Capitulo 26

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Narra Samuel:

...
Luego de unos minutos más la puerta se abrió.

Oh no... Estamos en graves problemas.

Observamos la puerta expectantes de quien podría ser. Vimos una figura grande y musculosa, incluso más grande que yo, llevaba un uniforme de seguridad.

-Ey!  Que hacen aquí? -nos gritó cuando nos vió. - Vengan acá. - corrió hacia nosotros para atraparnos.

-Hora de irnos! - le grité a Guille, tomé su mano, esquivamos al segurata y salimos corriendo. Corrimos por entre los bailarines y músicos, algunos nos miraban raro y otro solo se reían, Guillermo me seguía agitado, miré hacía atrás y le habíamos sacado distancia, distinguí una puerta de salida de emergencia, corrimos hasta allí, jalé la palanca, abrí la puerta y mientras sonaba la alarma anti-incendios, corrimos hacia el auto.

Entramos rápido al coche y miré por el retrovisor para ver si lo habíamos perdido, esperé unos minutos para ver si aparecía pero jamas apareció.
Suspiré, observé a Guille que estaba mirando hacia delante agitado y me empecé a reír. Guillermo me observó sorprendido.

-De que mierda te ríes? -dijo gritándome. - Eres idiota a caso? - dijo rojo de furia.

-Ey tranquilo... - dije tratando de relajarme.- Ya pasó. - le dije mientras tomaba el volante. Giré mi rostro y ví que estaba cruzado de brazos mirando por la ventana. -Mírame... -le dije en tono suave e hizo lo que le pedí. -Lo siento ok? No creí que pasaría eso y se que te dije que no nos meteríamos en problemas pero... Acepta que jamás en tu miserable vida te pasó esto y que te haz divertido si? -le dije sonriendo y mirándolo a los ojos. El lo pensó un poco y sonrió.

-Esta bien... Fue divertido. -dijo riéndose. Yo me reí con él. -Viste las caras de los bailarines?- dijo riendo.

-Lo se. - estallamos a carcajadas. Terminé de reír antes que él, lo observé reírse, sus ojos se volvían pequeños y su sonrojo lo hacía verse tierno, sus labios se arqueaban al reírse y a cada lado se formaban sutiles hoyuelos que lo volvían aún mas guapo.
¿Vieron cuando estás con una persona especial para tí pero que ni siquiera lo sabes, la oyes reír o hablar o incluso cuando está comiendo y te detienes a pensar "Joder, que suerte que tengo de tenerte a mi lado"? Eso era lo que yo pensaba en ese momento, me Sonreí a mi mismo al darme cuenta de lo que realmente me pasaba y encendí el coche y nos fuimos a su casa.

...

Ya era tarde, aparqué frente a la entrada y bajamos.

Narra Guillermo:

Bajamos de auto, aún riéndonos de la escena digna de una película de comedia que ocurrió anteriormente.
Llegué a la puerta y saqué las llaves del bolsillo.

-Bueno... La pasé realmente bien hoy Sam. - sentía que mis mejillas estaban sonrojadas a mas no poder.

-Lo mismo digo. -dijo sonriéndome dulcemente. -Hay que repetirlo. -dijo riendo.

-Ja.-me reí. -en tus sueños. -le dije riendo. Quería alargar la conversación, no quería que se fuera tan pronto.

-Si. -dijo riéndose. -con la cara que haz puesto dudo que volvamos a hacerlo. -dijo burlándose de mí.

Me reí pero cuando caí en que se estaba burlando de mí, lo miré mal...

Y ahí fue cuando pasó... Miles de sensaciones se empezaron a mezclar dentro de mí, no reaccionaba y no captaba lo que estaba pasando. Mi corazón estaba a mil por hora, podía sentirlo, mi mente había volado muy lejos de la realidad.

Samuel me estaba besando. Con una mano tomando mi cuello y otra mi cintura, sentía su boca besarme con desesperación, como si hubiera estado esperando este momento desde hace mucho, cerré mis ojos y me dejé llevar. Mis brazos abrazaron su cuello, acariciando suavemente su cabello, la mano que estaba en mi cintura me acercó más a él si eso era posible y le correspondí el beso. Sentí como sonrió sobre mis labios y supuse que lo necesitaba tanto como yo. Su beso era salvaje pero a su vez también era tierno.

Nos quedamos sin aliento y nos separamos, pero en ningún momento dejamos de abrazarnos, él me sonrió y apoyó su frente contra la mía, su respiración era agitada al igual que la mía, tenía calor y aún sentía sus labios sobre los míos.

-Debo irme... -me susurró sin apartarse. Yo suspiré.

-Vale... -dije algo triste.

-Tranquilo, mañana nos veremos. - me dió un pequeño beso y se separó, me sonrió y fue hasta su auto, antes de subir me guiñó un ojo que me hizo sonrojar mas de lo que ya estaba y luego se fue.

Sin creérmelo aún, entré a mi hogar, subí las escaleras y fuí hasta mi habitación. Me cambié y me acosté con una sonrisa que jamás imaginé tener, aun sentía esa sensación en mis labios, ese cosquilleo y sentía todo un zoológico en mi estómago.
Poco a poco me fuí durmiendo y pensando, aún, si todo lo que pasó minutos atrás fue real.

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Bueeeno ya se que es corto pero yo creo lo valió :3

Se que estan pasando muchas cosas últimamente con Willy y la novia y no se q otras boberias más pero esto es un shipp, una pareja creada por el fandom de Willy y Vegetta... De dos personas, ni de 3, ni de 4.

Espero q le haya gustado

Besos :3


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