Capítulo XVI

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Derek...

El agua me relaja, realmente quería ducharme con ella, pero primero debo explicarle las cosas, y decirle lo que realmente está pasando entre Ashley y yo.

Me rebane los sesos por no entrar y pegarla a la pared, tocarla con tanta delicadeza, el besar cada parte de su cuerpo, no dejar ni un solo rincón sin saborear de ella, estoy excitado solo imaginando su cuerpo bajo el mío, dejo que el agua caliente se termine y recibo de buen agrado el chorro de agua fría.

Salgo a la habitación, está vacía, la cama echa y sobre ella uno de mis chándales junto con unas de mis playeras, me cambio y voy a buscarla, aún no ha dejado de llover, busco a Alexa y la encuentro en la cocina sirviendo una taza de café, hago ruido y me ve de una manera tan intensa que se me corta la respiración.

- ¿Quieres una taza de café? -Pregunta tímidamente.

-Por favor -Es lo único que logro decir.

Me acerco a la mesa donde pone las dos tazas, me siento frente a ella, tomo la taza entre mis manos, tiene la mirada clavada en su café, su cabello cubre parte de su hermoso rostro, no sé por dónde empezar, tengo que explicarle todo lo que paso anoche y mucho tiempo antes.

-Lo que te dije anoche en la cena es verdad, quiero tratarte como algo más que una amiga

-No creo que tu prometida este de acuerdo con eso -Su voz es distante y fría o al menos trata de serlo.

-Yo no estoy comprometido con Ashley ni con ninguna otra mujer -Por fin levanta la vista, está nerviosa porque no deja de morderse el labio inferior. -Déjame explicarte como pasaron las cosas.

-Te escucho

-Yo estuve comprometido con Ashley, hace dos meses ella termino nuestra relación sin decirme porque solamente se fue.

- ¿Todavía la amas? -Esa pregunta me toma desprevenido, no porque no sepa la respuesta, el hecho es que no quiero sonar patán al decir la verdad, me quedo callado -Por favor dime tú lo que sientes, no quiero hacer yo mis propias conjeturas.

-No, no mal interpretes mi silencio, pero decir la verdad en voz alta me convierte en un patán y no quiero cambiar la imagen que tienes de mi.

-Solo dime la verdad, prometo no juzgarte -Dice con una mirada decidida.

-No, y siendo honesto nunca la ame.

-Pero te ibas a casar con ella.

-Confundí pasión y lujuria con amor y eso me llevo a comerte la estupidez de pedirle matrimonio a Ashley, antes de venir para acá, quedo todo claro entre ella y yo -Me ve con melancolía y quiero borrar esa mirada de su rostro. -Hace dos meses ella termino lo nuestro y ahora soy yo el que no quiere nada con ella, quiero estar contigo, que todos se enteren que estamos juntos, no quiero esconder lo que siento por ti, sé que te prometí ir despacio y eso haremos, pero quiero que quede bien claro una cosa y es que no amo a Ashley.

Se dibuja la sonrisa más linda y tierna que una vez haya visto, ilumina toda la habitación, me levanto y la tomo entre mis brazos, la pego a mi todo lo que puedo y le doy un beso, es tan dulce poder sentir el calor de sus labios, su sabor, hunde sus manos en mi cabello me atrae hacia ella, la necesito, bajo mis manos hasta su trasero, dejo de besar sus labios para trazar pequeños besos por su mejilla y llegar a su cuello, su respiración se descontrola y su pulso se vuelve errático, como el mío, no había deseado tanto a una mujer como Alexa y ninguna otra me ha excitado como ella.

-Esto no es ir despacio -Dice entre jadeos, doy un último beso en la base del cuello, para depositar uno tierno en sus labios.

-Tienes razón, cuando estoy contigo no me puedo controlar, perdóname.

El Sonido del AmorWhere stories live. Discover now