Mientras Alex se veía peleando con su madre, en otro lado la operación para arrestar al gran narcotraficante Johan Bassi se estaba llevando acabo con éxito, había costado pero toda la acción no repercutió en ninguna baja de los suyos gracias al apoyo del SWAT.
James agradeció al capitán Harry del SWAT y luego se acerco a su equipo una vez se marchaban los furgones con todos los detenidos, esta vez ninguno se salvaría de la cárcel y de la permanente.
- Chicos, buen trabajo, al fin acabo todo
- No todo y lo sabes James, tenemos que agarrar a la madre de Alex
- Lo se eso va a ser mas complicado.
- Sabes una cosa, me extraña que Alex se haya dado por vencida tan rápido y no haya insistido en venir, sabes como de cabezota es.
- Si, créeme que lo se la he criado durante estos últimos 11 años.
En ese momento el teléfono móvil de James viendo todas las llamadas del agente Wesly (algo malo había ocurrido con Alex)
- Que ocurre Fred?
- James, Alex escapo
- Como que escapo? Fred tenias que vigilarla
- Ella salió y yo le dije que volviese dentro, pero al querer girarme, ella me noqueo solo pude ver como agarraba su moto.
- Mierda!!! Esa niña me va a sacar canas verdes. Bien Fred avisa a los compañeros que estén patrullando hay que encontrarla.
- Si señor
Al colgar, James se sentía agobiado y asfixiado, esa niña era tenaz igual que su difunto padre.
- Que ha ocurrido?
- Aiden tu te conseguiste a las cabezota y tenaz mujer que he visto en mi vida, esa niña se escapo. Aturdió a su guarda y se marcho
- Eso significa que fue a en busca de su madre.
Los dos se pusieron en camino en busca de Alexandra. Hasta que a Aiden se le vino una ligera idea de donde podía estar.
- James y si ella fue al cementerio.
- No, esta oscureciendo por lo que el cementerio ya debe de estar cerrado
- Tiene que haber algún lugar al que ella se le haya ocurrido la idea de encontrarla.
- Espero que no sea lo que estoy imaginando pero ya se donde esta.
- Donde?
- En su casa. La casa a la que no había vuelto desde la muerte de su padre.
Con esas palabras salieron corriendo, subiendo al coche y yendo lo mas rápido posible ya que se encontraban en la otra parte del pueblo.
Volviendo a nuestra protagonista
Alex se estaba viendo con debilidad, porque aunque ella sabia que se enfrentaría a su madre, la mujer que le dio la vida, sabia también que la cosa podía terminar muy mal, sin embargo se resistía a sacar el arma.
Se había tratado de autoconvencer que era un criminal mas y si no podía conseguir poder esposarla, las cosas acabarían mal.
La debilidad y la oscuridad se unieron en aquella casa, la cual estaba siendo marcada por una pelea entre madre e hija.
Deseaba por una vez por todas todo terminara ya no soportaba esto mas tiempo.
Con la oscuridad en la casa su madre estaba teniendo ventaja, ella llevaba años estando entre las sombras sigilosamente escondiéndose.
Escuchaba, todos los ruidos a su alrededor, estaba en la sala atenta agudizando no solo el oído sino la vista, tenia una pequeña linterna que había sacado de su bolsillo, mientras sacaba el arma, pero no podía encontrarla.
El ruido de la puerta la distrajo apunto la linterna, ahí estaba Aiden, cuando fue a dar un paso hacia el, su madre se puso detrás de el, con el cuchillo en el cuello
- Vaya, vaya el novio de mi niña, ooo hija creía que eras mas valiente.
- Mierda Aiden, que haces aquí? Suéltalo! -dijo apuntándola-.
- No, no -dijo moviendo el dedo de lado
- Esto es entre tu y yo el no tiene nada que ver.
- SI quieres que lo libere, suelta el arma hija.
Aiden permanecía callado, los dos se miraban como tramando un plan para poder salir de esta.
- De acuerdo- dijo acercándose y dejándola en el suelo.
- Buena niña.
- Ahora suéltalo.
Lo soltó, haciendo que Aiden en un momento le diera un golpe, haciendo caer el puñal, pero la suerte no estaba con ellos, mientras se acercaba a Alex, Marine se recupero cogiendo el cuchillo y lanzándolo.
Aiden se movió a tiempo, solo rozándole en el brazo, sin embargo, el puñal fue a parar al hombro de Alex.
Un grito desesperado salio de los labios de ella, Aiden se acerco a socorrerla, pero no podía hacer con esa mujer hay.
- Tranquila.
- Aiden sácala.
- Si lo hago te desangraras.
- Hazlo
- No
Aiden se giro a esa mujer que ahora tenia un arma, el saco la suya apuntándola con rabia.
- Mujer loca, a tu propia hija.
- Bueno, no iba para ella pero algo es algo, solo me falta rematar el trabajo y me podre ir con mi amado.
- Nueva información para ti Marine tu amado Bassi esta dirección a una cárcel de máxima seguridad de la que no va a volver a salir.
- Mentira, -disparo justo a la pierna de Aiden. Sin embargo con mala puntería solo provocándole el ardor del roce.
- Mierda.
Alex mientras Aiden distraía a Marine, se arranco el puñal, sentía que en cualquier momento se desmayaría, pero debía terminar con esto, se arrastro a su arma. Se levanto como pudo y la apunto.
- Esto se termino baja el arma.
- No lo voy hacer, antes te mato.
- Tu lo quisiste.
En aquel momento dos disparos sonaron. Las dos cayeron al suelo.
Una de ellas no volvería a despertar.
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La Boxeadora
RomanceMi felicidad terminó a la edad de 10 años, mas concretamente, el día que murió mi padre. Te preguntarás el ¿Por qué? Muy simple, un delincuente miserable e infame asesinó a mi padre, estando mi madre y yo en casa. Aquel día no solo perdí a mi padre...