Burn the night away ( Un fic de The GazettE)

Capítulo Veintidós : De vuelta a casa.

Aoi pov.

Ya en el bar junto con Aya no era capaz de pensar en otra cosa que la cara que coloco Leslie cuando la chica sentada frente a mí apareció en el departamento, me sentía confundido y culpable, Leslie pareció extremadamente triste se dio la vuelta y desapareció en la oscuridad del pasillo, no supe que hacer, no podía ir tras ella porque Aya estaba ahí, así que simplemente me marche y ahora me arrepentía de ello.

-¿Yuu, que te pasa? – dijo riendo – Estas muy callado – sacudí mi cabeza y trate de sonreír

-Lo siento, he estado algo ocupado, entonces… - bebió de su copa y la dejo sobre la mesa

-Esa chica en tu departamento es bastante rara

- Leslie, ese es su nombre

- “Leslie”, no me gusta cómo suena…- arrugo la nariz

-Tal vez a ella le guste como suena el tuyo – dije de golpe, me observó extrañada

-Bueno, después de todo es extranjera… - el silencio se hizo sobre nosotros y caí en cuenta de que a diferencia de hace dos años atrás esta chica ya no me llamaba la atención en absoluto, no me parecía interesante, y no supe por qué seguía allí con ella, supuse que por simple educación

- Dijiste que era la novia de tu primo

- Si

- ¿Y por qué estaba ahí?  - ¡¿Por qué no dejas de hacer preguntas?!

- ¿Tienes un micrófono escondido en tu bolso o qué?

- ¡Claro que no!, es solo curiosidad

-Si de curiosidad se trata, entonces ¿Puedo saber por qué me llamaste?

-Solo digamos que te extrañaba – manifestó con un guiño que me pareció completamente innecesario, le sonreí falsamente – Ese primo tuyo tiene un gusto extraño por las chicas, ¿No?

- ¿Por qué lo dices? – se encogió de hombros         

-Bueno, ella se veía… simple

- A veces no es necesario que una chica use ropa lujosa para que alguien se fije en ella

-¿Estás hablando en serio? 

-Claro – me sorprendí de las palabras que salieron de mi boca, ni siquiera las pensé, así que asumí que era algo que de verdad sentía          

-¿Entonces preferirías que para la próxima saliera con pantalones desteñidos, la camiseta de un equipo de baloncesto que nadie conoce y zapatillas desgastadas? – pregunto describiendo la tenida que había visto en Leslie hace un rato, y fue ahí cuando caí en cuenta de lo equivocado que estuve al salir con ella, era bonita, pero vacía y enteramente superficial.    

Leslie pov.

Allí estaba, encerrada en el baño del apartamento, sentada en la fría cerámica de color blanco abrazándome las rodillas como chiflada, torturando a mi conciencia, mi orgullo y mi autoestima, cuando oí unos golpes en la puerta, decidí fingir que no los había escuchado y escondí mi rostro entre las rodillas, otros cuatro golpes dieron de lleno contra la puerta, fruncí el ceño, no podía tratarse de Aoi, él tenía llaves así que solo habría entrado, además llegaría tarde, si es que llegaba… nuevos golpes, tampoco podía ser Reita, él no habría tocado con tanta agresividad, ¿Entonces quién demonios era?, antes de que la magnitud de los golpes aumentara y despertaran a mi hijo, me incorpore y fui a la sala, con cierto pesar abrí la puerta y un par de brazos se aferraron a mi cuello tomándome por sorpresa.