A Primera Vista... [Larry Stylinson]

Capítulo 3

3 años más tarde.

Louis tenía una enorme lista de libros en la cabeza y no era que hubiera dejado de pensar en Harry, claro que no, él era lo primero que cruzaba por su mente al despertar desde los últimos tres años. Creía que era un amor pasajero que en unos meses ya no sentiría pero realmente se había equivocado y no acostumbraba a hacerlo. Sus amigos diariamente le insistían que se animara a hablar con ese chico que le robaba los sueños pero ¿Cómo hacerlo? Su simple presencia lo hacía temblar como si sus piernas estuvieran hechas de gelatina, aparte de que seguramente se sonrojaría como un tomate. Era imposible.

Caminó por los estantes de libros como siempre en esos últimos años. Al entrar no había visto a Harry y eso le extrañó debido a que esa era la hora en la que siempre lo veía en la biblioteca.

Siempre lograba acomodar sus horarios para toparse con Harry, eso era lo que lo motivaba, saber que se lo iba a topar en ese preciso momento del día. 

Miró detenidamente todos los libros que tenían distintos títulos y autores. Las portadas eran coloridas y lo hacían tener aunque sea una idea cercana de lo que le iba a decir el libro. En esa ocasión no pensaba tomar uno al azar, tenía uno en mente… “cuando te encuentre” de Nicholas Sparks. No sabía en qué momento se había convertido ese en su autor favorito, tal vez desde que seguía los libros de Harry, pero muy individualmente de eso, sabía describir los sentimientos de una forma tan increíble y real en los libros que simplemente si el personaje principal se sentía triste, él igual lo hacía.

Había dado varias vueltas en todo el lugar pensando en que lo mejor hubiera sido pedírselo a la encargada para evitarle la agotadora búsqueda. Ya iba a rendirse cuando de repente lo vio. Sonrió para si mismo, llevaba un tiempo queriendo leerlo así que sin más dirigió una de sus manos al libro, pero otra mano llego al mismo tiempo que la suya impidiéndole que tomara la novela que tanto quería leer. Arrugó el entrecejo molesto, no podía dejar que alguien le quitara la oportunidad de tomarlo. Volteó a un lado y se topó con unos hermosos ojos verdes que simplemente hicieron que todo su cuerpo se estremeciera logrando que retirara la mano rápidamente para evitar todo contacto… era Harry y simplemente que lo hubiera tocado hacia que sintiera que su piel se quemaba.

- Harry – susurró de una forma en la que el otro chico alcanzó a escuchar.

Vio como Harry abría los ojos con sorpresa, tal vez al darse cuenta de que un desconocido para él se sabía su nombre. 

Instintivamente Louis se llevó las manos a la boca para tapársela y su mente no pudo evitar pensar que seguramente cada persona tenía en el corazón tenía un medidor que indicaba cuanto podía soportar un amor no correspondido.

- ¿Por qué sabes mi nombre?

La voz ronca de Harry salió con esa misma sorpresa que había reflejado su rostro al escuchar a Louis. 

Jamás había escuchado su voz en esos tres años pero si de algo estaba seguro era que aquella voz simplemente era hermosa a pesar de ser ronca. Harry era perfecto…

Louis pensó simplemente que aquella era la oportunidad de su vida. Aunque declararse o no a la persona amada depende de la confianza que se tiene en uno mismo, debido a que le había hablado de repente, debido a la sorpresa y el entusiasmo sus sentimientos se desbordaron y rebasaron todo lo que el medidor de su corazón podía aguantar. No sabía cómo reaccionar así que dijo lo que se le cruzó por la mente en ese momento.

- Me gustas… Harry – dijo más sonrojado de lo que se podía y calló en cuenta de sus palabras sintiendo que su nerviosismo aumentaba.