Entre Tú y Yo

Treinta y cuatro

#EntreTuyYo

#Maraton2/4

Ethan

Me encontraba en la cafetería que estaba cerca a mi casa, estaba muy nervioso, me sudaban las manos y no podía dejar de mover mi pierna izquierda. Estaba esperando a Vanessa, había llevado a Dani al Instituto en la mañana y le dije a Lily que iniciara la investigación sin mi, que llegaría más tarde.

Me cito a las diez de la mañana y ya había pasado media hora, 30 minutos de espera, 1800 segundos con una intriga tan grande que me dificultaba respirar. Hasta que la vi entrar por la puerta principal, entonces sí deje de respirar. Siempre le gustaron los vestidos y esa vez llevaba uno de flores, azul con rosa.

-hola -su voz era tan suave, como sino quisiera lastimar a nadie, yo solo pude asentir y ella se sentó justo enfrente mío.

-hola... ¿Quieres... quieres pedir algo?

-no, nada... solo quería hablar contigo -era tan incomodo estar a su lado luego de todo -perdona si te incomode con mi llamada... pero necesito tu ayuda.

-no me incomodas ¿Que necesitas? -entonces sonó mi celular, mire la pantalla y era Dani -mm, espera -le dije a Vanessa y conteste.

-hola -me dijo.

-hola.

-¿Estas ocupado?

-¿Qué pasó? -pregunté ya más preocupado.

-oh no, nada, solo... me cancelaron una clase y pues no sabía qué más hacer, los chicos están entrenando y Noah está con Scarlett... ¿Te molesto? -sonreí.

-por supuesto que no, nunca me molestas... pero ahora estoy en algo y...

-oh, entiendo, no te preocupes -rió nerviosa -lo siento.

-Amor, no pasa nada, me gusta que me extrañes.

-aun no me acostumbro a eso y eres un egocéntrico.

-¿A que? -me di cuenta que Vanessa no dejaba de mirarme.

-a que me digas amor -y estoy seguro que mi sonrisa no pudo ser más obvia, Dani siempre me hacia poner así, siempre... como un idiota enamorado -suerte con lo que tengas que hacer, iré a la biblioteca a leer un rato... cuando te desocupes hablamos... te quiero.

-yo mas -ella rió.

-ay no, ya va a empezar -yo reí.

-cuidate.

-tu igual... amor -y colgó, ni me dejo responderle. Pude imaginármela con la cara roja como un tomate, mientras llevaba una mano a su boca y sonreía.

Mire el teléfono y le sonreí como si ella pudiera verme, sí, un completo idiota.

-wow -Vanessa llamo mi atención -¿Quien lo diría? Te has enamorado -me tense.

-bueno yo...

-es muy evidente...me alegro por ti -aclare la garganta.

-si, ah... gracias... ¿Qué es lo que necesitas?

-es que, tengo un problema y necesito un abogado...

-bueno, yo no soy abogado aun, Vanessa... tal vez pueda recomendarte algunos y...

-oh, entiendo... es que, yo quería que tu me ayudaras. Es un asunto familiar y...

-¿Qué pasó?