Troublemaker

Capítulo 25:El día después

Hago una bola de papel y lo tiro al suelo,mientras se amontona con los demás.Y aquí estoy yo,preparando la estrategia para atacar a Lando.Decidida a evitar a toda costa a Paul y a todos sus intentos de seducirme.Nosotros en plena guerra y él intentando besarme a cada segundo.Vuelvo a poner el papel sobre el lápiz,pero las ideas se me apagan de nuevo.Es de madrugada,no he dormida nada,comido nada,pero sin embargo intento hacer las cosas como puedo.Pasan muchas horas cuando los planes de ataque y las defensas acuden a mi cabeza.Decido hacer un plano parecido al anterior,haciendo unos pequeños cambios,como poniendo a Geena lejos del portón donde nos esperan los soldados,a Matt siempre a mi lado,a Adrian,Megan,Debbie,Paty y Richard también lejos.Pero a Paul,a él le tengo en la línea frontal,lo más lejos posible de mí.Me levanto del escritorio y me desperezo.Ya deben de haber servido el desayuno,por lo que no me molesto en cambiarme,siguiendo con el uniforme puesto y colocándome la gorra haciendo parecer mis ojeras invisibles,aunque nada puede hacerlo.Bajo las escaleras,con una energía renovada,sin saber de donde narices la he sacado,pero sigo adelante.Cuando entro en la sala,descubro que el desayuno se ha pasado de hora,todos están en la sala de entrenamiento,esperándome.Me saco el papel del bolsillo en el que estaba guardado y me acerco al centro.Engancho el papel a la pizarra con unas pinzas y me vuelvo hacia los soldados que están hablando sin parar.Carraspeo para llamar su atención pero a la segunda de cambio considero la opción de ponerme firme.

-¡CALLAOS DE UNA MALDITA VEZ!-grito con una voz potente.

La sala enmudece de pronto.Me dispongo a contar el plan,con todos los cambios,las posiciones y todo lo necesario.Mientras estaba en la mitad alguien abrió la puerta con un estruendo.En seguida pude ver a Maine y sus respaldos,poso los brazos en la cadera,formando una jarra y acaparo su mirada.

-¿Desea algo?-pregunto con aire de suficiencia.

Él sonríe mientras toma asiento donde los demás soldados.

-No,por favor,prosiga.-dice con un dedo señalando la pizarra.

Asiento y sigo contándolo.Él asiente a todos los comentarios sobre el por qué de algunas preguntas que me lanzan sospechosamente.Cuando termina,Maine se aleja pacíficamente con sus guardaespaldas,sin lanzar ninguna mirada ni ningún comentario propio de él.Alejo de mi cabeza todas las ideas posibles y me dispongo a recoger mis cosas.Paul se acerca a mí.

-Así que...Tú estás en el frente y yo en el extremo derecho.Extremo,extremísimo quiero decir.-me dice frunciendo el ceño,aparentemente divertido.

Rodeo los ojos y cojo el papel,mientras me lo guardo en el bolsillo doblándolo cuidadosamente.

-Exactamente eso,me alegra que hayas prestado atención.-respondo cansada.

Me voy aún más cansada,sintiendo las piernas pesadas,el estómago rugirme,pero aún así no paro a descansar,ya lo haré cuando tenga más tiempo.Justo antes de entrar en mi habitación,noto que alguien me coge de los hombros,me presiona contra su cuerpo,por el que puedo deducir que es un hombre,así que mi primer instinto es darle un puñetazo en la tripa y deshacerme de su enganche,dandóme la vuelta.Cuando veo a Matt de rodillas cogiéndose la tripa,abro la boca sorprendida y le ayudo a levantarse.

-Perdona,perdona...No sabía que...Eras....Tú.-me disculpo entre jadeos.

Él niega con la cabeza y traga saliva.

-No te preocupes,estoy bien.Si un simple puñetazo me derribara,no estaría aquí,¿no crees?-me dice recomponiéndose del todo.-Aunque,menuda derecha tienes,amiga.

Sonrío ante su último comentario.

-De todas maneras,¿qué haces pillándome desprevenida?¿Qué pasa?-pregunto algo curiosa.