(POV Alex)
Desde el sábado algo está mal con Aiden. Que por qué? Porque no ha aparecido en la Universidad hasta hoy que es jueves, y está demasiado sobreprotector, si voy a un sitio él también.
Debo ir a entrenar esta tarde y me ha dicho que me acompañara, por mucho que le he dicho que no que iré con Lucas, el sigue empecinado en seguirme a todos sitios y me está cansando.
Creo que no tuve que haberle contado mi historia, esta paranoico con vigilarme, para que no corra ningún riesgo.
Agradezco su preocupación pero como para que está haciendo todo esté papel?
Vale que ahora seamos amigos si se puede llamar así pero no tiene que hacer un mundo de nada.
Por otra parte tengo pelea está noche. No me apetece mucho pero debo hacerlo si quiero seguir con la investigación hace demasiado que estoy atascada.
Por eso debo entrenar bastante esta tarde. Me enfrento a la Rosa Negra, su nombre Real Emily Roth. Es una chica la cual es una engreida siempre va presumiendo de ganar sus peleas, que es la número 1. La otra vez que perdi con ella me estuvo mareando y estuvo dejando mi apodo por los suelos.
Esta vez debo ganarla, ya no solo por la investigación sino para callarle la boca ya de una vez.
Al salir de la Universidad, me dirijo a mi moto y el pesado de turno aparece.
- Te acompaño a casa.
- No hace falta.
- Voy a ir aunque no quieras.
Lo miro bien a la cara y me contengo para no soltarle todo en un grito.
-Mira no se por qué faltaste hasta hoy, pero deja de agobiarme, he estado bien todo éste tiempo y no pienso que estés encima mio todo el día.
- Alex quiero protegerte que no lo entiendes??
- Si te lo conté no es para que estés encima mío es para que veas que te tengo confianza, me he cuidado todo este tiempo igual no me va a pasar nada, sigue como siempre sino al final tendré problemas.
- Es que me preocupa y agradezco tu confianza, pensándolo bien tienes razón llamarás demasiado la atención pero igual estaré contigo ya sabes que no puedo dejar a mi novia sola.
Me guiñó el ojo y viendo que todo volvía a la normalidad rodé los ojos.
- Has vuelto! Prefiero el tonto presumido que cree que tiene todo a un chico sobre protector y pesado.
Con esta conversación nos dirigimos a mi casa donde nos despedimos en la entrada.
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La Boxeadora
RomanceMi felicidad terminó a la edad de 10 años, mas concretamente, el día que murió mi padre. Te preguntarás el ¿Por qué? Muy simple, un delincuente miserable e infame asesinó a mi padre, estando mi madre y yo en casa. Aquel día no solo perdí a mi padre...