She Will Be Loved

Capítulo 1

"Beauty queen of only 18 she, has some trouble with herself".

Hora de levantarse, maldita sea.

¿Te doy un consejo? Nunca pongas una canción que te gusta como alarma para despertar, o la terminarás odiando, a no ser que se trate de esta canción, resulta simplemente imposible no amarla. Es lindo ¿no? Creer que finalmente todos podemos ser amados.

Lamentablemente, el amor es un arma de doble filo, tienes que saber a quién le entregas todo, porque la misma persona que es capaz de hacerte sentir tan bien, es la misma que con una simple acción tiene el poder de romperte en mil pedazos.

Es vulnerabilidad, confianza, es un acto de devoción completa, en el que le entregas a la otra persona un arma, y sabes que no hará nada para lastimarte, o al menos, lo esperas.

Me gustaría creer que todos podemos ser amados, pero decir eso sería mentir. No todas las personas podemos, o, mejor dicho, no todas las personas tienen la fortaleza como para amarnos, y otras personas no merecen el amor que recibe.

No todo en la vida es justo. Nota mental: debo cambiar mi alarma, porque cada vez que despierto termino analizando tonterías, como ahora mismo, y al final se me termina haciendo tarde.

Abro los ojos con pesadez, no tengo ganas de ir hoy a la escuela, pero si no voy Liam me matará. Debo empezar a dormir más temprano, odio parecer un zombie.

Voy rápidamente a mi closet y agarro lo primero que encuentro para vestirme.

Siento el claxon y salgo, no quiero despertar a mamá.

- Recién te levantas ¿cierto? - dice mi amigo sonriendo.

- Qué bien me conoces- le devuelvo la sonrisa.

- ¿Y tu mamá?

- Durmiendo- le digo- y no quería hablar con ella.

- Tienes que ir a esa reunión Abby, es importante para tu madre.

- ¿Por qué debería de hacerlo? ¿Cuándo ha sido la última vez que ella ha hecho algo que me importe? - digo casi gritando.

- Sólo decía- fija su vista al frente - tal vez ahí podrías conocer a alguien... Llevas mucho tiempo sola.

- Liam, no hablemos de esto ¿sí?

- Es que Abby...

- No hablemos de esto - trato de calmarme- por favor- susurro y lo abrazo.

- Algún día tienes que superarlo.

- Lo que él me hizo no lo superaré nunca Liam, así lo intente, no podré- digo a punto de llorar- estoy marcada, de por vida.

- No pequeña no digas eso- hace que fije la vista en él, detiene el auto. - han pasado dos años Abby, sería bueno que vayas a algún tipo de terapia.

- ¿Para qué? ¿Para que se lo cuente a mi mamá? Estaré bien, no te preocupes.

¿Qué es estar bien? Sinceramente, hace mucho dejé de sentirme así. Es una mezcla de emociones, cada una peor que la otra. Y estoy harta de pensar en el tema, porque cada vez que lo hago termino llorando... O teniendo esas pesadillas. Probablemente es por eso que no puedo dormir temprano. Por temor, miedo a lo que pueda ocurrir cuando cierro los ojos.

Puedo escapar de mis pensamientos durante el día, pero, la soledad de la noche siempre encuentra la manera de atraparme de todo aquello que deseo olvidar algún día.

Llegamos a la escuela y nos dirigimos a nuestros salones. El día transcurre rápido, digamos que no tengo muchos amigos debido a mi aspecto. La mayoría cree cosas de mí que no son o me ponen apodos como "friki", "cabello raro", etc.
Liam por otro lado es un sabelotodo. Tiene las mejores calificaciones y además está en el equipo de baloncesto. "El chico ejemplar", que es mejor amigo de la rara.

Cuando es la salida Liam conduce hacia mi casa, le invité a comer. Bajamos del coche y veo a mamá muy sonriente.

- Abby, Liam que bueno que ya llegaron.

- Hola señora- la saluda Liam devolviéndole la sonrisa.

Durante la comida mi mamá miraba mucho a Liam, algo tramaba.

- Y dime Liam, ¿en la noche tienes algo qué hacer? - ya veo por dónde va.

- Es el cumpleaños de mi tía- se excusa anticipadamente.

- ¿De qué tía? - le pregunto.

- Marie, no la conoces- está nervioso, está mintiendo.

- Esta noche es el cumpleaños de mi novio- dice mi mamá emocionada- y quería que acompañaras a Abby como para que no se aburra mucho, pero no hay problema, creo que Joe tiene un sobrino casi de su edad.

Levanto mis ojos hacia arriba y sigo comiendo, precisamente ahora no tengo muchas ganas de pelear.

A las dos horas Liam se despide de mi madre y lo acompaño a la puerta

- Saluda a "Marie" de mi parte- le digo haciendo comillas.

- Es por tu bien Abby- susurra- así podrías pasar más tiempo con tu mamá.

- Intentará teñirme el cabello para esa tonta reunión o no sé qué, sálvame - le digo haciendo puchero.

- Verás que al final me agradecerás - dice yéndose.

- Eres un mal amigo Payne- le grito sacándole el dedo medio.