Escucha tu Destino - WIGETTA

Capitulo 19

Narra Guillermo

Por segunda vez entré al hogar de Samuel, impecable como siempre.
Miré todo a mi alrededor para ver si algo había cambiado pero todo seguía igual.

-No te quedes ahí parado, siéntate. - dijo Samuel señalando su sofá de cuero negro.- Quieres algo de tomar?  O algo de comer? - dijo él.

-No gracias, estoy bien. - Sonreí.

-Bien... Iré a cambiarme de ropa y empezamos, tu ve preparando la guitarra. -dijo mientras subía las escaleras.

-Esta bien. -lo observé subir hasta que escuche una puerta cerrarse. La casa se quedó en silencio, me levanté y fui por el estuche de mi vieja guitarra, la saqué, la afiné y me senté nuevamente en el sofa, la verdad no había mucha ciencia en afinar una guitarra, con la tecnología que hay ahora afinarla solo se tarda unos minutos.
Pasó el tiempo y Samuel no bajaba, incluso llegué a pensar en subir y buscarlo yo, pero eso sería muy descortés de mi parte, tomé la decisión de quedarme un rato más y esperar... Los minutos pasaban y pasaban, me harté de esperar y tomé la opción número dos, subir para ver que pasaba y por que se tarda tanto.
Subí las escaleras en silencio y al llegar arriba se veía un pasillo con dos puertas de cada lado y a lo último se veía una amplia ventana, de ella entraban los rayos del sol tenuemente.
Empecé a caminar lentamente por el pasillo, empecé a oír la voz de Samuel pero no le entendí, me acerqué a la puerta donde se le oía hablar, me paré frente a ella y apoyé mi oído para escuchar.

-Escúchame Luzu, en este momento estoy ocupado y me molestas. - por unos segundos hubo silencio. - No estoy loco por él, ni siquiera me gusta, entiéndelo. - su voz se escuchaba dura y fría. - Asi que si no te molesta déjame cambiarme tranquilo.- se escuchó un suspiro y un leve golpe en alguna superficie.
Me despegué de la puerta y volví por donde había ido.
De que estaba hablando? Por que se oía tan enojado? De quien hablaba Luzu? Me senté en el sofá nuevamente pensando distintas realidades de lo que había escuchado minutos atrás.
Samuel... Que tan complicado puede ser este chico? Tengo curiosidad, demasiada si puedo decir.
Quiero saber más de él, como es verdaderamente, quien es él en realidad...

-Todo está bien? - se escuchó su voz detrás mío. Claro que pregunta eso, seguramente estabas pensando en todo esto con una cara de empane mental que no puedes con ella, pensé.

-Si... Si claro, estoy bien... Solo un poco disperso supongo. - le sonreí. -Empezamos? - dije acomodándome con la guitarra.

-Claro... Pero que tocamos?  No conocemos lo que toca el otro. - dijo Samuel sentándose en el banquito en frente del piano.

-Claro, tienes razón... - se puso a pensar... El es un chico y yo también... Sorpresa sorpresa... A ver, en algo tenemos que coincidir respecto a gustos... Bandas? Cantantes?  Comidas? Un minuto... Lo tengo- Conoces el tema Payphone? De Maroon 5?-

-Claro, buena idea... - Observé a Samuel apoyar con gracias las manos sobre las teclas y suspiró... Y se quedó mirando las teclas, por su rostro pude deducir que le tenía miedo a algo... Pero a que?

-Samuel... Escuhame... -dije en un tono suave, el me miró diferente, se veía casi frágil... -No tengo ni la mas mínima idea de que pudo haber pasado para que dejaras de tocar pero... Tienes que saber que si no quieres hacerlo, estaré de acuerdo con tu desición y... Espero que algún día puedas decirme que fue lo que pasó. - lo miré comprensivo y esperé su respuesta.

-No...- dijo en tono suave y tranquilo. - Te dije que lo haría y lo haré. -me sonrió y empezó a tocar.

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Empezó suave mientras yo lo seguía con la guitarra, cada tanto subía la mirada para observarlo, como sus manos tocaban con maestría las teclas, sus ojos cerrados y sus expresiones que delataban el amor con la música. No eran notas tocadas por una guitarra y por separado, las notas de un piano, no, era música, musica de verdad, lo que pueden hacer dos instrumentos juntos y no por separados, hablando desde el punto egoísta claro.
Levanté mi mirada una vez mas y él abrió los ojos y me dedicó una sonrisa... Pero era diferente, era sincera y brillante... Ya lo entendía, con la música Samuel podía ser quien era en realidad, sin preocupaciones, ni prejuicios, solo es... Solo es Samuel, nada más. A pesar de todo, a pesar de sus problemas, a través su música fluía absolutamente todo y era una maravilla escucharla.
Cuando terminamos de tocar, nos quedamos en silencio hasta que él decidió hablar.

-Eso fue... Increíble...- dijo mirando sus manos.

-Sabia que podrías hacerlo. - dije levantándome del sofá y posicionándome a su lado. - Fue genial. - le dije sincero.

-Gracias, Guillermo... Por todo... - dijo nervioso?.

-No fue nada y... Llámame Guille. - le Sonreí y fui de vuelta a guardar mi guitarra. -Creo que tengo que irme, es tarde. -tomé mi estuche y mi mochila y me giré para observarlo. Se levantó de su banquito y me llevó hasta la puerta de entrada.

-Pues... Em... Nos vemos mañana, supongo. - dijo Samuel con una mano en su nunca.

-Si... Supongo... Em... Adios. - me acerqué para saludarlo pero el había estirado su mano para darmela, quedó una situación bastante incomoda, me alejé, le dí la mano y salí por la puerta, me giré y le dije "Adios" nuevamente, me respondió y cerró la puerta lentamente. Cuando la cerró totalmente, me giré y sonreí negando con la cabeza, acomodé mi mochila y fui directamente a mi hogar.

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Holaaaaa *-* siii ya se... Estuve desaparecida no, lo siguiente jaja
Pero bueno, mejor tarde que...*le tiran piedras*
También tengo otra historia que quiero empezar, no la voy a subir por ahora por que es solo un proyecto pero es para que esten atentos.
Nos leemos luego chiquis :3 💜💚