(POV Alex)
James había hecho la mitad del trabajo, la mitad de mi plan, sabia que era importante pillar a Bassi pero de ello se encargarían ellos.
Yo tenia una tarea mas importante encontrar a mi madre y tenia una ligera idea de donde se estaba escondiendo.
No quería engañarlos pero era mi única opción ellos no me iban a permitir participar en ninguna de las dos operaciones. Se lo debía a mi padre, merecía descansar en paz.
Viendo como había sido de sádica mi madre en sus asesinatos sabia lo que me esperaba, esto solo acabaría con una de las dos bajo tierra, ella no me lo iba a poner fácil para encerrarla.
Sabía que una vez esto terminara se me iba a caer el pelo entre James y Aiden querrían encerrarme y me llevaria una bronca del quinze pero valia la pena jugarmela para poder salvar a las personas que mas quiero.
Cuando llegamos a casa Fred se quedó en la puerta vigilando mientras yo estaba dentro, buscando lo que necesitaba, mi pistola.
Si, tengo arma, como anteriormente expliqué, aprendi a disparar a los 15 y a los 18 despues de conseguir mi permiso, me entregaron la mia. Sin embargo James me hizo prometerle que no la utilizaria hasta que estuviese en el cuerpo o en caso de causa mayor.
Y la verdad esta era una causa mayor.
Mientras me preparaba, pensaba en como escapar de Fred pues el hombre era rápido y me di cuenta que la única forma de escapar era dejarlo inconsciente.
Sali con casco en mano.
- Alexandra no puedes salir ya lo sabes.
- Lo se Fred pero quiero tomar el aire
- No puedes vuelve dentro
- Lo siento
Después de pedir perdón le di un golpe, callo al suelo, decidí no noquearlo, pero si aturdirlo lo suficiente para poder escapar.
Me coloque el casco y subí a mi moto con una dirección en mente, una dirección que hacia casi once años no había pisado.
Decir que cuando llegué, bajé de la moto y miré la casa me tenia los nervios en el estomago era poco.
Mi Casa
Ese lugar donde fui feliz, donde era una simple niña inocente, que quería el cariño de su madre y jugaba y estudiaba sin miedos y sin temor, sabiendo que tenia un hombre que la cuidaba e iba ha estar siempre con él.
Que inocente e ingenua.
Llevaba la llave que hace años habia guardado, sabia que en el futuro la utilizaria para venderla y ahora estaba ahi para atrapar a su propia madre.
Sin embargo no hizo falta ninguna llave, la puerta estaba abierta, lo sabia, ella, esa mujer que llamaba mamá, sab''ia perfectamente que ella iria a buscarla.
Entraba sigilosa mientras agarraba firmemente el lado donde tenía su arma. Cuando noto movimiento detrás de ella.
La puerta habia sido cerrada. Se giro mirando la silueta de esa mujer con la tenue luz que entraba de fuera.
No paraba de mirar la cara de la mujer que alguna vez quiso tanto que por su salud se habia metido en el mundo tetrico de las peleas ilegales para ganar dinero para sus tratamientos, pero que equivocada estaba. Tenia que agradecer que los amigos de su padre la habian acogido y Nadine la tratase como una verdadera madre.
Sus ojos que alguna vez le habian parecido de un azul como el mar estaban empañados de neblina, realmente habia enloquecido y no era ella.
- Marine
- Oh que forma es esa de hablarme, no soy mamá, ni mami ya?
- Perdiste ese derecho en el momento que me di cuenta del monstruo que eres
- Que dolor! Mi hija me llama monstruo, jajajaja
- Siempre fuiste fria pero nunca imagine que pudieses hacer un acto tan horrendo como asesinar, mucho menos a tu propio marido
- Hija, hija hay interesas que pesan mas a mi vida
- Tu obsesion?
- No es una obsesion el me quiere.
- Claro, te quiere taanto que en vez de llevarte con el y hacer una vida nueva, te mantuvo en un sanatorio mental, dime que tiene el que te tenga la mente retorcida
- Mira niña no sabes nada, mi vida era aburrida, me embarace de ti a ver si Joseph decid''ia pasar mas tiempo en casa, y funciono, mientras eras una bebé, pero conforme fuiste creciendo ese tiempo que pasaba conmigo te lo dedico a ti y a su estupido trabajo, un trabajo que no nos daba para caprichos. Un dia tropece con Johan, un hombre culto que me puso atencion y me regalaba cosas que tu padre no me daba
- Papá se mataba a trabajar para darnos de comer y tener un sitio donde poder vivir una vida tranquila sin faltarns de nada, pero tu eres tan materialista que caiste en losenredos de un narcotraficante.
- No eran enredos, él me ponía la atención que tu padre no me ponía.
- Papá siempre te tenia en atenciones te daba pequeñas sorpresas demostrándote su amor y tu te dejaste embaucar por un tipo que te trataba como un chivo expiatorio.
- el me quiere.
- Tú nunca fuiste importante para Bassi!! Te embaucó para saber los movimientos que había dentro de la policía para estar alerta, te volviste una materialista a la cual le importaba mas las migajas de cariño de un delincuente y los regalos caros, que tu propia familia, envidiando a tu propia hija que lo único que quería era vivir feliz con sus padres.
- No, no -se agarraba la cabeza negando- el me quería el se preocupa por mi.
- Si te hubiese querido, hubiese dejado a Ivonne Turner ser feliz con Clanner, pero la retuvo porque estaba obsesionado con ella, y eso es lo que tu no soportaste que él tuviese a esa mujer en su casa al lado suyo y no ha ti, por eso cuando ella supo de quien eras esposa quiso avisar de lo que iban hacer, por eso la mataste, para que tus engaños no salieran.
-Bastaaa!
Se lanzo encima de mi sin darme tiempo a nada, empezó a agarrarme del pelo, tirándome al suelo pero antes de que volviese a atacar le pegue haciendo que la retroceder.
- Mira en lo que te has convertido, en un despojo humano por culpa de un hombre vil y miserable.
- Te vas a arrepentir de tus palabras, si pude con tu padre contigo también
- No pudiste contra él, no seas hipócrita, en vez de hablar con él como una pareja que eran, decidiste engañarlo y para rematar matarlo por la espalda como una cobarde, eso es lo que eres.
- Voy a acabar contigo como aquel día tendría que haber hecho.
- Adelante aquí estoy.
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La Boxeadora
RomanceMi felicidad terminó a la edad de 10 años, mas concretamente, el día que murió mi padre. Te preguntarás el ¿Por qué? Muy simple, un delincuente miserable e infame asesinó a mi padre, estando mi madre y yo en casa. Aquel día no solo perdí a mi padre...