cap 23

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-¿¡a que demonios te refieres?!-siwon luchaba por quitarle de las manos el cuerpo de shindong a heechul quien había enloquecido y ahora estaba estrangulandolo, vaya que el pelinegro tenía​ bastante fuerza.

-por favor tranquilízate cariño-repetía siwon una y otra ves pero heechul parecía no escucharlo-por favor el no tiene la culpa.

-¿¡QUE NO LA TIENE?!! EL ES PARTE DE TODO ESTO-shindong logro escapar de sus manos pero ahora estaban en una batalla de captura, shindong lo esquivaba detrás de su escritorio y siwon sostenía de la cintura a heechul, era una escena un poco graciosa por así decirlo.

Por otro lado yo me quede viendo hacia la nada, ignorando lo que estaba pasando a mi al rededor, solo tenía en mente las palabras anteriormente pronunciadas por shindong, entonces significa que no importa lo que haga no podré escapar nunca de yesung, por que con solo apretar un botón el me convertira en un cuerpo sin mente que solo lo obedecera, es tonto creer que existe una escapatoria pero no puedo seguir viviendo en un mundo en el que estoy enamorado pero no puedo estarlo , simplemente por que no soy para el.

Aun así, deseo luchar, quiero decirle que lo amo que desde el momento en que lo vi senti esto y que nada ni siquiera un botón me hara olvidarlo, por que yo amo a kyuhyun, lo amo.

-bueno tranquilos tal ves sea necesario que hablemos con la omma de ryeowook-dijo shindong e inmediatamente capto mi atención, ¿vería de nuevo a mi omma?

-¿que diablos tiene que ver la madre de ryeowook en esto?-dijo heechul ¿que no se cansa de andar maldiciendo?

-pues simple, ella nos dirá cuales fueron sus motivos para no decirle a ryeowook cual era su propósito en este mundo, ¿por que no hizo lo que se le ordeno?-

-en eso tienes razón, ella debió tener un motivo para nunca decirle o hablarle a ryeowook sobre su dueño-dijo siwon.

-bien vengan conmigo-

Salimos de la oficina y comenzamos a caminar por un largo pasillo que me recordaba las veces que mi omma me acompañaba al jardín o cuando me escapae y me encontré con aquella niña, tambien como a veces en las noche ella venia y me contaba un cuento para quedarme dormido, se que las condiciones no fueron las mejores pero por lo menos puedo decir que tuve una infancia feliz.

Las puertas eran infinitas pero y reconocería la mía pues tenía unos números que siempre acostumbraba a ver, 027.

Nunca logré comprender por que esos números pero ahora creo que ese es mi nombre, el que se me dio cuando fui credo.

El resplandor de aquellos números me hizo comprender que ya habiamos llegado, mis nervios estaban al máximo, y no podía creer que estaba a punto de ver a aquella mujer.

Las puertas se abrieron y lo primero que vi fue como mi omma cargaba en brazos un pequeño bebe, al mismo que tenía el día en me fui del instituto, no se inmutó en voltear, yo solo camine hacia ella para tocar su hombro y llamar su atención.

-¿omma?-de pronto reconoció mi vos y volteo a verme un poco sorprendida pero su mirada tambien demostraba una inmensa alegria por verme.

-ryeowook,mi niño-con un brazo me abrazo mientras que con el otro seguia cargando al pequeño.

-omma te extrañe mucho-dije mientras algunas lágrimas se escapaban de mis ojos.

-ryeowook ¿que estas haciendo aqui?-pregunto y fue cuando​ shindong comenzó a hablar.

-para empezar puedes decirme ¿por que no le dijiste a este ser que era una persona? ¿te das cuenta del daño que causaste y que estas causando?-

Mi madre no dijo nada solo me sonrió y después se sentó en la orilla de la cama.

HECHO PARA MIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora