(EL PRIMER CAPITULO SE NARRARÁ EL PRIMER DÍA DE CLASES DESDE EL PUNTO DE VISTA DE GUILLERMO Y EL SEGUNDO SE NARRARÁ TAMBIÉN EL PRIMER DÍA DE CLASES PERO DESDE EL PUNTO DE VISTA DE SAMUEL, LUEGO SE IRÁN INTERCALANDO)
CAPITULO 2 :
Narra Samuel:
Sentí unas caricias en mi cabello que me hicieron abrir los ojos poco a poco para que se acostumbren a la luz que se filtraba por la ventana, allí mirándome con una cariño maternal estaba María.
-Pequeño, levántate- susurro con su mano todavía revolviendo mis cabellos. Me estire y pude sentir algunas vértebras de mi espalda crujir, ya que creo que estaba durmiendo en una mala posición.
-Buenos días, María- dije regalándole una sonrisa, ella dejo de de hacer sus movimientos circulares con el pulgar sobre mi pelo para abrir las cortinas de la ventana, la luz que entro me hizo cerrar los ojos por unos segundo hasta que puede abrirlos nuevamente.
- Levántate, báñate, cámbiate y luego baja a desayunar- me dijo mientras se encaminaba a la puerta de mi habitación para salir.
- Espera María... Ellos están aquí?- Pregunte refiriéndome a mis padres.
-No, lo siento Samuel, salieron temprano para arreglar una asuntos en la compañía- dijo triste.
-Esta bien- dije con una sonrisa, ya estaba acostumbrado, desde que tenía memoria mis padre nunca estuvieron en casa y muy pocas veces se presentaban en el dia de mi cumpleaños pero ahí estaba María, esa mujer trabaja aquí desde que nací, es como mi segunda madre y hasta puedo decir que primera también, ya que nunca considere a la mujer que me dio la vida como una madre modelo... María siempre me acompaño, me contuvo en esos días donde mis padres ni siquiera se acordaban de mi cumpleaños, cada vez que pasaba me llevaba a rastras a la cocina para hacer un pastel juntos y distraerme... y siempre funcionaba.
Ella se fue por la puerta y yo me dirigí a mi palcard para buscar mi ropa, ropa interior, una camiseta negra y unos jeans con unas zapatillas negras, luego me metí al baño a bañarme.
Cuando ya estaba duchado y vestido, me dirijí a las escaleras y baje. Fui a la cocina donde me esperaba María con una taza de café con unos cupcakes con glaceado de color morado, ya que ese es mi color favorito... si es raro pero cada uno con sus gustos.
María siempre se lucia en cada desayuno y con este no podía ser menos, no charlamos tanto ya que como es una de las mucamas de la casa, también tenía que hacer sus deberes, a veces me gustaría darle un trabajo mas decente, una mujer como ella no se merece una trabajo así.
Luego de desayunar, fui a tomar mi mochila ya que hoy empezaba las clases en el insti y como todos los años tenía que elegir una ''víctima'' de burlas y golpes.
Mientras iba caminando miraba a las personas que se levantaban temprano para trabajar o ir a los demás colegios.
Llegue a la entrada del instituto solo para encontrarme con un tonto en el medio de esta bloqueando el camino, no lo podía ver de frente ya que estaba de espaldas, pero era un poco mas bajo que yo.
-quítate del camino, idiota- dije empujándolo para ir a mi grupo que estaba un poco mas apartado de la entrada.
-hombre, vegettita- dijo Frank, era un chico pelinegro con una risa particularmente extraña a la vez que contagiosa.
-vegetoide, tanto tiempo- dijo luzu, era uno de los de último año y en mi opinión el que tenía mayor cordura del grupo, lo consideraba como el hermano que nunca tuve junto con Frank.
-Hola, chicos, que gusto verlo otra vez- dije dándoles un a brazo.
-como fueron sus vacaciones?- nos pregunto Frank a Luzu y a mi.
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Escucha tu Destino - WIGETTA
FanfictionGuillermo Diaz, con 17 años es guitarrista y cantante aunque es tímido y reservado... su estadía en el nuevo instituto se vera visiblemente perturbada por Samuel de Luque de 18 años, un arrogante y adinerado chico con gusto por molestar a los demás...