Capitulo 2

3.5K 119 17
                                    

-Anda alistándote que Joe pasará por nosotras en una hora.

He tratado toda la tarde de decirle que no quiero ir a mi madre, pero sigue insistiendo a que vaya, en su vocabulario no existe la palabra 'no'. Al menos no existe cuando se trata de algo que ella quiere. ¿Todas las madres son así?

Me resigno y entro a la ducha, después de 30 minutos de relajo busco un vestido y tacones bajos para ir. No soy una chica que se preocupe mucho por su aspecto, ni mucho menos me gusta usar ropa tan ceñida al cuerpo, prefiero la ropa más ancha y cómoda, pero haré este sacrificio por mi madre.

- Pero qué bonita te ves – exclama mi mamá – sube y ponte un poco de maquillaje y quedarás perfecta.

Resoplo y la obedezco. Todo sea por la paz.

Me maquillo y ya estoy lista. Siento el claxon, es Joe, el novio de mamá. Trato de poner una sonrisa en mi cara y bajo junto con mi madre.

Comienzan a ponerse melosos delante mío y no se en dónde meterme. Al poco rato llegamos a su casa.

Puedo hacerlo, es sólo una cena, un momento incómodo y todo habrá pasado. No me gusta conocer a personas nuevas, siento que me juzgan en todo momento, no es problema de ellos, soy yo. Tengo serios problemas de confianza.

Las personas suelen creer que soy seria o que siempre estoy enojada, pero no saben que mi rostro es así. No soy de aquellas personas que siempre sonríen, sin embargo, tampoco soy una bruja malvada. Según Liam, soy la definición de lo que se conoce como "cara de culo". Y puede que tenga razón.

No sabía en dónde meterme para sacarme un poco esta incomodidad del cuerpo, no sabía con quién hablar o hacia dónde mirar, hasta que una señora de cabello negro y unos ojos hermosos me sonríe.

- Tú debes ser Abigail - asiento- Soy Anne, hermana de Joe, debes estar muy aburrida, ahora viene mi hijo para que, aunque sea se acompañen.

- Oh no se preocupe así está bien- digo tímida.

- Tonterías- dice riendo- Harry, ven aquí - grita.

Aparece un chico un poco mayor que yo, es alto y debo reconocer que es muy guapo, sus ojos esmeraldas son simplemente cautivadores al igual que ese desordenado nido de rulos que tiene en el cabello.

Harry, ve a Anne y funce el ceño, creo que no tuvo la misma impresión que yo tuve de él. Y era de esperarse, es un chico guapo y yo simplemente una rara, con cara de culo.

- Te presento a Abby- dice Anne sonriendo y se va.

- Hola- decimos los dos y nos quedamos callados por un rato.

Su mirada era como si me odiara o algo así. Esto era muy incómodo. Oh vamos Abby, deja de juzgar, quizá él también tiene cara de culo, y puede que sea una persona amable.

- ¿También tú te amaneciste haciendo trabajos o siempre eres así de seria? – me pregunta mientras rasca su nuca... ¿Está nervioso?

- Sí, se me acumularon algunos proyectos – miento, es mejor que crea que estoy cansada a decirle que tengo cara de culo siempre, no lo conozco tanto como para empezar una conversación así con él.

- ¿Qué estudias? Tienes cara de arquitecta – dice aparentemente analizándome – yo estudio administración, no es la carrera más interesante del mundo, pero me gusta.

- Aún estoy en la escuela.

- Nah- dice- ¿en serio?

- Sí, estoy en el último año.

- ¿Cuántos años tienes? - dice ahora sonriendo – Pensé que eras algo mayor.

- Eres raro- le digo con una media sonrisa.

- ¿Raro yo? ¿Has visto tu cabello? - me dice en un tono burlón.

Me río y lo señalo con mi dedo índice.

- Vale Harry esta vez has ganado.

- Hey! Sí sabes sonreír – vuelve a burlarse y saco mi lengua.

- Y también sé pelear – respondo con una sonrisa irónica, bueno, no mentía, mi padre me enseñó a defenderme cuando era una niña. Me hubiese gustado poder usarlo en alguna situación de la vida diaria.

- Tu mamá es linda- me dice de la nada- ¿por qué se fijó en mi tío?

- No lo sé... ¿El amor es ciego?

- ¿Pero a ese punto? O sea, tan sólo míralo.

Nos detenemos a mirar a Joe, y comenzamos a reírnos cuando notamos que Joe también nos miraba como si supiera que estábamos hablando de él.

Todo iba muy bien, me sentía contenta de poder haber conocido a alguien sin que tuviera prejuicios sobre mi aspecto.

Hasta que sonó esa canción.

"Teenage Dream".

No.

Ahora no.

Los recuerdos vienen a mi mente.

"Cuando escuches a esta canción siempre piensa en mí, yo haré lo mismo contigo".

Su recuerdo aún me persigue, quiero llorar, irme corriendo, pero no puedo. La melodía me transporta a través del tiempo, hasta aquel momento, en el que mi vida completa cambió. Por él.

Trato de mantener la calma, pero los recuerdos de esa noche no me dejan. Daría todo lo que tengo, y hasta más, empeñaría mi alma misma si es necesario, todo con tal de olvidar. Quisiera despertar y no ser capaz de acordarme de nada. Es la única manera que tendría de comenzar desde cero.

"Nunca me olvidarás ¿de acuerdo?"

- ¿Abby estás bien? - tengo a mi lado a un preocupado Harry.

- Sí – digo en apenas un hilo de voz, aunque no es cierto, estoy mareada, siento que en cualquier momento voy a desmayarme, o sufrir un infarto.

- ¿Segura? Estás pálida. ¿No quieres que te lleve a tu casa?

Volteo a mi alrededor y veo a mamá ya un poco ebria, asiento y corre a hablar con Anne. Por mi parte, me acerco hacia mi madre, con la excusa de que mañana tengo escuela y estoy cansada, acepta que me vaya con Harry y me indica que ella regresará más tarde. Diez minutos más tarde ambos estamos en su coche, con dirección a mi casa.

- Debes estar cansada- me dice – intenta tomar algo con azúcar en tu casa, para que se te regule la presión.

- Sí, descuida. Estaré bien.

A los pocos minutos llegamos a casa y para el coche.

- Gracias por traerme- le digo.

- Es lo menos que puedo hacer- sonríe- ojalá nos veamos pronto Abby. Espero que te sientas mejor. 

She Will Be LovedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora