31. Epílogo

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Jerichó tenía claro dos cosas en esta vida.
La primera que un macho tiene que hacer lo que tiene que hacer.
La segunda que el tiempo de gracia o de descanso era una tortura .
Una tortura muy muy cruel.
Todo comenzó al llevar a su hembra a casa después de que el padre de ella les casara.
Que uno podría decir que era un deber constitucional tener sexo en tu noche de bodas.
Lo había preparado todo.
Una preciosa casa en la zona humana de la reserva, cerca de la casa de su amiga Anne.
Cambiado sus lugares de trabajo y residencia.
Preparado la casa lo mejor posible y traído además flores que había puesto en todas las habitaciones.
Por si fuera poco la cama, que sería la cama de ambos, con sábanas limpias, perfumadas y listas para una noche de placer conyugal.
Incluso la cogió en brazos al cruzar el umbral!!!

Y que había conseguido? Un dolor de huevos impresionante.
No podía tener sexo con su muy deseable y sexy esposa hasta que la doctora Gregor le diera el visto bueno.

Jerichó casi odiaba a esa doctora humana.
Todos los dias la llamaba para preguntar si podía o no y su respuesta era siempre la misma.
Todavía No.
La doctora ya no le cogía las llamadas y en su contestador automatico
Estas llamando a la doctora Gregor,  deja tu nombre y telefono que en cuanto  pueda te devolvere la llamada. Si eres Jerichó la respuesta es NO!
Que humana tan exagerada. Sólo la había llamado unas... 15 veces.

En el tiempo que llevaba casado también había aprendido otras muchas cosas.
Por ejemplo que a las hembras humanas  ( al menos a la suya) no le gustaba que entrara en el baño sin llamar y mucho menos que quisiera charlar mientras ella se afeitaba las piernas.
Que raras son las humanas.
Aunque debía a dimitir que la sorpresa más grande que llevó, fue la primera vez que le tocó cambiar el pañal de la pequeña.
Como la niña había sido capaz de convertir la dulce leche de su compañera en ESO!!! era algo que le tenía totalmente desconcertado .

Ohhh. Pero hoy era el día. Hoy su compañera tenía una revisión de rutina y si todo iba conforme lo previsto... le encantaba las mamadas, de verdad que si.
E incluso era capaz de producir increíbles orgasmos en su hembra sin tocarle la entrepierna  ( todo un campeón se sintió la primera vez), lo que realmente ansiaba era follar su dulce y delicioso coño.
Lo tenía todo planeado.
Debió de tener cara que se comió al canario porque Mary lo expulsó de la sala de espera, le dijo que se fuera a pasear que cuando acabara ya le llamaría .
No insistió mucho en quedarse. No es que disfrutará mucho de ver a su mujer despatarrada para cualquiera que no fuera él. Aunque fuera otra hembra.

Cogió a su dulce Hope e inició un paseo por la parte más concurrida de la reserva.
No le gustaba estar rodeado de mucha gente,  pero entendía la necesidad de que  la joven viera desde niña como humanos y especies se podían relacionar sin problemas.

- ehh Jerichó!  Espera. - Jerichó se dio la vuelta y vio a Mac. El humano del equipo de rescate. - esa es la pequeña Hope?

Y Jerichó se sorprendió haciendo algo que nunca había hecho hasta entonces. Entregar a su bebé a un macho humano, para que  lo acunara.  Se sintió extraño por ello, pero la verdad es que se sentía en deuda con aquel humano en particular.
Fue el humano quiíen les informó gracias a un amigo dentro de la policía de Utah que la policía humana tenía intención de ir a detenerle por la agresión al secuestrador. 
También fue el humano quien al parecer lo había puesto en contacto con la detective privada que descubrió al agresor de su hembra y donde la tenían secuestrada.
Eso lo supo por la detective, no por el mismo.
Y por último y no por ello menos importante, ese humano se quedó todo el tiempo que el estuvo encerado ,cuidando de su hembra.

Sólo por eso se merecía coger en brazos a su pequeña. Eso sí, si se atrevía al menos a respirar mal en su dirección Jerichó le haría papilla.

- Voy de camino al gimnasio. Porque no te vienes? Hoy enseñaré a pelear con espadas. Más que nada por entretenimiento. Pero nunca se sabe.

- Porque no?

Ya en el gimnasio se divertido viendo como Mac tiraba de culo uno tras otro a sus rivales.
El humano sabía manejar la espada como un guerrero de esos de antes. Jerichó no pudo evitar que creciera su admiración por el.
De lo que no se dio cuenta es que no era el único que miraba embelesado al humano.
Cuando quedó claro  que los especies no eran rivales para él . Llegó Trey y la lucha entonces si que fue igualada.
Siguieron luchando por diez minutos más hasta que tal vez por cansancio o tal vez por un dispiste Mac tropezó y Trey sin piedad ( tal y como llevaban haciendo años)  No detuvo el ataque. En un instante estaba a punto de alzarse como ganador y al siguiente había salido volando por los aires. Ahora Harley se interponia entre los dos combatientes y gruñia ferozmente a Trey.

-No voy a permitir que le hagas daño! MÍO!

....................... ............
Debido a la llamada de Mary al teléfono Jerichó no pudo quedarse a ver el final de la escena.
Aunque no pintaba bien para Harley, después de todo el humano Mac se levantó del suelo y le dio un potente derechazo.
Como dirían los humanos ahí hay gato encerrado  .

Pero como a Jerichó lo que realmente me importaba era su compañera...
Al llegar a su casa por la puerta salía Anne.

- Pero donde está mi ahijada preferida??? Ven con tu madrinita que nos vamos a ver al tío Ven. - y cogiendo el carrito de manos de Ven enfiló el camino entre sus casas.

- Espera!  Que pasa?- preguntó ven sorprendido.

- Entra ya que  Mary te está esperando. Tengo una  toma de leche en casa, así que tenéis cuatro horas- dijo sonriendo.

En cuanto la puerta se hubo cerrado tras su espalda.  Mary  se abalanzó sobre Jerichó  como un animal hambriento.
Lo besó largamente, hundiéndole la lengua, llenándole la boca de su sabor.
EL le arrancó la ropa con manos impacientes y, en cuestión de segundos, ambos estaban desnudos. La levantó en brazos y subió las escaleras rumbo a su dormitorio en tiempo récord.
Ya allí y sin molestarse en tumbarla en la cama.
Metió dos dedos en su húmedo calor y se metió uno de los pezones en la boca, jugueteando con la lengua hasta endurecerlo.
Mary le rodeó la cintura con las piernas y se aferró a él con todas sus fuerzas.
Jericho movió la cabeza de los pezones al pecho y cuello para, finalmente, llegar a su boca.
La besó como si no fuera a soltarla nunca más, como si fuera la primera o última vez para los dos.
Le abrió las piernas y se puso entre ellas, penetrando con fuerza por su húmedo agujero de placer.
Mary jadeó y abrió más las piernas, dejando que la penetrara más y más dentro.
Jerichó  levantó las manos para juguetear con los pezones de ella, pinzándolos y frotándolos a más no poder. pequeñas gotas de leche salían de ello.
Se agarró a sus pechos mientras se mecía dentro de ella, llenándola más y más con el grueso y pesado peso de su pene.
Mary se abrió paso hasta el coño, acariciándose el clítoris con los dedos, frotándoselo hasta quedarse sin aliento. Jericho empujó con fuerza y salvajemente dentro de ella.
Mary gritó. Jerichó  gruñó.
Cayeron juntos en la cama.
Se corrieron juntos, gimiendo y jadeando, aferrados el uno al otro.

—Te quiero, Jerichó  —dijo.
—Yo también, Mary. Siempre te querré. .
..................

Bueno chic@s espero ya hayáis disfrutando leyendo a Jerichó  (#3) tanto como yo escribiendolo. Admito que ese macho terco me ha dado más de un dolor de cabeza así que me alegro que haya tenido su final feliz.

Para los que no se hayan dado cuenta ( aunque creo que es imposible que alguien no lo haya hecho ) la siguiente historia será la de Harley (#4) .
Y nuestro coprotagonista será Mac . Lo siento para las que querían a Iker ( es un encanto, pero no es mío) espero que aún así podrais tener cariño por él .
Y tener paciencia conmigo, nunca he escrito sobre parejas del mismo sexo así que espero hacerlo bien. Deseadme suerte!!!

Muchos besos chic@s y nos vemos en Harley (#4).

 

Jerichó (#3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora