She Will Be Loved

Capitulo 6

Dani se ofreció a venir a mi casa a ayudarme con la ropa con la que iré mañana, me pareció extraño, pero acepté el que viniera. Supongo que es algo que las amigas hacen. Todo esto es nuevo para mí, pero bueno, confiaré en Dani y su buen gusto.

Prácticamente sacó todo lo que había en mi closet hasta sacar algo que le "gustara para que me lo pusiera".

- Espero que ordenes todo lo que sacaste – digo mirando mi ropa esparcida a lo largo de mi cama.

- Claro que lo haré, descuida, no tomará ni cinco minutos.

- Bueno, está bien, ha servido para encontrar ropa que no sabía que tenía.

-Este va con tu cabello - me dice sonriendo- ¿cuándo te lo pintaste?

- Hace dos años.

- Yo me quiero poner azul en las puntas. ¿Qué opinas?

- Así te ves bien- le digo- no es necesario que hagas tantos cambios para impresionar a Zack.

- Es Zayn.

- Como sea. Si quieres hacer algo, hazlo por ti, no por un tonto chico.

- No es sólo un tonto chico, es el chico – dice Dani como si fuera algo obvio - ¿Nunca te has enamorado de algún chico antes y has hecho hasta lo imposible para que se fije en ti?

Recuerdo su sonrisa la primera vez que lo vi.

Sus ojos miel.

-No realmente.

- Tus palabras dicen "no", pero tus ojos dicen "sí". Oh, entiendo, es de esas historias de las que uno no desea hablar ¿no es así? – pregunta y asiento – ya veo, no te preocupes, si ese chico se fue mejor, seguramente no valía la pena.

- En eso tienes toda la razón del mundo.

Estuvimos conversando por un buen rato hasta que su madre la llamó por celular y regresó a su casa. Me miro al espejo y analizo lo que veo.

Vaquita de Pandora.

No soy una vaquita de Pandora. Soy Abigail Stone, y puedo salir adelante. Si me lo propongo, puede que tal vez, logre ser feliz. Sé que hay cosas que nunca podré tener, como algún novio, una primera vez romántica, mi vida amorosa está totalmente arruinada, y ni qué decir de la sexual.

Pero puedo tener más amigos, como Dani. Hay algo especial en ella, después de pensarlo por muchas horas, me di cuenta que en ella veía reflejada a la antigua Abby, antes de que mi vida cambiara. Estoy segura, que, si hubiese cerrado la puerta con llave, hoy en día, sería una chica como Dani.

Ignoro mis pensamientos y prendo la tele. Comienzo a ver "Friends" hasta que me percato de la hora, son las 3 am. Otra vez me amanecí. Mierda. ¿Será una señal de que tal vez necesito volver a tomar los ansiolíticos? No soy fanática de las pastillas, pero tampoco lo soy de pasar noches sin dormir.

Aprovecho en levantarme de la cama antes de que suene el despertador y entro a la ducha. Me visto con la ropa que Dani seleccionó ayer y bajo a la cocina para preparar café, lo necesito con urgencia. Me doy un vistazo rápido antes de salir.

- Me veo ridícula - me digo a mí misma riendo frente al espejo.

- ¿Y ese milagro? - Pregunta Liam asombrado.

- ¿Milagro de qué?

- Te ves bonita y hasta te has peinado - le pego en el brazo – Oye! Eso duele.

- Así dolió en mi corazón- le digo riendo.

- Deberías estar en el equipo de luchas, tus golpes duelen mujer.

- Pues tus palabras también, tonto.

Las clases de geometría estaban más aburridas que de costumbre, al punto de debatir mentalmente entre prestar atención a la clase o clavarme un lápiz en el ojo y terminar mi agonía. La profesora explicaba cosas que no entendía, iba a quejarme con Dani cuando veo que estaba hablando con alguien por su celular.

- En media hora salgo de clases, te espero.

- ¿Media hora? Diablos pensé que saldrías dentro de una hora.

- Mierda, no sé cómo haces, pero vienes.

- Piensa en mí, estoy en la universidad.

- Lo sé cariño, vale, me arreglaré un poco en el baño mientras te espero.

- ¿Quieres lucir bien para mí?

- Absolutamente, me excitas.

Contengo la risa y Dani voltea a verme.

- ¿No te han dicho que es de mala educación ver conversaciones ajenas? - dice fingiendo indignación mientras toca su pecho.

- Y así dices que no le interesas.

- ¿Eh? ... Ay Abby, con el que hablo es mi mejor amigo del mundo que es amigo del chico que será mi novio, futuro esposo y padre de mis hijos.

- ¿Terminaron el chisme? - nos pregunta la maestra evidentemente enojada.

- Lo siento- dice Dani – no volverá a ocurrir.

Pensé que las clases nunca acabarían, creo que jamás me había alegrado tanto de escuchar la campana como ahora. ¿Con qué serie me amaneceré hoy? Creo que Greys Anatomy es una buena opción. Estoy por preguntarle a Dani, pero creo que mejor será que intente calmarla, la veo muy nerviosa.

- ¿Estás bien? Pareces algo nerviosa.

- ¿Nerviosa? Me siento nerviosa cuando tengo que hablar por teléfono con mi tía Marissa, siento que moriré en cualquier momento. En menos de una hora lo veré.

- Tranquila, vamos al baño.

- Sí, buena idea, es hora de retocar mi maquillaje.

Observaba a Dani, arreglaba su cabello, se ponía tanto maquillaje hasta un punto en el que su cara ya no era visible. No sé si soy una amargada o si de verdad ella está exagerando. Mira su celular y chilla haciéndome asustar.

- Ya están abajo- sonríe.

- ¿Quién eres y qué hiciste con mi amiga? - digo riendo- tienes un poco de cara en tu maquillaje.

- Ja-ja muy chistosa Abby. Es tu envidia la que está hablando. Me veo fabulosa.

- Sí, para ir a un circo – me da una mirada muy seria – Oh, vamos Dani, es una broma, sonríe, que Romeo ya llegó.

Liam se sorprende al verla, pero no hace ningún comentario, y en parte mejor, conociéndolo debe de estar pensando en mil bromas por decir, y ahora no es el momento perfecto para eso. Dani puede sufrir un infarto, me asusta verla tan emocionada. Caminamos casi en cámara lenta, pues nuestra nueva amiga ha decidido usar unos tacones que apenas la dejan moverse.

- Pregunta rápida, si apareciera un asesino en serie en este preciso instante ¿A quién de los tres matarían primero? – pregunta Liam señalando a Dani.

- ¿Y el chiste? ¿Viene aparte? – responde ella poniendo sus en blanco – para tu cumpleaños te regalaré un libro de chistes, Troy, necesitas aprender unos buenos.

- Déjame entender, ¿haces todo esto por un chico?

- No lo entenderías, mi querido Troy - dice Dani poniéndose más labial.

Cuando finalmente llegamos Dani me aprieta la mano en señal de nervios, respira profundo y sonríe.

- Haroldo- dice abrazando a uno de los chicos que tenemos en frente - Hola Zayn.

- ¿Qué hay?

- ¿Abby?