de las mochilas de los chicos – piensa rápido, cariño – exclamó lanzándosela. La mochila cayó directo en la cara de Nino.

- Menos mal que eres mi novia – susurró Nino, sobándose la nariz.

Mientras tanto, Marinette se había acercado con la mochila de Adrien.

- Lo siento – susurró la chica, pasándole el objeto.

- Tranquila y gracias por no lanzarla – respondió, tomándola.

- Ya, se están demorando mucho y nosotras tenemos cosas importantes que discutir – exclamó Alix – buenas noches – continuó empujándolos por última vez y cerrando la puerta – muy bien chicas ¿por dónde empezamos? ¿Comida o karaoke?

Detrás de la puerta, los dos amigos cruzaron miradas resignados, en menos de diez minutos habían sido expulsados de su habitación y era peor para uno de ellos ya que era "su" habitación.

- Adrien, Nino ¿Qué hacen con sus mochilas? – preguntó Nathaniel al verlos.

- Les ofrecimos "voluntariamente" la habitación a las chicas ¿cierto, Adrien? – dijo en tono de broma, Nino.

- Algo así – respondió el chico.

- ¿Y que van hacer? – preguntó el pelirrojo.

- Buscar una habitación en donde aún haya almohadas – contestó Adrien. Nathaniel lo miró confundido.

Para estar más cómodas, algunas de las chicas se llevaron las almohadas y también las frazadas de sus habitaciones.

En ese momento aparecieron Víctor y Kim, que al igual que Nathaniel no pudieron evitar preguntar el motivo por el llevaban sus mochilas.

- Mmm seguro que una de las que se llevó la cama completa fue Chloe... ¿Qué? – preguntó extrañado Víctor.

- Ella no quiso estar en pijamada – respondió Nino – como fue que dijo "Esas son cosas para niñas inmaduras" – continuó imitando el tono de su compañera.

- Sin embargo, esta Sabrina – dijo Adrien.

- Pues hay esta la solución – dijo Víctor. Los demás lo miraron expectante – hay una cama desocupada en mi pieza, la que podría ocupar Nino y Adrien podría ir con Chloe.

- Y te haces llamar amigo de Adrien, eso sería suicidio – exclamó Nino. Mientras a Adrien le daba un escalofrío por el solo hecho de compartir pieza con ella.

- Y esa es la mejor respuesta que puedes recibir – dijo divertido Kim, ante la reacción del rubio – hablando en serio, vengan a mi habitación, tenemos que hablar – dijo tan serio que sorprendió a los demás.

Un viaje InesperadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora