Goku
¿Dónde está?
Sé que ella estaba en una relación con alguien, me lo dijo y sin embargo no le di importancia porque ella tenia su vida y yo la mía, pero luego de iniciar nuestra relación olvidé en totalidad que Milk siguiera con él, asumí que era mía, aunque no la viera seguido por lo ocurrido con mi hijo, pensé que llamarla no hacía falta, me vendría a buscar o yo a ella, cual sea de las dos opciones estaba bien.
Pero no hubo nada.
No supe nada de ella por mucho tiempo y aunque yo encubría mi ausencia para estar pendiente de mi hijo, olvidé que ella cargaba con el nuestro, debería darme una bofetada por ser un imbécil.
Nean estaba recuperándose con éxito de su enfermedad, Gohan es su motivación, mi pequeño fue recluido a un centro de recuperación, por no decir un centro psiquiátrico que aún lo tenían en observación porque se ha rehusado a hablar y temen que se le baje la presión por el constante miedo que carga.
Me lo dañaron.
Maldigo mil veces a la persona que le causó ese trauma, y no dejo de recriminar mi error por no protegerlo más, guardo mi celular en el bolsillo de mi bata medica con la ultima llamada que ella no me contesta, agarro la tabla revisando varios informes de pacientes de sus procesos de recuperación, soy un médico en el área de la salud mental, en simples palabras un psicólogo y postulante a psiquiatría, llego a la habitación de mi hijo, esta parte es un poco difícil, porque verlo trazar líneas en el papel no es buena señal y mucho menos el que suelte un quejido con el sonido de la puerta cerrándose.
Y el verme no le calma.
Ojeo su dibujo, aprieto los labios y me siento en el suelo con el monto de juguetes alrededor que no le pueden causar algún daño, le hago preguntas, le hablo de modo profesional y como padre, intento incluirme en su espacio, pero veo negación de su parte y es mejor no presionar.
—¿Quieres ver algo de televisión? —pregunto, él deja su lápiz y me mira por unos instantes antes de bajarlos con nervios.
¿Por qué me tiene miedo?
—Barbie. —dice muy bajo, habló, mi niño habló, casi inaudible, pero habló y cada avance por pequeño que sea cuenta y mucho.
—Vale. —le sonrío levantándome y encender la televisión.
Pero al encenderlo lo primero que da es la noticia de un recién casamiento que se realizó hace pocas horas, lo primero que noto es que este es el área de noticia por lo que Gohan ha estado informándose del mundo exterior, lo conozco, a él no le suele llamar la atención este tipo de canal, pero todo lo que estaba analizando se va por la borda al ver un video corto del "sí" de los esposos.
Black Emblem y su esposa Milk de Emblem.
Oh.
Mierda.
Mencionan su embarazo, el hijo que ellos esperan con entusiasmo, según declaraciones.
El hermoso vestido que porta, mejillas sonrosadas y lo bella que se ve con su vientre crecido, y la arrogancia mezclado con elegancia de su esposo me da un fuerte mal sabor de boca, siento que puedo vomitar mis intestinos y que mi cabeza es un lio total.
Su hijo, hijo que carga en ella es de Black, no mío, suyo, de él. ¿es verdad? ¿mentira? ¿Por qué? ¿el bebé es mío o de él?, tuvo relaciones con su pareja antes que tú, te lo dijo, sí, recuerdo que lo mencionó, pero... te mintió, ella siguió con él, se revolcó con él, tiene un bebé que es de él.
Me niego a todo lo que me abruma y corro a la ventana, la abro y expulso el vomito que me amarga más.
—Él... lo hizo dormir.... Él lo hizo. —respiro hondo y me volteo con rapidez a ver a mi hijo que mira con horror al tal Black que da unas declaraciones, retrocede y tapa sus oídos, intento tranquilizar mi respiración y bloquear mis traicioneros pensamientos.
Me acerco, miro entre el hombre en la televisión y mi hijo.
Y el recuerdo de cuya persona en mi infancia aparece como una bala que me cala y me eriza la piel.
¿No qué había muerto?
.....
Nos acercamos al final uwu
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No Soy Juguete De Nadie II✔
FanfictionLas lecciones de la vida pasan, otras se toman una pausa que parecen estar concluídas sin siquiera el adiós dicho y unas vez te das cuenta que lo que creíste concluido vuelve a retomarse con una fuerza que te arrasa hasta el ultimo suspiro, sabrás q...