Harry's dirty (One shots) TERMINADA

Just call me Daddy.

I parte.

- Colócate bien la falda, no queremos causar mala impresión. - Dice mi madre por cuarta vez, se supone que hoy iba a venir a cenar el jefe de mí padre, y como buena hija, o al menos pretendía serlo, tenía que estar.

No quiero estar sentada escuchando como mi padre y su viejo jefe hablando sobre costes y mierdas de esas de las cuales trabajan.

Oigo un suspiro de mi padre cuando oímos el timbre, él me mira y yo alzo una ceja mirándole cruzándome de brazos. ¿Acaso piensa que yo iré a abrir?

- Sheila, ve a abrir ya. - Yo ruedo los ojos y a paso lento me dirijo hacia la puerta, ¿Es que no podían hacerlo ellos? Abro la puerta una vez llego a ésta y me sorprendo por lo que tengo delante de mí.

Cualquiera hubiera pensado que fuera un hombre de cincuenta años, gordo y calvo, pero no, lo que tenía frente a mí era lo más parecido a un Dios griego. ¿Cómo podía ser tan guapo y malditamente caliente? Su pelo rizado cayendo por encima de sus hombros, su mandíbula bien marcada, una camisa desabrochada a mitad de su pecho dejando mostrar algo de el, creo que no debería seguir bajando porque me encontraría con su gran... Esta bien Sheila, actúa de una vez y no parezcas una retrasada embobada que aún no ha dicho nada.

- Hola... - Es lo único que alcanzo a decir y él tan solo sonríe mostrando sus hoyuelos lo que hace que casi me desmaye, era tan solo verlo y ya podía mojar mis bragas. Me hago a un lado dejándolo pasar y él se dirige hacia mis padres.

Cierro la puerta y me acerco a ellos, poniéndome en medio de mis padres.

- Es un placer conocerle señor Styles. - Dice mi madre, Styles...

- Oh, por favor, solo llámame Harry. - A pesar de que su apellido me gustaba, su nombre mucho más, ya estoy pensando en como sería gemir su nombre mientras el comía todo mi... Ya está bien Sheila, deja de pensar en estas cosas.

- Mi mujer, Diana y mi hija Sheila. - Puedo jurar que cuando mi padre pronuncia mi nombre, él relame sus labios pasando su vista por todo mi cuerpo.

- Es todo un placer conocerle Sheila. - Su voz era tan sexy, tan ronca y grave. Mi madre me da un leve codazo para que yo haga o diga algo.

- Si...Yo también, supongo. - Mis padres ruedan los ojos y oigo la risa de Harry.

- Mejor pasemos a cenar. - Dice mi padre, todos asentimos y nos dirigimos a la mesa. Me siento en está y Harry lo hace a mi lado mientras que mis padres lo hacen frente a nosotros.

Ya estaba bastante nerviosa, como para tener que estar cerca de él ahora. Mi madre sirve la cena y todos comenzamos a cenar. Como había supuesto, mi padre y Harry empiezan a hablar sobre cosas que no entiendo nada, y al parecer mi madre tampoco.

Parecía como si estuvieran hablando en chino. Entre tanto, mientras ellos hablan, noto una mano por encima de mi pierna, no hay nadie más a mi lado, solo Harry, y mi mano no es la que está puesta ahí.

Miro la mano de Harry puesta sobre mi rodilla y luego lo miro a él, mientras deja escapar una sonrisa leve. Muerdo mi labio inferior cuando comienza a subir su mano, ¿Por qué estaba haciendo esto? No me conoce de nada y ya me está poniendo la mano encima, estaba muy segura, de que yo no le haría parar.

Su mano sube y sube cada vez más, hasta meterse por debajo de mi falda, por primera vez, estoy agradecida de que mi madre me haya convencido en ponerme falda. Acaricia mi muslo interior varias veces antes de poner su mano por encima de mis bragas y comenzar a acariciar lentamente.