Someday (I'm here for you II) |l.t|

3. And there is nothing worse than "too late".

~~Emma~~

Octubre 15, 2012. 5:00 pm

Iba saliendo del Milkshake City, directo a mi segunda cita con Hayley. Estaba nerviosa y apretaba constantemente mi bloc de notas. Ni siquiera sabía por qué estaba tan nerviosa.

Comencé a tararear la canción que sonaba en mi carro, que estaba conectado con el mp3. Las canciones que Louis había puesto siempre lograban calmarme. 

Amaba cuando Louis me cantaba al oído antes de dormir.

Amaba cuando Louis me cantaba.

Amaba cuando Louis cantaba.

Amaba cuando Louis era Louis.

Amaba a Louis.

Lo amo.

Me pasé las palmas de las manos por los asientos del coche y conté hasta diez. Conté hasta diez, diez veces. Creo que era solo el hecho de pensar que en realidad estaba tocando fondo. Me sentía como tocando fondo, desde el 24 de septiembre, solo que no quería reconocerlo. No quería aceptarlo y mucho menos a Sophie, que fue la de la idea de la psicóloga, pero yo sabía que ella ya lo sabía. Me conocía más que nadie y creo que se notaba demasiado en mi cara. Por más que trataba de fingir, sabía que era inútil.

Reconozco una causa perdida cuando la veo. Solo fallé en eso una vez.

Luego de pensar unas 5 veces en comenzar a conducir, me decidí por llamar a mamá primero;

"-Hola mamá.

-Estaba preocupada por ti. Te he llamado muchas veces y no me has devuelto las llamadas en dos semanas, Emma.

-Lo sé, lo siento, he estado un poco… ocupada. Ya sabes, trabajo, ballet…

-No tienes que mentirme, Emma. Sé lo que pasó.

-Sophie- gruñí.

-No importa quién. Quiero saber realmente cómo estás.

-¿Quieres que sea sincera?

-Es todo lo que pido.

Suspiré por su elección de palabras. Tomé una nota mental. Cuanto más tratas de olvidar a alguien, el universo parece confabularse en tu contra para recordártelo hasta con el más mínimo detalle.

-No me siento bien, pero he tenido días peores. Creo que estaré bien.

-Ese chico… Está en todas las revistas.

-Probablemente. Es exageradamente famoso.

-¿Lo quieres?

-Cada minuto que pasa.

-¿Entonces por qué lo dejaste ir? Escucha, Emmy, no quiero confundirte, pero el peor error de mi vida, fue dejar ir a tu padre y… cuando me di cuenta de lo mucho que lo amaba, era demasiado tarde. Y no hay nada peor que demasiado tarde.

Mis pedazos rotos estaban palpitando con fuerza por su confesión. Estaba poniendo sal a la herida y dolía. Demasiado.

-No sé qué decir…- Respiré profundo y cerré mis ojos con fuerza, tratando de alejar los pensamientos que me atormentaban desde ese día.

-Está bien. No tienes que decir nada. Solo sentí la necesidad de decirte eso.

-Sí está bien. Yo… Gracias, por compartir eso conmigo…