Jerichó (#3)

15. Culpable

Al parecer a los  humanos  no les hacía mucha gracia eso de que se ocupara Jerichó de imponerles el castigo y ambos estuvieron más que "encantados" de ir a la cárcel. 
Ya en comisaría Harley y Jerichó y el equipo de seguridad humano que les acompañaba, tuvieron que esperar mientras los detectives encargados de la investigación de la agresión a Mary interrogarán a los dos sospechosos. 
Así los llamaron,  sospechosos, al parecer una confección no era suficiente para satisfacerlos.
Tuvieron que esperar durante tres horas,  pero finalmente la espera valió la pena cuando vieron entrar esposados tanto el ex prometido de Mary como a su amante. 
Y poco después de entrar en una sala aparte permitieron salir a uno de ellos.

Jerichó mientras veía a uno de los humano salir por la puerta de la sala de reconocimiento con otros cuatro machos humanos  y tuvo que admitir que en el fondo esperaba que el culpable de la agresión a su hembra fuera su antiguo prometido. Eso les ahorraría muchos problemas de cara al futuro con el bebé. Pero sabía que era egoísta pensar así.

El humano al contrario que todos los demás participantes en la rueda de conocimiento no se marchó, sino que se dirigió al banco donde estaban ellos sentados .
Tanto Harley como Jerichó se esperaban que el humano se enfrentarán a ellos, pero eso no pasó. Sino que sólo se sentó sin ni siquiera dedicarles una mirada. Eso era raro, incluso si no existiera toda la situación, la mayoría de  las personas no estaban acostumbradas a ver especies cara a cara.

Jerichó estaba por decirle algo al humano cuando el teléfono de él empezó a sonar.

Este tardó varios tonos en ser consiente del sonido y atender la llamada telefónica.

-Hola?

-Max? Soy Mary. - al escuchar la voz de Mary tanto Jerichó como Harley entraron en tensión e empezaron a prestar atención a la conversación telefónica. - tenemos que hablar.

- Estoy en comisaría. He participado en una rueda de reconocimiento. Soy sospechoso de tu agresión.

-Siento que estés pasando por eso. Se que  tu no has tenido nada que ver.  - el humano pareció sorprendido por la afirmación.

- De verdad? Como lo sabes? No me he portado bien contigo. Te he amenazado. Y hecho daño.

- Me estás diciendo que has tenido algo que ver con mi agresión?

-Si. Yo soy el culpable. Yo...- no pudo seguir hablando porque al instante de oír sus palabras Jerichó lo atacó . Y perdiendo el control estuvo a pocos  centímetros  de agarrar al humano e intentar matarlo, suerte que tanto Harley como dos de los miembros del equipo humano lo sujetaron . Poco después estaban rodeados de policías apuntándoles con sus armas.

El humano desprendía tal olor a miedo, que incluso Jerichó ,que no contaba con el olfato tan agudo como un canino o un felino ,lo sintió. Bien.

-Que diablos está pasando aquí? - un alto hombre vestido de traje se posicionó delante de Jerichó- Permití vuestra presencia aquí porque me habéis traído a dos sospechosos, pero esta es mi comisaría y si no pueden controlarse les meto en una celda por alteración al orden público y ya se puede meter su inmunidad diplomática por donde no brilla el sol.

- Spinelli siento la situación. - Marc que estaba allí formando parte del equipo humano intercedió por ellos. - hay algún sitio más privado donde todos podamos hablar tranquilamente?

- Marc... porque eres tú.

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Jerichó sentado en un lado de la mesa miraba  al hombre sentado al otro lado de esta.
Pensar que estuvo a punto de matarlo. Pero es que cuando escuchó que el admitía tener algo que ver con la agresión perdió totalmente el control. El humano se explicó al capitán Spinneli y a Marc, él no había contratado a nadie para agredirla, pero al parecer quien lo hizo fue su amante y por ello se sentía culpable.

Cuando se enteró de que Jerichó era la nueva pareja de Mary pareció respirar aliviado, y accedió a acompañarlo a la reserva para hablar con Mary.
Todo el asunto debía resolverse lo antes posible. Y dejar todo atrás.

Antes de irse, ambos hombres insistieron en quedarse hasta el final del interrogatorio del amante.
Interiormente Jerichó fantaseó con que el humano negara ser el autor intelectual del delito y así que le liberarán. 

De esta forma él se ocuparía personalmente de instaurar justicia. 

Fantaseó con ser juez, jurado y verdugo. 

Pero no obtuvo satisfacción. 

El humano se derrumbó y admitió haber contratado a los dos matones.
Estaba enfadado con ella porque Max acabó con su relación y le dijo que iba a arreglar toda la situación con Mary, que era su obligación porque  estaba embarazada.

Celos.
El humano casi hace que la maten por celos.
No le importó que estuviera embarazada.
Todo lo que  quería era quitársela de en medio.
Jerichó sintió deseos de devolverle el mismo sufrimiento. Destrozarle a golpes y no tener compasión.
No pudo hacerlo. Tendría que conformarse con que estuviera enjaulado toda su vida, Jerichó sabía que eso es peor que  la muerte.

El humano Max lloró con la confesión. Y Jerichó se encontró sintiendo pena por él, pero a la vez también sintiéndose reivindicado en nombre de Mary. 

Esta vez le tocaba llorar al humano.
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