Cap.1 Siempre dama de honor y nunca novia (o algo parecido)
Él se acercó a la puerta del copiloto y me la abrió
-Cariño, ¿Desde cuándo me abres la puerta para que entre?- Le dije sorprendida.
-Y tú… ¿Desde cuándo me llamas cariño?- Me miró y sonrío con una sonrisa pícara mientras se acercaba a la puerta del piloto.
-Desde que eres tan caballeroso por las mañanas temprano. Y no me contestes con otra pregunta- Le repliqué mientras entraba en el coche.
-A ver, qué prefieres: ¿La dura verdad o una mentira piadosa?- Metió la llave en el contacto y arrancó.
-La dura verdad siempre. Soy una chica fuerte.- Le dije, haciéndole un mohín.
- Está bien, tú lo has querido. Desde que así evito que conduzcas tú. Has caído en mi trampa, muñeca.- Y empezó a reírse como el malo de una película. Con 20 años que tiene y sigue siendo un crío.
-Marcos Pascual, desde que tengo el carnet solo me has dejado conducir una vez. No es justo. Vale, ya sé que es tu coche, pero joder, no conduzco tan mal, ¿No?- le contesté, y le puse morritos.
-Beatriz Rodríguez, ¿De nuevo quieres la dura verdad? Conduces FATAL. Todavía me acuerdo de la vez que te lo deje y casi nos comímos un árbol- y comenzó a reírse tan fuerte que casi me dejó sorda.
-No seas fantasma, di ese volantazo porque se me cruzó un perro. Y mi profesor de autoescuela me dijo que conducía genial.- y me enfurruñé.
Pero él no me contestó. Tenía la mirada fija en la carretera. Íbamos de camino a una boda, allí donde dio Dios las tres voces, en la quinta puñeta. Teníamos (mejor dicho, ÉL tenía) una actuación allí con su grupo “Bromas Aparte”. Iba a ser un viaje largo. Y Marcis iba muy callado, algo muy raro en él. Los viajes en coche siempre eran un concierto de Marcos a voces limpias mientras yo miraba por la integridad de mis oídos y hoy no había encendido la radio. Algo iba mal.
-Marcos, ¿Pasa algo?- le dije preocupada.
-Ummm… no, ¿Por qué?
-Marcos. Llevamos media hora de viaje, estás más callado que una puta, y no has encendido ni la radio.
-Esa boca, niñata- Me dijo sonriendo.
-Va Marcos, déjate de tonterías. ¿Qué te pasa?-
- A ver Bea, es una cosa que aún no te he explicado… y que te contaré con el tiempo, ¿vale?- Me dijo, buscando en mi mirada algún vestigio de reproche.
-¿No puedes adelantarme un poquito?- Le dije con tranquilidad, aunque en realidad estaba empezando a asustarme. ¿Un mes juntos y ya me tenía secretos?
-Esta niña siempre tan impaciente y tan cotilla. Creo que deberías cambiar de carrera. La filología inglesa no es lo tuyo, es el periodismo.- Dijo riéndose. No pongas a prueba mi paciencia, Marcos, pensé. Lo mire con desaprobación.
-Vaaaale. Mira, por ahora te diré esto: la boda a la que vamos es de una persona muy importante para mí. Es como una prueba que tengo que superar, no se si me entiendes. Y estoy un poco nervioso, eso es todo. –Me dijo con la mirada fija en la carretera.
-¿Y qué pinto yo en esta prueba que tienes que superar?- Le pregunté inquisitiva.
-Creía que venías a ver al grupo, que eras la fan número uno y todas esas cosas…-Por fin una sonrisa auténtica.
-Que sí, que soy Bromera forever y todas esas cosas, ya lo sabes, pero como no me digas porque pusiste tanto interés en que yo fuera, cuando vas a montones de conciertos sin mí, te juro que dejo de ser “Drummer”- Ahí lo lleva, Señor Pascual.
-Jajajaja- Se rió a carcajadas- Sabes que no serías capaz- Me miró, y yo lo miré clavándole la mirada- Vale vale, no veas como esta hoy la señorita. Tú hoy juegas un papel importante en la prueba, ¿Vale? Digamos que necesito que estés a mi lado hoy. Como apoyo. ¿Podrías hacerlo sin hacer preguntas si luego te prometo que te lo contaré todo con pelos y señales?- Y se quedó mirándome. ¿Qué sería eso que con tanto recelo guardaba y que no quería contarme ahora? ¿Qué tendría que ver con la boda? ¿Y que prueba sería?
-Marcos, la carretera. La vista a la carretera.- Siguió mirándome- Va que sí, que te lo prometo. Pero mira a la carretera por Dios santo.
-Así me gusta. Sin rechistar- y me dedicó su sonrisa más picarona. Yo le gire la cara. Y el volvió a reírse.- Eres tan adorable cuando te haces la indignada…
-Va, déjate de moñadas, que sabes que no te pegan. Y pon la radio por favor.- Dije, intentando mantener la postura. Pero no aguante demasiado.
-A sus órdenes, mi capitana. Por cierto, que te quiero y esas cosas.- Dijo mientras encendía la radio. Comenzó a sonar “Love Me Again” de John Newman, y entonces me transporté a aquél día 6 de Febrero.
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Hola! Comienzo hoy la aventura de escribir, a ver como se me da. La verdad es que me hace mucha ilusión, y espero que os guste tanto como me gusta escribirla a mí. Sobre todo darle las gracias a @SrtaSinsajo por dejar que "continúe" su novela "Make my dreams come true" desde mi perspectiva. Así que os recomiendo que la leáis. :D Muchas gracias por leer :)
@Ambordiguilla
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Promise me the moon.
FanfictionEstaba en Madrid y con sus dos mejores amigas. Había dejado atrás su pueblo y se enfrentaba a una nueva vida. Bea, con 20 años, una desilusión a sus espaldas, con ganas de comerse el mundo, y apasionada de la literatura Inglesa, y obsesa por llevar...