Troublemaker

Capítulo 17:Citas y veneno

Me deslizo por las escaleras,con el Teniente Mur a mi espalda,corriendo como locos por las salas.Cuando llegué a la azotea,tan solo hablamos,traté de ser sexy y seductora,aunque me acabó sacando mis mejores sonrisas,las mejores risas,fui yo misma por un tiempo.No trató de besarme,ni de tocarme,tan solo de hablarme y yo no intenté sonsacarle cosas sobre Maine,fue como si ya nos conociésemos de antes.Ahora corremos porque queríamos hacer algo divertido y correr por las salas haciendo el gamberro es sin duda algo genial.Pasamos por una sala corriendo cuando me coge de la mano alocadamente y la aprieta.Llegamos a la sala principal.

-No podemos salir...-digo mirando al exterior.

-Sí,podemos.-me dice con una sonrisa.

Él sale al exterior,pero yo me quedo dentro.Vuelve a entrar y se acerca a mí,me besa.Me besa dulcemente en los labios,y cuando me separo de él,me sorprendo de que no siento nada,no las mariposas que sentía con Jack,tan solo un beso agradable,pero sin sentimientos.Sonrío y cuando coge mi mano,esta vez sí que voy con él.Nos adentramos en la calle,sintiendo el viento y la libertad en mi rostro.Por una vez en mucho tiempo,soy feliz.Llevo un vestido negro que me cubre hasta las rodillas,se ajusta en la cintura pero es suelto,acompañado de unas manoletinas y una chaqueta fina a juego.Llegamos hasta un parque y nos sentamos en el banco,cansados de correr,aunque a mí no me importaría seguir haciéndolo.Nos quedamos un rato sentados,sin decir nada,tan solo recuperando el aliento.

-Hacía mucho que no me sentía tan bien.-digo más bien a mí misma.

Él sonríe.

-Creo que coincido contigo,está bien pasarlo genial de vez en cuando.-contesta.

Le miro de reojo.

-¿Cómo te llamas?-pregunto esta vez mirándolo a los ojos.

Él se ríe y niega con la cabeza.

-Es un secreto,supongo.-responde mirándome a los ojos.

-¿Tan feo es que no quieres decírmelo?-pregunto sonriente.-Vamos,no se lo diré a nadie.Es más,te cambio tu nombre por un secreto mío.

Él piensa la pregunta,con tentación.

-Está bien,pero esto es un secreto.Si lo cuentas te cortaré el cuello.-dice mientras hace un gesto con su cuello.-Mi nombre es Paul,Paul Mur.

Me río a carcajadas.

-¿Y tanto revuelo por un simple Paul?-pregunto a punto de estallar.

De repente,su suemblante se vuelve serio,así que paro de reír.

-¿Ocurre algo?-pregunto ya serenada.

Él niega con la cabeza.

-Venga,cuéntamelo.-digo con voz infantil.

-Todavía me debes un secreto.-responde arqueando una ceja.

-Vale,nuevo trato,o me dices que ocurre o no hay secreto.-le digo juguetona.

-De acuerdo,solo te lo cuento porque a lo mejor me hace bien decirlo en voz alta.Bueno,yo era un chico muy estudioso,muy repelente y marginado,cuando una chica se fijó en mí.Yo era la persona más feliz del mundo.Hasta que fue elegida.Entonces yo era un crío,pero no estaba dispuesto a dejar escapar a aquella persona que se fijó en mí cuando nadie antes lo había hecho.Me alisté en la armada,no me preguntes cómo lo hice,ya que no puedo decírtelo.Me volví más duro,dejé mis estudios,era un tío respetado.Paul Mur representaba el nombre de una persona que no quiero volver a ser.

-¿Qué pasó con la chica?-pregunto curiosa.

-Cuando la vi por primera vez aquí,no sabía quién era yo,es decir,no sabe que yo,soy yo.Cambié mucho mi aspecto físico y también el mental.Pero cada vez que la veo es como recibir puñaladas en el corazón una y otra vez.