Johnny tenía su primer diente de leche listo para ser mudado pero el condenado diente no quería caerse. Así que ahora la familia Rogers Stark se encontraba justo en la puerta del patio, el extremo de un hilo atado sobre el pomo de la puerta y el otro extremo sobre el diente de Johnny, Peter jugaba con una espada de Star Wars.
–¡No, no quiero! –Johnny lloraba, no quería que le sangrara la encía– ¡Por favor no!
–Vamos hijo –Tranquilizaba Steve mientras le sobaba la espaldita–, no dolerá.
Tony tenía en brazos a Virginia que reía divertida ante la situación.
–'Ohnny gaína –Tony comenzó a reír.
–¡Virginia! –Reprendió Steve con una sonrisa, su hija cada vez se volvía más hablantina.
Johnny seguía llorando, intentando convencer a sus padres de que no le quitaran su diente. No quería ver sangre pero el pequeño Peter tenía otros planes...
Peter harto de escuchar el lloriqueo de su hermano mayor, le dio con la espada al hilo haciendo que el diente de su hermano saliera volando. Todos se quedaron en silencio y observaban a Peter. De pronto Johnny comenzó a reírse.
–¡Mi diente! –Reía mientras se tocaba la boquita– ¡Ya no está y no hay sangre!
–¿Ves? Y no dolió nada –Le respondió Tony–, ahora deberás ponerlo bajo tu almohada para que venga el ratón de los dientes y te deje dinero.
–¡Sí, sí, sí!
–¡No Claudio! –La vocecita de Virginia se escuchó fuerte.
El gallo se acercaba al diente de Johnny que estaba en el suelo. Todo pasó en cámara lenta.
–¡No Claudio, ni te acerques! –Johnny corrió hacia el gallo.
–¡Johnny no lo toques! –Peter corrió tras su hermano para evitar que le hiciera algo a su amada mascota.
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No es fácil ser papá.
Hayran KurguAU. Pequeñas historias Superfamily. ¿El origen? Las raras manías que tienen mis bichitos (los hijos de mi mejor amigo y a los cuales cuido como si fueran míos) y las distintas situaciones que hemos pasado a lo largo de sus cuidados, además de divers...
