O.S 🌸 [crewt]

3: Poción nocturna

Credence veía el reloj a cada minuto, llevaba horas así, preocupado de que Newt aún no entrará a la habitación para acostarse a dormir, ya era muy tarde. Desde hacía un tiempo, sino es que desde que él llegó allí, dormían juntos.

Todo eso porque Credence tenia pesadillas acerca de su pasado, Newt había sido muy amable de haberle dejado la habitación de la maleta -la cual compartían-, debido a que en donde se quedaba en Londres -momentariamente-, sólo tenía una habitación. Era un modesto apartamento de una habitación, perfecto para una persona que viaja mucho.

Credence se bajó de la cama, caminando a paso decidido a donde su compañero de habitación se encontraba. Un maestro de Hogwart -no se acuerda quien- le había pedido a Newt su ayuda, pidiéndole una poción hecha con veneno de Swooping Evil. No sabía para qué, pero realmente no le importaba.

Lo único que le importaba en ese momento era que Newt aún no se había ido a acostar y era realmente tarde. La posición le había tomado todo el día y noche, no había podido pasarla con él, ni hablado siquiera, sólo le había podido ver cuando corría de un lado a otro en busca de cosas necesarias para la poción.

Credence se sentía algo solo, aún estando rodeado de las criaturas y pasando las horas con ellas. Desde que había conocido a Newt y al pasar de los meses, entre ellos empezó a nacer algo más que una simple amistad. No supo cómo empezó, pero sin darse cuenta, las mañanas y saludos de buenos días estaban acompañados con un beso vespertino.

Credence se paró frente a la puerta que daba entrada a la salida y pequeño laboratorio de la maleta, Newt se había encerrado allí, saliendo una que otra vez. Credence podía oír todo el día como las cosas se movían y los pasos apresurados de Newt de un lado a otro.

Empujó la puerta ligeramente, está vez todo dentro se escuchaba tranquilo y silencioso.

"¿Se habrá quedado dormido?"  Pensó Credence. Cuando abrió toda la puerta y entró, se encontró con Newt, que estaba sentado en el piso recostado de las escaleras, rodeado de libros y papeles con un tazón en su regazo con una mezcla rara, en su mano se hallaba una paleta.

Credence subió su vista hasta el rostro de Newt, evitó reírse con mucho esfuerzo, Newt estaba dormido allí estando aún sosteniendo la paleta dentro del tazón.

"Debe estar muy cansado"  pensó mientras se acercaba a él y se sentaba a su lado, sin hacer ruido alguno y con movimientos lentos, no quería mover nada.

Se quedó un momento viendo su perfil, embobándose por completo. Para Credence, Newt era perfecto, no sólo era una persona increíble con gran corazón, sino también un hombre muy guapo. Tenía suerte de que esa gran persona frente a él, le hubiera salvado.

Limpio con delicadeza una manchita que se encontraba en la mejilla de Newt, este no despertó pero hizo una mueca muy graciosa, Credence río bajito.

Notando que al hacer eso Newt no despertó, decidió entonces hacer algo más, aprovechando que dormía.

Desde hacía un tiempo, Credence quería hacer aquello.

Con nervios, se acercó más al rostro de Newt, y beso su nariz. Aquella nariz rodeada de pequeñas pecas que a veces, cuando Newt dormía y el despertaba primero, se perdía contándolas.

Cuando abrió los ojos, no pudo más que sonrojarse, Newt le veía con una enorme sonrisa en el rostro y un ligero rosa naciendo en sus mejillas por haber encontrado a Credence con las manos en la masa.

-Hola Credence -saludó sentándose mejor y dejando el tazón en otro lado, no sabía cuando se había quedado dormido. Pero le alegró mucho lo que vio al despertar.

Credence, aún sonrojado, se tapó la cara con ambas manos. Newt río un poco, no importaba qué o cuánto tiempo pasará, Credence era mucho más penoso que él. Le gustaba ciertamente.

Newt subió la mirada al reloj sobre la puerta, se sorprendió ¡era muy tarde! Menos mal ya había terminado, sólo le faltaba colocar la poción en un frasco. Se la llevaría a Dumbledore a primera hora en la mañana.

-¿Ya terminaste? -preguntó Credence, ya no tenía las manos en su cara y el rojo de sus mejillas ahora era sólo un rosa pálido.

Newt asintió -¿Qué haces despierto? -preguntó mientras se levantaba.

-Yo... te estaba esperando -confesó Credence aceptando la mano de Newt para levantarse.

Cuando cruzaron miradas, ambos estaban sonrojados. Newt por el simple hecho de escuchar que Credence le esperaba para dormir y Credence por la pena.

-Deberíamos acostarnos -propuso Newt sujetando mejor la mano de Credence para salir de la habitación e ir a la cama.

Cuando entraron a la habitación juntos, Credence se acostó mientras Newt se arreglaba.  El Obscurial observaba cada pequeño movimiento que Newt hacia al pasear por la habitación en busca de su pijama. Se sonrojo como todas las noches cuando Newt se empezó a desvestir, sin darse cuenta empezó a perderse en las pecas de su espalda que poco a poco desaparecían al ir bajando la mirada. 

Newt giró sin darse cuenta de que Credence le veía, el menor desvió la mirada nervioso de haber sido descubierto. Newt sin saber el por qué de su reacción, no le dio importancia y se acerco a la cama para dormir con Credence. 

El mago se tapo con la cobija y se acercó a besar la frente de Credence como hacía todas las noches, mientras se acomodaban en la cama, abrazándose a él y deseándole las buenas noches.

Credence, sintiéndose cálido y seguro entre los brazos de Newt, beso de nuevo su nariz, deseándote igualmente las buenas noches -me gustan tus pecas - confesó, dejándose abrazar por el mayor y cayendo en un profundo sueño.

-A mi me gustas mucho tu, Credence -Susurro Newt.