–El día de mañana tienen que traer un pez a clases –Fueron las palabras de la señorita Sharon antes de que la campana sonara anunciando el almuerzo.
Peter estaba ansioso, si le decía a papá podría tener otra mascota además de Claudio. Almorzó en compañía de su amiguito Harry.
–¿Qué pez le pedirás a tu papá, Peter?
–Uno rojo con azul ¿y tú?
–¡Yo quiero uno como Nemo!Jugaron un rato en el pasamanos hasta que la campana volvió a sonar. Entraron al salón y terminaron con el dibujo sobre animales marinos y las clases terminaron. El papá de Harry pasó por ellos esa tarde. Cuando Peter estaba en casa se puso triste porque sus papás no estarían hasta la noche y eso significaba que no podría tener su pez, ¡no habían tiendas de mascotas abiertas en la noche!
Hizo su tarea y salió al jardín para jugar con Claudio hasta entrada la noche. No vio a sus papás llegar pues tenía que dormir temprano.Al día siguiente despertó molesto y fue a la habitación de sus papás, los encontró dormidos aún.
–Papá...
–Sí, sí ¡ya estoy despierto!Steve había vuelto de una batalla y tenía dos costillas rotas. Era turno de Tony llevar a sus hijos a la escuela y encargarse de Virginia. Aún con sueño, se cambió y les dio de almorzar waffles semi-congelados a sus hijos mayores. Ya en el coche Peter recordó su pez.
–¡Papi debo llevar un pez a la escuela hoy, la maestra Sharon nos dijo!
Tony dio un frenón y maldijo mentalmente. Se dirigió a un Sea Sea y bajó rápido.
–¡Carajo! –Espetó cuando cayó en cuenta que iba en pijama y pantuflas, entró a la pescadería con todo el porte que una pijama podía darle– Disculpe, ¿puede venderme un pescado?
–Cla-claro que sí señor Stark, ¿qué tipo de pescado buscaba?
–Deme el que sea, no importa.
–Estamos en temporada de lubinas señor Stark.
–Entonces dame la mejor lubina que tengas –Tony consultó su reloj, Peter entraba en menos de diez minutos– pero rápido, tengo mucha prisa.El joven envolvió la mejor lubina que tenía y se la dio, Tony le dio un billete de cien dólares y salió. El chico sonrió feliz, ¡era su mejor venta del día!
Peter estaba enfadado con su papi, él quería un pez rojo y azul no un gran pez plateado ¡que además estaba muerto! Ni siquiera se despidió de su papi al bajar, la campana ya había sonado, entró corriendo a su salón de clases. Harry aún no había llegado.
La señorita Sharon se enterneció y soltó una suave risa cuando vio a todos sus alumnos con pequeñas peceras y a Peter con una pequeña bandeja en donde descansaba su pescado.
Harry llegó 10 minutos después con un pescado muy parecido al de Peter pero dentro de un tazón. Ambos niños estaban molestos y la señorita Sharon estaba intentando no reírse.
–¿También tu papá te compró un pez muerto? –Harry le preguntó a Peter.
–Sí... ¡Yo quería mi pez rojo y azul!
–Y yo quería mi pez Nemo.La encontré xD.
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No es fácil ser papá.
FanfictionAU. Pequeñas historias Superfamily. ¿El origen? Las raras manías que tienen mis bichitos (los hijos de mi mejor amigo y a los cuales cuido como si fueran míos) y las distintas situaciones que hemos pasado a lo largo de sus cuidados, además de divers...